Sa¨²l, el aficionado del Atl¨¦tico que se fue demasiado pronto

Sa¨²l viv¨ªa por los colores del Atl¨¦tico de Madrid, pero dos de sus referentes, su entrenador y su padre, eran del Real Madrid. Jorge Abad, su t¨¦cnico durante el ¨²ltimo a?o en el Fairplay Parla, recordaba este martes que todo el a?o se han ¡°picado¡± una jornada de liga tras otra. Sus dos equipos se jugaron el campeonato hasta el ¨²ltimo d¨ªa, el pasado s¨¢bado. Gan¨® el de Sa¨²l, estaba euf¨®rico. En sus 13 a?os de vida ve¨ªa campe¨®n por segunda vez a su equipo. Pero en medio de la pasi¨®n por la celebraci¨®n ...

Sa¨²l viv¨ªa por los colores del Atl¨¦tico de Madrid, pero dos de sus referentes, su entrenador y su padre, eran del Real Madrid. Jorge Abad, su t¨¦cnico durante el ¨²ltimo a?o en el Fairplay Parla, recordaba este martes que todo el a?o se han ¡°picado¡± una jornada de liga tras otra. Sus dos equipos se jugaron el campeonato hasta el ¨²ltimo d¨ªa, el pasado s¨¢bado. Gan¨® el de Sa¨²l, estaba euf¨®rico. En sus 13 a?os de vida ve¨ªa campe¨®n por segunda vez a su equipo. Pero en medio de la pasi¨®n por la celebraci¨®n sucedi¨® lo que nunca nadie se hubiese esperado. Tuvo un accidente al chocar contra un muro en la entrada de un aparcamiento en el centro de Madrid, que le produjo un traumatismo fatal en la cabeza. Su equipo, el Fairplay de Parla ha rendido un homenaje a su joven jugador del dorsal n¨²mero 15.

¡°Era un trasto, no paraba, pero cuando le ibas a echar la bronca por algo, consegu¨ªa hacerte re¨ªr¡±, cuenta Abad, al lado de un corazon en el c¨¦sped hecho con velas con un bal¨®n en el centro. Al lado, dos globos gigantes de color dorado con el n¨²mero 15, el de Sa¨²l, y un cartel con la cara del peque?o. ¡°Era como todos los chavales de esta edad, claro que quer¨ªa dedicarse al f¨²tbol¡±, contin¨²a. En este campo disput¨® sus partidos y entren¨® cada semana durante el ¨²ltimo a?o. La familia de Sa¨²l era de Torrej¨®n de la Calzada. All¨ª lo vio en acci¨®n Abad y se trajo a ¨¦l y a su hermano al Fairplay para la temporada 2020-2021 porque vio sus posibilidades. ¡°Era lateral, aunque a veces lo pon¨ªa de central. No era mucho de meter goles, creo que este a?o meti¨® uno, era m¨¢s de colocarla¡±, apunta Abad, vestido de negro de cabeza a pies, todav¨ªa casi sin poder creer lo que ha pasado. ¡°Me llam¨® un directivo del club ese d¨ªa y yo no daba cr¨¦dito, no dorm¨ª en toda la noche¡±, relata.

Centenares de vecinos, miembros del club, trabajadores y representantes municipales han acudido este martes al acto en recuerdo de Sa¨²l. Los entrenadores y directivos prefer¨ªan no hablar, y una de las madres que ha participado en la organizaci¨®n del acto, ha pedido a los periodistas que no preguntaran a los ni?os, porque a¨²n estaban muy afectados por lo ocurrido. Todav¨ªa nadie asimilia que el peque?o no va a volver a jugar en este c¨¦sped, pero necesitaban este encuentro para despedirse. El lema del club reza: ¡°En esta familia, nadie lucha solo¡±.

Una bandera en la rampa

El s¨¢bado, Sa¨²l qued¨® con otros amigos para hacer una barbacoa en Serranillos, un pueblo cercano a Parla, a 30 kil¨®metros al sur de la capital. El encuentro ten¨ªa un doble motivo: el Fairplay hab¨ªa ganado la liga y el Atleti se jugaba la suya. Al o¨ªr el pitido final que confirmaba que los rojiblancos eran los campeones, estall¨® la alegr¨ªa. Tanto que Paula y Juan, dos padres de otros chavales del club, decidieron llevar a cinco de ellos a Neptuno para vivir la emoci¨®n en el kil¨®metro cero de la celebraci¨®n.

