¡®Gracias¡¯

Tres ideas convergen con habilidad y colorido en el dise?o del Oso y el Madro?o de Jorge Gil Cerrac¨ªn: el pueblo de Madrid, encarnado en un oso vestido de chulapo por uno de sus lados y de chulapa, por el otro; el ¨¢rbol de la vida en el que se apoya; y el mensaje de gratitud que lanza: un beso en forma de cardiograma que se eleva hasta la copa del ¨¢rbol para llegar hasta los servicios esenciales de la ciudad: ¡°Es agradecimiento directo y sencillo a todos los que han estado al pie del ca?¨®n¡±, expresa este dise?ador gr¨¢fico de 61 a?os, creador de Gracias, una de las 40 obras ganadoras entre los m¨¢s de 500 participantes en el concurso.

El madrile?o Gil Cerrac¨ªn se enter¨® del certamen por una amiga. Aunque no suele participar en ellos, el tema en esta ocasi¨®n le pareci¨® ¡°obligatorio¡±. Cuenta que lo que m¨¢s le cost¨® fue perge?ar el cardiograma, ese beso rojo de los osos-chulapos a los trabajadores b¨¢sicos, y encontrarle sentido al ¨¢rbol, en cuyo tronco est¨¢ inscrito el s¨ªmbolo de la vida.

¡°Desde la ventana de mi casa he podido ver c¨®mo trabajaban d¨ªa a d¨ªa servicios esenciales como el Samur, la polic¨ªa, los farmac¨¦uticos¡­ Incluso gente an¨®nima que prestaba una mano. Hicieron todo lo que se pod¨ªa hacer. Aqu¨ª est¨¢ mi escueto gracias¡±, termina.