El voto en vilo del campo andaluz
Los partidos buscan el apoyo del sector agropecuario, que llega a las elecciones inmerso en un profundo malestar y recelo hacia los pol¨ªticos
En el grupo de WhatsApp que comparten muchos agricultores de la comarca del Aljarafe sevillano y de Utrera hace meses que sus miembros solo intercambian mensajes con quejas: los bajos precios de sus productos ¡ªaceituna de mesa, pero tambi¨¦n fruta y cereal¡ª; el coste de producci¨®n agravado por el encarecimiento de los carburantes, los productos fitosanitarios y las complicaciones para contratar mano de obra por la reforma laboral; la competencia con terceros pa¨ªses; la falta de relevo generacional y la sequ¨ªa. El culpable siempre es el mismo: la clase pol¨ªtica en general. ¡°Muchas gracias, pol¨ªt...
En el grupo de WhatsApp que comparten muchos agricultores de la comarca del Aljarafe sevillano y de Utrera hace meses que sus miembros solo intercambian mensajes con quejas: los bajos precios de sus productos ¡ªaceituna de mesa, pero tambi¨¦n fruta y cereal¡ª; el coste de producci¨®n agravado por el encarecimiento de los carburantes, los productos fitosanitarios y las complicaciones para contratar mano de obra por la reforma laboral; la competencia con terceros pa¨ªses; la falta de relevo generacional y la sequ¨ªa. El culpable siempre es el mismo: la clase pol¨ªtica en general. ¡°Muchas gracias, pol¨ªticos, por defendernos de esta manera tan extraordinaria¡±, termina con iron¨ªa el v¨ªdeo de uno de ellos, en el que se ven decenas de tomates tirados en el suelo al pie de la mata.
El malestar que se aprecia en ese chat es una muestra a escala del que se percibe en buena parte del sector agr¨ªcola andaluz, con un enorme impacto no solo en la econom¨ªa de la comunidad ¡ªsupone el 11% del PIB y genera el 10% del empleo¨D sino en la espa?ola, donde acapara el 34% del peso total del sector agropecuario. La mitad de la superficie de Andaluc¨ªa es agr¨ªcola y el 50% de sus municipios vive casi exclusivamente del campo, de donde proviene el 30% de los votos, seg¨²n datos del Observatorio Econ¨®mico Andaluz. Los partidos que concurren a las elecciones del 19-J no son ajenos al enfado en el mundo rural ¡ªcada vez m¨¢s distanciado del urbano en todos los ¨¢mbitos¨D y saben que su apoyo puede ser determinante.
El mundo rural fue tradicionalmente un fort¨ªn del PSOE, que gobierna en el 65% de los municipios andaluces, pero el PP y sobre todo Vox ¡ªque ya fue la fuerza de derecha m¨¢s votada en las generales de 2019 en las provincias de Almer¨ªa, C¨¢diz, Huelva y Sevilla¨D buscan conquistar ese feudo aprovechando las grietas que ha abierto el descontento de agricultores y cazadores. ¡°Me niego a dejarle el campo a la extrema derecha¡±, sostuvo el candidato socialista Juan Espadas en plena pol¨¦mica por la propuesta de ley para regularizar 1.400 hect¨¢reas de regad¨ªo en Do?ana, presentada por PP, Cs y Vox y en la que el PSOE, que rige la mayor¨ªa de los ayuntamientos onubenses, se abstuvo (distanci¨¢ndose del rechazo frontal del Gobierno central). Esa iniciativa es uno de los ejemplos claros del envite de la derecha para cosechar apoyos en terreno socialista, un trasvase que ya han evidenciado varias encuestas.
¡°No estamos detectando esa fuga del votante socialista del mundo rural a Vox¡±, replica Gerardo S¨¢nchez, vocal socialista de la comisi¨®n de agricultura del Parlamento andaluz. S¨¢nchez reconoce, no obstante, que en el partido ¡°no se es ajeno a la incidencia de la entrada de Vox¡± en aquellos lugares en los que se vive del campo. ¡°Nuestra fortaleza en el mundo rural viene de muchos a?os, son nuestros alcaldes¡±, abunda. En el PP, la percepci¨®n es distinta: auguran un vuelco en la tendencia del voto en los municipios de 3.000 a 5.000 habitantes. ¡°El cambio social es evidente en el mundo rural¡±, indica Jos¨¦ Ram¨®n Carmona, vocal del PP en la misma comisi¨®n. Pero los populares tampoco perciben que Vox vaya a cumplir con las expectativas demosc¨®picas. La estrategia para capitalizar ese voto es patearse esos municipios vendiendo la gesti¨®n realizada desde la Junta. ¡°El mundo rural en Andaluc¨ªa es m¨¢s conservador y tradicionalmente tira hacia quien est¨¢ gobernando¡±, se?ala Carmona.
