Los ¡®stradivarius¡¯ de Carlos III salen del Palacio Real por primera vez en 27 a?os: sonar¨¢n en Madrid por la dana de Valencia
El Teatro Real y Patrimonio Nacional se unen para ofrecer un concierto ben¨¦fico el 20 de enero, cuya recaudaci¨®n se destinar¨¢ a los afectados por el temporal
Carlos III no pod¨ªa imaginar aquel a?o de 1772, en el que adquiri¨® un conjunto de stradivarius para su hijo, el Pr¨ªncipe de Asturias y futuro Carlos IV, que m¨¢s de 250 a?os despu¨¦s, en un Teatro Real que a¨²n no se hab¨ªa ni so?ado, una sala llevar¨ªa su nombre, y que en ella se promocionar¨ªa este mi¨¦rcoles un concierto ben¨¦fico con esos instrumentos que se realizar¨¢ el mismo d¨ªa de su nacimiento ¨D20 de enero¨D para ayudar a los afectados por la tr¨¢gica dana de finales de 2024. Tampoco se ...
Carlos III no pod¨ªa imaginar aquel a?o de 1772, en el que adquiri¨® un conjunto de stradivarius para su hijo, el Pr¨ªncipe de Asturias y futuro Carlos IV, que m¨¢s de 250 a?os despu¨¦s, en un Teatro Real que a¨²n no se hab¨ªa ni so?ado, una sala llevar¨ªa su nombre, y que en ella se promocionar¨ªa este mi¨¦rcoles un concierto ben¨¦fico con esos instrumentos que se realizar¨¢ el mismo d¨ªa de su nacimiento ¨D20 de enero¨D para ayudar a los afectados por la tr¨¢gica dana de finales de 2024. Tampoco se imagin¨® Mar¨ªa Jos¨¦ Su¨¢rez, conservadora de estos instrumentos y valenciana nacida en la zona de Utiel-R¨¦quena, que, dos a?os despu¨¦s de que asumiera la tarea de preservar estas joyas de Patrimonio Nacional, estas servir¨ªan para recaudar fondos destinados a ayudar a agrupaciones musicales de su tierra en la recuperaci¨®n del desastre. El 20 de enero, a las siete y media de la tarde, todos esos imposibles coincidir¨¢n para que se celebre un concierto ¨²nico en el Teatro Real, donde los m¨²sicos del Cuarteto Casals devolver¨¢n la vida a estos instrumentos de fama internacional. Los stradivarius que sonar¨¢n entonces, el llamado Cuarteto Palatino ¨Ddos violines, una viola y un violonchelo¨D, llevan 27 a?os sin salir del Palacio Real.
La ma?ana del 20 de enero, Su¨¢rez sacar¨¢ los stradivarius de sus vitrinas, revisar¨¢ las cuerdas y comprobar¨¢ las cerraduras de los estuches en los que se transportan estos instrumentos las pocas veces en las que salen de su guarida. Luego, vigilar¨¢ con celo c¨®mo agentes de la Polic¨ªa armados los suben a un coche blindado y no se apartar¨¢ ni un segundo de ellos durante los 400 metros que separan al Palacio del Teatro Real en la plaza de Oriente.
¡°Desde luego no me voy a separar de ellos¡±, explica la conservadora. ¡°Cuando lleguen al teatro, ser¨¦ yo la que abra las cajas para que [los m¨²sicos] los cojan¡±. Los dos violines, la viola y el violonchelo que conforman este cuarteto, tambi¨¦n conocido como Cuarteto Real, exquisitamente decorado por su creador, el lutier Antonio Stradivari, no han salido del Palacio Real desde 1997. La conservaci¨®n de estos instrumentos sigue un estricto protocolo que ha permitido mantenerlos en excelente estado de conservaci¨®n y ser uno de los pocos conjuntos que se conservan casi ¨ªntegramente como lo concibi¨® Stradivari, ya que en el siglo XIX se perdi¨® sin dejar rastro uno de los violonchelos que conformaban el entonces quinteto. Aunque est¨¢n exhibidos al p¨²blico dentro del propio Palacio Real, y se sacan de sus vitrinas unas cuatro veces al a?o para ofrecer peque?os conciertos all¨ª mismo, escuchar las notas que salen de las cajas de maderas especialmente escogidas, moldeadas y barnizadas por el lutier es una rareza.
