Almeida: el no alcalde de Madrid con un no presupuesto

Estos son los primeros presupuestos de Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida con mayor¨ªa absoluta. Unas cuentas que no necesita pactar con nadie y que a nadie convencen. Son la consecuencia de no tener un modelo de ciudad, son unos no presupuestos. Almeida, a falta de gesti¨®n, se dedica a lo que m¨¢s le gusta: hacer chascarrillos y oposici¨®n a Pedro S¨¢nchez. Sobre todo, a esto ¨²ltimo.

Hace oposici¨®n ...

Estos son los primeros presupuestos de Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida con mayor¨ªa absoluta. Unas cuentas que no necesita pactar con nadie y que a nadie convencen. Son la consecuencia de no tener un modelo de ciudad, son unos no presupuestos. Almeida, a falta de gesti¨®n, se dedica a lo que m¨¢s le gusta: hacer chascarrillos y oposici¨®n a Pedro S¨¢nchez. Sobre todo, a esto ¨²ltimo.

Hace oposici¨®n a quien le incrementa la aportaci¨®n en un 20%, mientras le r¨ªe los dislates a quien se la reduce en un 17%. La comunidad aporta 124 millones, muy lejos de los m¨¢s de 800 millones que cubre el Ayuntamiento en competencias impropias.

Para el 2024 nos trae viejas promesas: el soterramiento de la A-5. Promesa con la que Almeida empapel¨® Madrid en el a?o 2019. Pas¨® por las cuentas p¨²blicas en forma de proyecto que el propio Almeida declar¨® ¡°inviable¡±. Para ser precisos, quien lo declar¨® inviable fue la empresa en la que trabaja el hermano de Borja Carabante [edil de Medio Ambiente], despu¨¦s de embolsarse tres millones de euros.

Ahora vuelve con siete millones. Migajas para una obra que superar¨¢ los 500. Eso s¨ª, no vuelve solo, retorna cargado de excusas contra el gobierno central. Parad¨®jicamente, S¨¢nchez, con el impulso a la Operaci¨®n Campamento, ha operado dos milagros: hacer posible lo imposible y que se ponga en marcha la obra.

Este no presupuesto tambi¨¦n lo catalogan como ¡°social¡±. Lo que vemos son servicios sociales que siguen colapsados y sin convertirse en un derecho, vemos familias sin ayudas, vemos a los trabajadores sociales quej¨¢ndose por la falta de personal. Vemos todo lo que Almeida parece no ver.

Menci¨®n aparte merece la gran promesa de estas cuentas: la supresi¨®n del copago de la teleasistencia a los mayores de 90 a?os. Una medida con la que estamos de acuerdo, pero que tenemos que aclarar que son 16.000 beneficiarios y un gasto de apenas 2 millones de euros para un presupuesto que supera los 7.000 millones de euros. Conclusi¨®n: para ser sociales, lo disimulan muy bien.

El otro gran titular es un cl¨¢sico: bajan los impuestos. Y, como siempre, benefician a quien m¨¢s tiene. Por ejemplo, en Villaverde o Vallecas el ahorro en la bajada del IBI puede estar entre 4 y 10 euros; mientras que en fincas y chal¨¦s de Valdemar¨ªn, la bajada ser¨¢ de m¨¢s de 400 euros.

No contentos con eso, reduce los presupuestos de distritos como Usera o Puente de Vallecas, y hace caer las inversiones en distritos como Villaverde, Villa de Vallecas y Vic¨¢lvaro. Extra?a forma de hacer reequilibrio territorial en una ciudad en la que solo hace falta darse una vuelta por determinados barrios para observar la falta urgente de inversi¨®n.

En resumen: este es un no presupuesto acorde al no alcalde.

En realidad, no s¨¦ de qu¨¦ nos sorprendemos.

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