¡°La ciencia tiene ideolog¨ªa¡±

El mantra del necesario cambio del modelo productivo en Andaluc¨ªa pasa indefectiblemente por la inversi¨®n en Investigaci¨®n y Desarrollo para romper la inercia de una econom¨ªa basada en el sector servicios, la construcci¨®n y el turismo de masas. En esta legislatura, Andaluc¨ªa ha sido la comunidad aut¨®noma que m¨¢s ha incrementado el gasto en I+D (1.600 millones de euros), seg¨²n datos del INE de 2020 ¡ªun 5,8% m¨¢s que el a?o anterior¨D, un aumento que mantiene a la regi¨®n como la tercera que m¨¢s invierte, detr¨¢s de Madrid (4.200 millones) y Catalu?a (3.600), pero que no la saca de los puestos de co...

El mantra del necesario cambio del modelo productivo en Andaluc¨ªa pasa indefectiblemente por la inversi¨®n en Investigaci¨®n y Desarrollo para romper la inercia de una econom¨ªa basada en el sector servicios, la construcci¨®n y el turismo de masas. En esta legislatura, Andaluc¨ªa ha sido la comunidad aut¨®noma que m¨¢s ha incrementado el gasto en I+D (1.600 millones de euros), seg¨²n datos del INE de 2020 ¡ªun 5,8% m¨¢s que el a?o anterior¨D, un aumento que mantiene a la regi¨®n como la tercera que m¨¢s invierte, detr¨¢s de Madrid (4.200 millones) y Catalu?a (3.600), pero que no la saca de los puestos de cola en gasto por habitante (188 euros), solo por delante de Extremadura, Castilla-La Mancha y los dos archipi¨¦lagos.

La mayor parte de ese esfuerzo inversor, dos tercios, corre a cargo de las instituciones p¨²blicas, de acuerdo con la Estrategia de Investigaci¨®n, Desarrollo e Innovaci¨®n de Andaluc¨ªa 2021-2027, elaborada por la Consejer¨ªa de Transformaci¨®n Econ¨®mica, Industria, Conocimiento y Universidades de la Junta. Seg¨²n ese informe, con datos de 2019, el gasto andaluz en I+D lo encabezaron las universidades p¨²blicas, con 679 millones (un 44,1% del total). Cuatro de las protagonistas de ese ¨¢mbito estrat¨¦gico charlaron con EL PA?S al inicio de la campa?a electoral del 19-J para abordar la situaci¨®n de la ciencia y la investigaci¨®n en Andaluc¨ªa.

Son la rectora de la Universidad de Granada, Pilar Aranda; la delegada del CSIC en Andaluc¨ªa, Margarita Paneque; la divulgadora y catedr¨¢tica en Qu¨ªmica Inorg¨¢nica de la Universidad de Sevilla Adela Mu?oz; y la divulgadora y doctora en Matem¨¢ticas por esa misma universidad Clara Grima. Las cuatro subrayan que, m¨¢s importante a¨²n que aumentar la cuant¨ªa de los fondos, es reducir la burocracia que implica acceder a ellos para desarrollar sus proyectos. Y abogan por un pacto en la educaci¨®n que revolucione la forma en la que los ni?os y adolescentes se acercan a la ciencia para no perder talento ¡ªsobre todo femenino¨D en el camino, visibilizando la importancia de los cient¨ªficos en la sociedad. ¡°La ciencia es el motor del mundo, nos salva la vida, por eso es importante que todos miremos a la hora de votar la parte del programa electoral de cada partido que se dedica a la ciencia¡±, afirma Clara Grima. Todas coinciden.

Pregunta. ?Cu¨¢l es el principal problema de la ciencia y la investigaci¨®n en Andaluc¨ªa?

Adela Mu?oz (A. M.). Creo que todas estamos de acuerdo en que es la cantidad de burocracia para gestionar los fondos. Nos est¨¢ asfixiando y est¨¢ echando para atr¨¢s a muchos investigadores que no pueden compatibilizarlo con la docencia, la investigaci¨®n y su vida personal.

