Los cient¨ªficos vuelven a casa

Cuando acabaron sus carreras universitarias ten¨ªan claro que quer¨ªan dedicarse a la ciencia pero tener un perfil investigador en Espa?a exig¨ªa marcharse fuera a aprender, curtirse y crear sinergias con equipos extranjeros, y despu¨¦s intentar volver y traerse toda esa experiencia. ¡°Eso es al menos lo que me vendieron a m¨ª¡±, afirma uno de ellos. Un centenar de investigadores ha regresado a la Comunidad Valenciana de la mano del programa GenT, creado por el Gobierno valenciano en 2018 para recuperar, ...

Cuando acabaron sus carreras universitarias ten¨ªan claro que quer¨ªan dedicarse a la ciencia pero tener un perfil investigador en Espa?a exig¨ªa marcharse fuera a aprender, curtirse y crear sinergias con equipos extranjeros, y despu¨¦s intentar volver y traerse toda esa experiencia. ¡°Eso es al menos lo que me vendieron a m¨ª¡±, afirma uno de ellos. Un centenar de investigadores ha regresado a la Comunidad Valenciana de la mano del programa GenT, creado por el Gobierno valenciano en 2018 para recuperar, atraer y consolidar el talento en el sistema valenciano de I+D+i.

El programa comenz¨® con un presupuesto de siete millones de euros, que han aumentado hasta los 12 anuales. Las becas son de cuatro a?os con posibilidad de una pr¨®rroga de dos m¨¢s y van dirigidos a investigadores con experiencia internacional y trayectoria de excelencia en el caso de los m¨¢s cualificados. ¡°Algunos que est¨¢n 10 a?os fuera de Espa?a, con la calidad profesional y personal que tienen, se han abierto la puerta en otros muchos sitios; si queremos que vengan, tenemos que apostar muy fuerte por ellos¡±, explica ?ngel Carbonell, director general de Ciencia e Investigaci¨®n de la Consejer¨ªa de Innovaci¨®n, Universidades, Ciencia y Sociedad Digital.

El astr¨®nomo Iv¨¢n Mart¨ª, de Alfarras¨ª, es de la primera hornada de GenT. Participa en el proyecto Event Horizon Telescope (EHT) que logr¨® fotografiar por primera vez un agujero negro. Este radioastr¨®nomo, de 41 a?os, se dedica a observar agujeros negros supermasivos y explosiones supernova. La colaboraci¨®n con EHT es en la que est¨¢ metido con m¨¢s ah¨ªnco pero tambi¨¦n se dedica a la geodesia.

Mart¨ª estuvo dos a?os y medio en Alemania, con una beca postdoctoral, y m¨¢s de siete a?os en el Observatorio Astron¨®mico de Onsala, en Suecia. Se fue por necesidad profesional y ha pasado a?os intentando volver. ¡°Una vez tienes familia no solo cuentan los factores profesionales. Estaba ¡°de cine¡± en el pa¨ªs escandinavo porque se invierte mucho en ciencia y la burocracia es m¨¢s flexible para la investigaci¨®n¡±. Pero tiene un hijo con necesidades especiales y estar lejos de la familia les supon¨ªa a su pareja y a ¨¦l un gran desgaste. Fue la raz¨®n principal para regresar. Sin embargo, lleg¨® la crisis, la inversi¨®n en investigaci¨®n se desplom¨® y la esperanza de volver a Espa?a se disip¨®. ¡°Estuve intent¨¢ndolo varios a?os, prob¨¦ muchas v¨ªas e incluso me plante¨¦ seriamente dejarme la investigaci¨®n, apuntarme al paro y trabajar en lo que saliera¡±, explica.

Se marc¨® hasta finales de 2018 y justo entonces salieron las oposiciones a astr¨®nomo del Estado, las aprob¨® y el primer d¨ªa de trabajo en el Observatorio de Yebes le lleg¨® un correo de la Generalitat acept¨¢ndolo en el plan GenT. ¡°Es un programa de atracci¨®n de talento pero la estabilizaci¨®n en un puesto de investigaci¨®n no es segura, por eso me cost¨® decidirme. Pero, como dice James Bond, en el riesgo est¨¢ el placer. Y decid¨ª arriesgarme. Algunos conocidos me dijeron que estaba loco pero renunci¨¦ a mi plaza y ahora estoy en Valencia¡±, recuerda.

