El adolescente que fingi¨® ser m¨¦dico en Madrid ya hab¨ªa usurpado otras profesiones antes

Un ni?o angelical con una bata de auxiliar de enfermer¨ªa fucsia mira a la c¨¢mara. Ser¨ªa una imagen m¨¢s de una madre orgullosa en una red social, si no fuera porque ese ni?o, que ahora tiene 17 a?os, fue detenido en septiembre por fingir ser m¨¦dico de la residencia de mayores que dirige la progenitora en la sierra de Madrid. Aunque los hechos se remontan al verano, fue el mi¨¦rcoles cuando la polic¨ªa hizo p¨²blico el caso, que acab¨® con el en¨¦simo...

Un ni?o angelical con una bata de auxiliar de enfermer¨ªa fucsia mira a la c¨¢mara. Ser¨ªa una imagen m¨¢s de una madre orgullosa en una red social, si no fuera porque ese ni?o, que ahora tiene 17 a?os, fue detenido en septiembre por fingir ser m¨¦dico de la residencia de mayores que dirige la progenitora en la sierra de Madrid. Aunque los hechos se remontan al verano, fue el mi¨¦rcoles cuando la polic¨ªa hizo p¨²blico el caso, que acab¨® con el en¨¦simo arresto del chico por hechos similares, seg¨²n apuntan fuentes cercanas al caso. ¡°?Qu¨¦ quiero ser hoy?¡±. Ese es el juego que se plantea a menudo este menor detenido en M¨®stoles. Esta vez ha sido sanitario, pero en el pasado fue polic¨ªa, fiscal, director de instituto o de una residencia de mayores, seg¨²n estas mismas fuentes.

En su pasado como intrusista profesional hab¨ªa fingido ser otras personas por tel¨¦fono. Llamaba haci¨¦ndose pasar por la identidad que hubiese elegido en esa ocasi¨®n. Esta vez dio un paso m¨¢s y lo hizo en un escenario real y con un disfraz. Una tarde de agosto, la residencia que dirige su madre y en la que ¨¦l tambi¨¦n est¨¢ empleado recibi¨® un aviso psiqui¨¢trico de M¨®stoles. En ese momento, ¨¦l vio la oportunidad de transformarse, una vez m¨¢s, en otra persona.

Se puso la bata y se ofreci¨® al conductor de la ambulancia. Llevaba tambi¨¦n m¨¢s elementos de atrezzo, como el fonendoscopio, de hecho lleg¨® a auscultar a la paciente. El error fue que en el piso hab¨ªa dos agentes de la Polic¨ªa Nacional de M¨®stoles, que observaron una actitud extra?a y en las semanas sucesivas no se olvidaron de ese joven m¨¦dico que en algunos momentos parec¨ªa muy seguro de s¨ª mismo y, en otros, dudaba con las cosas m¨¢s simples.

Cuando estaban en el domicilio, lleg¨® otro aviso de emergencias, y el menor, sin dudarlo, mont¨® de nuevo en la ambulancia y acompa?¨® al conductor al nuevo destino. All¨ª, recomend¨® su ingreso en un centro hospitalario. ¡°Tiene mucha labia¡±, afirman fuentes policiales. En lo que coinciden las fuentes consultadas es que la motivaci¨®n de este chico para transformarse en otras personas es el reto de hacer creer a la gente que es quien dice ser. Es un viejo conocido de los que tratan habitualmente con menores en el ¨¢mbito policial y jur¨ªdico.

Una portavoz del Summa explic¨® el mi¨¦rcoles, cuando la polic¨ªa hizo p¨²blica la detenci¨®n, que no ten¨ªan conocimiento de que ninguno de sus sanitarios hubiera coincidido con ¨¦l y que era muy complicado que hubiese podido interceptar los avisos de emergencias porque las comunicaciones est¨¢n encriptadas. Las dos residencias de este grupo empresarial, en dos pueblos cercanos, cuentan con un servicio de ambulancias privado con el que llevan a cabo los traslados de sus pacientes.

En su investigaci¨®n, los polic¨ªas comprobaron que ese joven m¨¦dico era en realidad un menor que hab¨ªa tratado de usurpar la identidad de un sanitario, algo que quedaba claro en sus redes sociales. Una vez finalizadas las pesquisas, a finales de septiembre se procedi¨® a su detenci¨®n, por un presunto delito de intrusismo profesional. La autoridad judicial decret¨® su puesta en libertad a la espera de juicio.

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