Pilar Aranda (P. A.). Nos acucia a todos. La gesti¨®n de la investigaci¨®n se ha complicado porque viene impuesta por la normativa europea, estatal o auton¨®mica, en funci¨®n de d¨®nde provengan los fondos. Una normativa que nos deja maniatadas a las universidades.

Margarita Paneque (M. P.). Es cierto que en los ¨²ltimos a?os se han ampliado los fondos y las convocatorias, pero en ocasiones ha sido imposible gestionarlas por la complicaci¨®n de la gesti¨®n. Es necesario m¨¢s personal administrativo para liberar a los investigadores.

Nadie piensa en los investigadores¡±

Pilar Aranda

P. A. En ese aspecto, hay que recordar que cuando se aprob¨® la ley de contrataci¨®n p¨²blica, se tuvo que hacer una modificaci¨®n porque no se reconoc¨ªan nuestras particularidades, lo mismo que ha sucedido ahora con la reforma laboral. Hemos tenido que suspender los contratos de investigaci¨®n porque no estaban dentro de la ley. Nadie piensa en los investigadores.

P. ?C¨®mo se afronta el que este asunto no parezca prioritario para las administraciones?

Clara Grima (C. G.). Con frustraci¨®n. No soy m¨¦dico ni estaba al pie de la pandemia, pero en este tiempo parec¨ªa que la ciencia era importante. Pero cuando hacen leyes de reforma laboral no aparecemos. Yo pensaba que con la pandemia, el sector cient¨ªfico-tecnol¨®gico iba a despertar, pero en nuestra comunidad en cuanto se ha podido, se ha vuelto al turismo y a los bares. Parece mentira que con el potencial que tenemos para desarrollar tecnolog¨ªa, nos conformemos con ser el bar de Europa. El cambio de modelo productivo empieza desde el colegio y a los pol¨ªticos no les importa nada, ni la educaci¨®n, ni la ciencia, porque no dan resultados en cuatro a?os, solo les interesa vender r¨¦dito electoral.

P. ?Ese cambio de modelo productivo es viable con un tejido empresarial como el andaluz, donde apenas hay industria y la peque?a y mediana empresa es mayoritaria?

A. M. En Andaluc¨ªa falta iniciativa empresarial, pero en las jornadas a las que he asistido donde hab¨ªa pymes todas coincid¨ªan en las dificultades de la burocracia para ejecutar, sobre todo cuando tienen poco personal. Hay poco tejido productivo y no tenemos cultura del emprendimiento.

M. P. Yo he conocido una convocatoria que ha tardado dos a?os en resolverse, una empresa no puede estar dos a?os esperando a ver si le han dado una subvenci¨®n, al final acaban abandonando.

A. M. Eso requiere un pacto por la educaci¨®n y la investigaci¨®n.

En Andaluc¨ªa no hay cultura empresarial en I+D+i, para eso hace falta un pacto por la ciencia y la educaci¨®n¡±

Adela Mu?oz

P. ?Ven esa inquietud de impulsar un pacto por la ciencia en los partidos que se presentan a estas elecciones?

P. A. Llevamos tiempo escuch¨¢ndoles decir que es necesario un pacto por la ciencia, pero no est¨¢ en la agenda.

C. G. ?Qui¨¦n est¨¢ hablando de educaci¨®n en esta campa?a? No vende.

A. M. Precisamente porque no vende deber¨ªa apartarse de la pol¨ªtica.

C. G. No se trata de que un partido o el Gobierno se apunte un ¨¦xito, esto va de que sus hijos y todos tengamos un futuro mejor.

P. ?Se ha perdido la oportunidad de rescatar la importancia de la ciencia que la pandemia hab¨ªa tra¨ªdo a un primer plano?