La experiencia es muy positiva y el programa ¡°indispensable¡± y aunque hay posibilidad no hay garant¨ªa de estabilizaci¨®n al final del camino. ¡°No ocurre como en otros pa¨ªses donde si has cumplido una serie de requisitos [un n¨²mero m¨ªnimo de publicaciones o llevar a buen t¨¦rmino un proyecto de investigaci¨®n] te dan autom¨¢ticamente un contrato permanente. Aqu¨ª todav¨ªa no es posible¡±, apunta Mart¨ª.

Nacida en Roma, Silvia de Santis, de 38 a?os, entr¨® en el GenT de 2021 y se ha incorporado hace poco tiempo. Ella hizo el doctorado en F¨ªsica en la Universidad de Roma y la resonancia magn¨¦tica es su especialidad. Realiz¨® el postgrado en Cardiff y consigui¨® una beca para conocer otros laboratorios y as¨ª fue como aterriz¨® en el Instituto de Neurociencias de Alicante. Las ¨²ltimas convocatorias de GenT abrieron la posibilidad no solo a los investigadores que vienen de fuera sino a los que ya estaban en el plan valenciano en una modalidad de menos a?os de experiencia, as¨ª que la investigadora lo aprovech¨® para dar continuidad a su trabajo.

Esta investigadora busca la manera de detectar el grado de inflamaci¨®n del cerebro a trav¨¦s de una metodolog¨ªa no invasiva como es la resonancia. Trabaja en el instituto alicantino, que es un centro mixto del CSIC y de la Universidad Miguel Hern¨¢ndez de Elche ¡°La ayuda econ¨®mica del GenT es importante y el programa me parece una buena opci¨®n aunque siempre hay margen para mejorar. Por ejemplo, la Generalitat nos pide peri¨®dicamente feedback y mi experiencia es que nos han tomado muy en serio e intentan mejorar a?o tras a?o la convocatoria¡±. La investigadora aplaude la cofinanciaci¨®n progresiva a que obliga el programa: ¡°Creo que la Generalitat trabaja muy bien para transmitir que esto son becas que se dan para que luego el centro donde trabajas encuentre la manera de estabilizar al investigador¡±, concluye.

Jos¨¦ Jaime Baldov¨ª, de X¨¤tiva y 35 a?os, es qu¨ªmico de formaci¨®n y ahora investiga en el Instituto de Ciencia Molecular (ICMOL) de la Universitat de Val¨¨ncia gracias a GenT. Hizo all¨ª su tesis doctoral y cuando acab¨® accedi¨® busc¨® al Instituto Max Planck para la Estructura y Din¨¢mica de la Materia de Hamburgo. Fue un cambio radical: ¡°Yo ven¨ªa de la qu¨ªmica y del magnetismo molecular y me puse a trabajar con f¨ªsicos, fue como empezar de nuevo y eso en ciencia es clave. Salir de la zona de confort, irse fuera te abre mucho la perspectiva¡±, asevera.

La estancia en el extranjero de este investigador fue corta, dos a?os, y justo entonces apareci¨® el programa Gen-T y le atrajeron mucho las condiciones del plan. ¡°Eran contratos con las mismas condiciones que ten¨ªa en Alemania y que me permit¨ªan volver a Valencia y recuperar el arraigo e investigar en el ICMOL, un instituto de primera divisi¨®n¡±.

Baldov¨ª estudia el dise?o de nuevos materiales a muy peque?a escala con propiedades magn¨¦ticas que sean interesantes para diferentes aplicaciones. A corto plazo es ciencia b¨¢sica y a largo se trata de abrir una nueva v¨ªa para sustituir a la electr¨®nica. ¡°Mi proyecto es una l¨ªnea estrat¨¦gica, que no exist¨ªa en el Instituto, y que viene de lo aprendido de Alemania combinado con el background que ten¨ªa¡±, a?ade.

El qu¨ªmico reconoce que no hay mucha gente en Espa?a que pueda dedicarse en exclusiva a la investigaci¨®n y apunta que los GenT han creado la asociaci¨®n Accent, donde hay perfiles que est¨¢n desarrollando su propia spin-off. La Asociaci¨®n Valenciana de Empresarios ha contactado con ellos y est¨¢ interesada en conocerles. ¡°Veo el plan Gen-T una oportunidad para la Comunidad Valenciana porque abarca todos los campos del conocimiento y hay gente que tiene una visi¨®n empresarial¡±, opina.

Para Baldov¨ª es muy importante que se visibilice la figura del cient¨ªfico, que sea una carrera atractiva. ¡°La ciencia es un mundo donde uno se gu¨ªa por la curiosidad e intenta buscar las mejores respuestas, y esas respuestas no tienen que estar siempre al lado de casa¡±, reflexiona.