Llegaron a Madrid y despu¨¦s de unos minutos de pitidos para hacer m¨¢s sonora a¨²n la victoria de los rojiblancos, Paula puso rumbo a la plaza Santa Ana para dejar el coche. Cuando hab¨ªan entrado en el aparcamiento, el ni?o sac¨® la cabeza para mirar hacia detr¨¢s en la rampa que hace curva y se golpe¨® en la nuca contra uno de los muros. A su lado iba Fabio, el hijo de Paula, y en la otra ventanilla se encontraba Iker, el hermano mellizo de Sa¨²l. La investigaci¨®n trata de arrojar m¨¢s luz sobre los detalles del accidente y por qu¨¦ el ni?o se asom¨® en ese momento. En el acceso al aparcamiento qued¨® tirada una bandera del Atl¨¦tico de Madrid.

Paula tuvo que recibir atenci¨®n psicol¨®gica en el mismo lugar de los hechos. Este martes ha enviado una carta al homenaje que ha le¨ªdo entre l¨¢grimas la secretaria del club. La llevaba en su bolso Aurora Asoroy, cu?ada de la conductora. La mujer ense?a brevemente un papel escrito a mano con pulso tembloroso, antes de volver a guardarlo. ¡°Ella est¨¢ destrozada. La calidad humana de la familia de Sa¨²l es incre¨ªble, cuando te pasa algo as¨ª no sabes c¨®mo vas a reaccionar y ellos se han preocupado de tranquilizar a Paula y decirle que no se sienta culpable por nada¡±, cuenta con su hijo, que tambi¨¦n milita en este equipo de Parla, subido encima de ella. Su sobrino Fabio, que ha acudido al homenaje vestido con la equipaci¨®n rosa fucsia del Fairplay como el resto de sus compa?eros, fue testigo directo del accidente y tambi¨¦n ha quedado tremendamente afectado por lo que vio.

¡°Nunca olvidar¨¦ a Iker consol¨¢ndonos a todos cuando acababa de perder a su alma gemela¡±, rezaba la carta que Paula ha enviado al acto de recuerdo. ¡°La mitad de mi coraz¨®n est¨¢ all¨ª, la otra mitad se fue con Sa¨²l¡±, segu¨ªa. ¡°Aurelio, a los cinco minutos de conocerte me di cuenta de tu bondad, de un padre como t¨² solo se pod¨ªan esperar los hijos que tienes¡±, ha escrito Paula al padre del peque?o fallecido.

El padre ha estado arropado junto a una veintena de familiares y allegados que han ocupado el espacio central del campo. En medio de todos ellos se encontraba Iker, el mellizo del peque?o fallecido. No ha quedado nadie sin abrazarle y ¨¦l, un chico de 13 a?os que acaba de ver morir a su hermano, no ha perdido la compostura en ning¨²n momento. Ha llegado el primero de su familia y se han sentado durante unos segundos solo en una de las sillas, mirando al suelo con su camiseta fucsia. Varios compa?eros se han acercado a llevarle flores y otros detalles, con los m¨¢s mayores se fund¨ªa en un abrazo, a los alevines les daba un cari?oso toque en la cabeza.

En el campo, m¨¢s de un centenar de jugadores de todas las categor¨ªas han querido participar en el acto. ¡°Fue poco el tiempo que estuvimos juntos, pero sabemos que donde est¨¦s, no dejar¨¢s de jugar partidos¡±, ha dicho David, uno de sus compa?eros al que se le entrecortaba la voz. ¡°Campeones, qu¨¦ grandes sois¡±, se le¨ªa en una foto impresa que otro peque?o llevaba junto a un ramo de flores. Uno de los chavales que aparec¨ªa en la imagen era Sa¨²l. El aficionado del Atl¨¦tico que se fue demasiado pronto siendo un campe¨®n.

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