Los partidos deber¨¢n emplearse a fondo. En el chat de agricultores del Aljarafe y Utrera, por encima del malestar por la situaci¨®n del campo, lo que prima es la desconfianza ante la clase pol¨ªtica, sea del partido que sea. ¡°Llevo trabajando en el campo desde los 12 a?os y no conozco a ning¨²n gobierno que haya apoyado a los agricultores. No creo en ning¨²n partido¡±, explica Manuel Fraile, de 57 a?os, que, junto con su hermano, trabaja 35 hect¨¢reas de olivar y 40 de secano en Olivares (Sevilla, 9.452 habitantes). ¡°Llevo toda mi vida trabajando para ahorrar dos duros y cuando me jubile tendr¨¦ que vender mis tierras o alquilarlas porque mi hijo no quiere saber nada del campo, normal¡±, se queja, poniendo de relieve el envejecimiento del sector ¡ªdonde el 70% de los trabajadores sobrepasa los 50 a?os¡ª y la falta de relevo generacional.
Gabriel Ib¨¢?ez, de 53 a?os, tambi¨¦n es de Olivares y tambi¨¦n opina en el chat. ?l se considera conservador, pero es realista. ¡°Esto no se arregla en dos d¨ªas. Para hacer pol¨ªticas efectivas tienen que conocer el problema desde abajo y no veo a nadie que se acerque a estar con nosotros¡±, sostiene. En el grupo hay compa?eros que votan al PSOE, al PP o a IU. Ib¨¢?ez reconoce que todos comparten problemas y no aprecia cambios radicales de postura pol¨ªtica entre ellos.
Fractura entre el mundo rural y el urbano
En el PSOE preocupa la fractura entre el mundo urbano y el rural, una escisi¨®n por la que Vox ha colado su guerra cultural y de la que Crist¨®bal Corral, alcalde de Teba (M¨¢laga, 3.727 habitantes), donde IU gobierna con mayor¨ªa, lleva advirtiendo desde la pasada legislatura. ¡°La ausencia de una propuesta de futuro en el mundo rural por parte de la izquierda ha abierto un nicho a la extrema derecha que ha dibujado un presente y un futuro pensando en el pasado: en la agricultura y la caza, como si esos fueran los principales problemas de los j¨®venes que viven en los pueblos, cuando lo que interesa es que lleguen carreteras, el acceso a la vivienda... Vox centra el debate en dos conversaciones para las que no aporta soluciones, cuando en Teba, de 100 conversaciones, solo una es de la caza¡±, explica.
¡°La izquierda no ha sabido encajar la caza¡±, reconoce Juan Antonio Gil, de 32 a?os, cazador y concejal de IU de Obras P¨²blicas, Aguas, Infraestructuras y Caminos, Industria, Agricultura y Ganader¨ªa en Teba. ¡°Hay mucha desinformaci¨®n y estamos haciendo pedagog¨ªa. Ni los cazadores somos demonios ni la ley de bienestar animal es el final de la caza¡±, asegura.
Corral en el ¨¢mbito auton¨®mico y Gil en el local tratan de hacer pedagog¨ªa contra el discurso azuzado por Vox, y que apoya cierto sector del PP, de que la lucha contra el cambio clim¨¢tico, la Agenda 2030 o las pol¨ªticas consensuadas con Europa ¡ªsobre todo en materia de control sanitario y ahora la PAC¡ª son una clara amenaza a la viabilidad del sector. ¡°Hemos abandonado el discurso de que la tierra es para quien la trabaja, pero luego Vox es quien vota en contra de la Ley de la Cadena Alimentaria para garantizar un precio justo a los agricultores por sus productos¡±, recuerda Gil.
El mensaje oportunista de Vox y el PP a cuenta de las declaraciones del ministro de Consumo, Alberto Garz¨®n, sobre el consumo de carne o las macrogranjas tambi¨¦n ha penetrado entre los ganaderos. ¡°Ese populismo ha calado, pero sobre todo entre los m¨¢s j¨®venes que no tienen cultura pol¨ªtica ni democr¨¢tica. Los m¨¢s veteranos, que somos la mayor¨ªa, no creo que vayamos a cambiar nuestro voto¡±, explica Pepe Puntas, que tiene 550 cabezas de cordero segure?o en Hu¨¦scar (Granada) y es el presidente de la cooperativa Cosegur. ¡°El bienestar animal nos preocupa a quienes nos dedicamos a la ganader¨ªa extensiva, el problema es que nos meten a todos en el mismo saco y los mercados no entienden¡±, abunda, volviendo a incidir en la brecha entre el campo y la ciudad. Puntas advierte: ¡°Las pol¨ªticas agrarias se deciden en Europa o en las comunidades aut¨®nomas, que tienen transferidas las competencias. Me parece mentira que algunos vayan a votar a quienes no creen en ninguna de las dos¡±.