C. G. La ciencia nos ha salvado de una cat¨¢strofe. Y la campa?a en general solo va de t¨² has hecho esto y no has hecho lo otro. Todos tenemos ideolog¨ªa, pero en cosas tan importantes como la ciencia, con tantos problemas a los que nos tenemos que enfrentar, como el cambio clim¨¢tico, otros virus, las bacterias superresistentes, la falta de alimentos¡­ a lo mejor, lo que hay que hacer es sentarse y hacer ciencia.

Si no aplicamos las leyes de igualdad los algoritmos van a estar dominados por el hombre blanco, protestante y heterosexual¡±

Clara Grima

P. ?La ciencia tiene ideolog¨ªa?

C. G. Claro. La politizaci¨®n de la tecnolog¨ªa es un problema muy gordo. Si no aplicamos las leyes de igualdad, los algoritmos van a estar dominados por el hombre blanco, protestante y heterosexual.

A. M. Las ni?as se van de las ¨¢reas cient¨ªfico-tecnol¨®gicas en primaria, y es en los colegios e institutos donde tienen la llave primera para desviar esa tendencia.

P. A. Las mujeres se desv¨ªan del mundo t¨¦cnico, pero el hombre se desentiende del mundo de los cuidados y la educaci¨®n. Debemos trabajar globalmente en la igualdad. El porcentaje de mujeres en Inform¨¢tica e ingenier¨ªa es muy bajo, pero el de varones en Ciencias de la Educaci¨®n o Medicina tambi¨¦n.

C. G. La influencia social hace mucho. Si un ni?o ve que en su cole todo son maestras, r¨¢pidamente asocia ese rol con la mujer, por mucho que sus padres les digan otra cosa. En Matem¨¢ticas, en el a?o 2000 hab¨ªa un 60% de mujeres matriculadas en la carrera; desde que se ha asociado a la tecnolog¨ªa, la proporci¨®n es de 70% hombres, 30% mujeres. Ahora que las matem¨¢ticas parecen una profesi¨®n m¨¢s competitiva y m¨¢s remunerada, los chicos quieren ser matem¨¢ticos y las ni?as dan un paso atr¨¢s.

P. A. Los perfiles profesionales van cambiando, por eso en la Universidad debemos atender las demandas de la sociedad y no las del mercado. Estamos legislando y haciendo planes de estudio para perfiles profesionales que en 10 o 15 a?os pueden haber cambiado.

En la Universidad debemos atender las demandas de la sociedad y no las del mercado¡±

Pilar Aranda

P. ?Son capaces las universidades de tener esa agilidad para adaptarse a esas demandas?

P. A. El aprendizaje a lo largo de la vida es fundamental. No solo la universidad. Ahora las empresas tecnol¨®gicas demandan fil¨®sofos. Nuestro sistema deber¨ªa ser m¨¢s flexible, ese es un reto.

C. G. La formaci¨®n debe ser integral. Cuando uno piensa en dedicarse a la ciencia no se le puede sustraer la filosof¨ªa como parte de su formaci¨®n, porque ahora mismo muchos de los problemas que tiene la tecnolog¨ªa son filos¨®ficos.

La cultura de la ciencia aporta un conocimiento esencial para tomar decisiones acertadas para enfrentarse a la vida¡±

Margarita Paneque

P. ?Hasta qu¨¦ punto es importante la tarea de divulgaci¨®n para que los pol¨ªticos tengan en cuenta a los investigadores?

C. G. La sociedad tiene que saber lo importante que es la ciencia, porque es el motor del mundo, la que nos salva la vida. Por eso todos los que vamos a votar tenemos que saber, cuando miremos un programa electoral, la parte que se dedica a la sanidad p¨²blica y a la dependencia, pero tambi¨¦n a la ciencia.

M. P. En el CSIC a la divulgaci¨®n nos gusta llamarla cultura cient¨ªfica, porque se trata de un conocimiento esencial para tomar decisiones acertadas para enfrentarse a la vida. A los profesores de primaria y secundaria hay que darles herramientas para permitir ese desarrollo en los ni?os.