¡®Souvenirs¡¯ castizos de lo m¨¢s contempor¨¢neo
La renovada tienda de la Casa de la Panader¨ªa abri¨® en diciembre de 2019, aunque se inaugur¨® en febrero. Ahora, ha reabierto sus puertas a turistas y locales
Reinventar el concepto de la tienda de souvenirs no es tarea f¨¢cil. La mayor¨ªa de la gente asocia estos comercios a una serie de art¨ªculos ¨Cimanes, llaveros, camisetas y un largo etc¨¦tera¨C que se repiten una y otra vez y que tratan de recoger la identidad m¨¢s folcl¨®rica de un lugar. Sin embargo, en la nueva tienda de la Casa de la Panader¨ªa han querido apostar por una idea diferente: que los recuerdos que los turistas se lleven a casa contengan un poco del alma de la ciudad.
¡°Hemos intentado ...
Reinventar el concepto de la tienda de souvenirs no es tarea f¨¢cil. La mayor¨ªa de la gente asocia estos comercios a una serie de art¨ªculos ¨Cimanes, llaveros, camisetas y un largo etc¨¦tera¨C que se repiten una y otra vez y que tratan de recoger la identidad m¨¢s folcl¨®rica de un lugar. Sin embargo, en la nueva tienda de la Casa de la Panader¨ªa han querido apostar por una idea diferente: que los recuerdos que los turistas se lleven a casa contengan un poco del alma de la ciudad.
¡°Hemos intentado aunar a los artistas y artesanos que est¨¢n afincados en Madrid junto con los usos, costumbres y detalles arquitect¨®nicos de la ciudad¡±, explica Ana Garrido de la Parra, t¨¦cnico de Madrid Destino que gestiona la tienda. Hasta hace apenas unos meses, este espacio no ten¨ªa nada que ver con lo que nos encontramos hoy y lo que se vend¨ªa aqu¨ª era sobre todo merchandising. Sin embargo, quisieron darle una vuelta y dise?ar un proyecto novedoso, que le encargaron a la arquitecta Izaskun Chinchilla. ¡°Aparte de los conceptos que ha tra¨ªdo Izaskun, hemos querido recoger el trabajo de estos artesanos que tienen una trayectoria y un nivel alt¨ªsimo de calidad¡±.
Ubicada en el interior de la Casa de la Panader¨ªa, que alberga el Centro de Turismo Plaza Mayor, el espacio en s¨ª ya es toda una declaraci¨®n de intenciones, pues intenta reunir algunos de los iconos m¨¢s caracter¨ªsticos de Madrid. La disposici¨®n recuerda a la de las corralas e incluso se recrean los balcones, con sus macetas y todo ¨Cdise?adas por la florista y paisajista Elisabeth Blumen, inspiradas en pinturas del Prado o del Museo del Romanticismo y en tradiciones como el Domingo de Ramos¨C, que potencian esta escenograf¨ªa. Las flores y los p¨¢jaros que decoran los mantones de Manila aparecen en los papeles que cubren buena parte de las paredes de la tienda y en el troquelado de los biombos que dan paso al mostrador de informaci¨®n tur¨ªstica. Los mercadillos de la ciudad est¨¢n presentes gracias a unos peque?os puestos de madera cubiertos con unos toldos dise?ados por La Casita de Wendy. Las ruletas de los barquilleros asoman aqu¨ª y all¨¢ junto a las parpusas de Sombrerer¨ªa Medrano (¡°la sombrerer¨ªa en activo m¨¢s antigua de la capital y de Espa?a¡±), las capas de Sese?a, las peonzas, canicas y yo-yos estilo retro de Juguetes Cayro, los pitos de San Isidro ¨Cunos peque?os p¨¢jaros de barro que se llenan de agua para luego soplar a trav¨¦s de ellos¨C e incluso las latas de callos o de cocido madrile?o, por si alg¨²n turista quiere sorprender a sus paisanos con los manjares capitalinos m¨¢s caracter¨ªsticos.
Adem¨¢s de todos estos souvenirs ¡°castizos¡±, encontramos otros m¨¢s contempor¨¢neos, firmados por algunos de los nombres punteros del dise?o local. Si miramos al techo, veremos las manos de porcelana de Andr¨¦s Gallardo sosteniendo peque?os cristales de colores, que conforman una c¨²pula ubicada en el centro de la tienda. Esta c¨²pula, cuenta Ana, quer¨ªa servir de homenaje a otras de la capital. ¡°Hay varias que son muy significativas, como la del Hotel Palace o la del Hospital de Maudes, que han sido testigos de la historia madrile?a¡±. Una de las ya archifamosas cabezas de toro de Javier S. Medina ¨Cque ¨¦l denomina ¡°trofeos ecol¨®gicos¡±¨C nos observa desde lo alto de una columna y, si nos acercamos a las vitrinas, encontraremos bolsos de piel de Oficio Studio, pa?uelos de seda pintados a mano de Natalia Lumbreras o cer¨¢micas de Abe the Ape ¨Centre ellas, unos originales y gamberros albarelos de farmacia, que llevan los nombres de estrellas como Judy Garland, Amy Winehouse o Whitney Houston¨C. Tambi¨¦n podemos contemplar las baldosas hidr¨¢ulicas dise?adas por Antonio Alvarado o las sillas de Antonio Morcillo, aunque en este caso no est¨¢n a la venta, son parte de la decoraci¨®n.
¡°Quer¨ªamos que, aparte de ser un escaparate f¨ªsico de los productos, la tienda se convirtiera tambi¨¦n en un escaparate de estos artesanos. Cada vez buscamos cosas m¨¢s cuidadas y que tengan ese toque de exclusividad, que est¨¦n hechas aqu¨ª y no en cualquier otro sitio¡±. Si este era el reto, lo han logrado, porque ninguna de las propuestas que est¨¢n a la venta en la tienda de la Casa de la Panader¨ªa son ¡°las t¨ªpicas¡±. Adem¨¢s de las ya citadas, lo turistas pueden llevarse recuerdos tan originales como las Meninas de Madrid ¨Cunos dulces que fusionan el chocolate con las violetas y que homenajean, en un peculiar 2x1, a Vel¨¢zquez y al caramelo estrella de la capital¨C o sorprender a las visitas con una caja de m¨²sica llena de barquillos. Incluso las gu¨ªas y libros sobre la ciudad se salen un poco de lo convencional: entre sus estantes nos topamos con obras como Los misterios de Madrid de Antonio Mu?oz Molina, El crimen de la calle Fuencarral de Benito P¨¦rez Gald¨®s o la antolog¨ªa De Madrid a New York de Victoria Kent. Por si fuera poco, el cl¨¢sico chocolate madrile?o aqu¨ª se vende en unos packs para llevar, que vienen con su cesta, su chocolatera, sus tazas y, c¨®mo no, con su tableta de chocolate. Los churros, eso s¨ª, habr¨¢ que comprarlos aparte.