¡°Los stradivarius son unos instrumentos extraordinarios que ten¨ªamos que poner al servicio de una causa extraordinaria¡±, dice Ana de la Cueva, presidenta de Patrimonio Nacional, en una conferencia de prensa celebrada este mi¨¦rcoles en el teatro. La m¨²sica, otra vez, salva. ¡°Tiene una cualidad excepcional que no la tiene ninguna de las otras artes, y es la capacidad de comunicaci¨®n con las personas, la capacidad que tiene de resiliencia y de conectar con las emociones¡°, destaca Su¨¢rez, que escucha todo lo que ocurrir¨¢ el pr¨®ximo 20 sentada en medio del auditorio de la sala Carlos III, como una madre que quiere saber lo que se habla de sus hijos.
Todo el dinero recaudado ir¨¢ a la Federaci¨®n de Sociedades Musicales de la Comunidad Valenciana para ayudar en la recuperaci¨®n de las instalaciones e instrumentos de las bandas de los pueblos afectados por la dana y tambi¨¦n a asociaciones musicales de Albacete. Hasta el momento, seg¨²n Ignacio Garc¨ªa-Belenguer, director general del Teatro Real, se han recaudado 40.000 euros, que ¡°ya es una cantidad relevante¡±, pero el objetivo es llegar a m¨¢s. Para ello, la instituci¨®n ha habilitado tambi¨¦n una fila 0, a trav¨¦s de la cual se pueden hacer donaciones. Todo, con el reclamo de los stradivarius que, por primera vez en lo que va de siglo, dejar¨¢n el Palacio Real.
?Y por qu¨¦ moverlos de sitio? Los conciertos que se realizan peri¨®dicamente en la sala de columnas del Palacio Real para mantener el buen funcionamiento de los stradivarius congregan a unas 300 personas, que agotan las entradas en cuanto salen a la venta, pero esa cantidad de espectadores se juzg¨® insuficiente para reunir los fondos que necesitan los afectados por la dana. Las m¨¢s de 1.700 butacas del Teatro Real son un objetivo mucho m¨¢s ambicioso. ¡°Ten¨ªamos que hacer algo por la dana con lo mejor que tenemos, y eso es el Cuarteto Palatino¡±, recalca De la Cueva.
Los cuatro instrumentos est¨¢n pensados no solo para la Casa Real espa?ola en espec¨ªfico, sino tambi¨¦n para ser tocados en conjunto. ¡°La combinaci¨®n de tocar los cuatro crea una resonancia absolutamente ¨²nica, una combinaci¨®n absolutamente perfecta¡±, asegura Vera Mart¨ªnez, una de las violinistas del Cuarteto Casals, a trav¨¦s de una videollamada en la rueda de prensa.
La m¨²sica de Bach ha sido la elegida para dar sentido a este concierto. ¡°El arte de la fuga es una catedral arquitect¨®nica inmensamente bella, larga y dif¨ªcil de escuchar, es una obra para nosotros muy espiritual¡±, dice Mart¨ªnez para describir la obra seleccionada. Habla de las curiosidades de la composici¨®n, la ¨²ltima creada por Johan Sebastian Bach antes de morir, de las fugas que la integran, y tararea a trav¨¦s de la pantalla un acorde en re mayor, con el que cerrar¨¢n las fugas. Terminar¨¢n con el preludio coral BWV 668 que, revela Mart¨ªnez, ¡°es como la entrada al cielo¡±.
Los stradivarius a¨²n no han sido sacados de las vitrinas para los ensayos. Su¨¢rez explica que, en breve, junto al Cuarteto Casals, determinar¨¢n los horarios en los que se har¨¢n. Antes, un lutier revisar¨¢ los instrumentos, los limpiar¨¢ y les ajustar¨¢ las cuerdas. Durante los ensayos, que se celebrar¨¢n a puerta cerrada en el llamado comedor de diario del Palacio Real, la conservadora vigilar¨¢ cada movimiento de los m¨²sicos. La noche del 20 de enero, cuando acabe el concierto ben¨¦fico por la dana, Su¨¢rez y el lutier har¨¢n el proceso inverso. Los revisar¨¢n, limpiar¨¢n y soltar¨¢n un poco las cuerdas, para volver a colocarlos en su vitrina, a la espera de que otro acontecimiento ¨²nico, quiz¨¢ menos triste, los saque de su letargo.