Ana de Armas, su admiraci¨®n por Ben Affleck y el cari?o de la familia Flores en Espa?a
La actriz, convertida en nueva estrella de Hollywood, recuerda que fueron Elena Furiase y Lolita Flores quienes la arroparon y ayudaron a manejar la fama cuando rod¨® ¡®El Internado¡¯
Ana de Armas ha pasado a un nuevo nivel y como tal la tratan los medios estadounidenses, interesados en conocer los pormenores de su vida actual pero tambi¨¦n de su historia personal y de sus inicios en Espa?a cuando era una de las protagonistas de la serie El Internado. Los medios estadounidenses est¨¢n haci¨¦ndose eco de sus declaraciones al respecto en el n¨²mero de Vogue Espa?a del mes de abril.
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Ana de Armas ha pasado a un nuevo nivel y como tal la tratan los medios estadounidenses, interesados en conocer los pormenores de su vida actual pero tambi¨¦n de su historia personal y de sus inicios en Espa?a cuando era una de las protagonistas de la serie El Internado. Los medios estadounidenses est¨¢n haci¨¦ndose eco de sus declaraciones al respecto en el n¨²mero de Vogue Espa?a del mes de abril.
La actriz, que naci¨® en Cuba y tiene actualmente 31 a?os, consigui¨® el pasaporte espa?ol nada m¨¢s cumplir los 18 gracias al origen de sus abuelos y viaj¨® a Espa?a a probar suerte en la interpretaci¨®n, una profesi¨®n para la que se preparaba en su pa¨ªs natal desde los 14 a?os. Antes de que llegaran sus papeles en pel¨ªculas como Blade Runner 2049 o Pu?ales por la espalda, de Armas ya conoci¨® el ¨¦xito por su papel de Carolina en El Internado, serie que comenz¨® en Espa?a en mayo de 2007 y mantuvo a los espectadores en vilo durante siete temporadas.
De Armas recuerda bien esos momentos y c¨®mo lo vivi¨® entonces, cuando ten¨ªa 19 a?os e interpretaba a una colegiala vestida de uniforme en un internado en el que se suced¨ªan los misterios: ¡°Cuando la serie tuvo ¨¦xito por primera vez, ni siquiera pod¨ªamos caminar por la calle¡±, recuerda en la entrevista. ¡°Elena [Furiase, hija de Lolita Flores, una de las coprotagonistas de la serie y amiga de la actriz], que ha estado acostumbrada a la fama toda su vida, me tom¨® de la mano y supo c¨®mo ense?arme a sortear una pregunta inc¨®moda o a un fot¨®grafo cuando me segu¨ªa¡±.
La actriz hispanocubana tambi¨¦n cuenta que fue precisamente la familia Flores quien m¨¢s la ayud¨® en esos momentos en los que la fama la pill¨® por sorpresa: "La madre de Elena, Lolita, fue tambi¨¦n una madre para m¨ª. Los d¨ªas en los que estaba triste, llorando y extra?ando a mis padres que estaban en Cuba, nos echaba a las tres a la cama y me hac¨ªa re¨ªr. Creo que todav¨ªa estoy en deuda con lo buenos que fueron conmigo¡±, ha contado.
Pero en la entrevista no habla solo de su relaci¨®n, cercana todav¨ªa, con la familia Flores, sino de su vida actual y su opini¨®n sobre Ben Affleck, de quien se dice que es su actual pareja. De Armas reflexiona sobre el talento ¡°infinito¡± que derrocha en Deep Water, el thiller que han rodado juntos y que se estrenar¨¢ el pr¨®ximo 3 de noviembre en Estados Unidos. ¡°La primera vez que le¨ªmos las escenas juntos, qued¨® bastante claro que iba a hacer algo excepcional con un papel muy complejo¡±, ha dicho sobre Affleck, de 47 a?os. ¡°Su personaje es el motor de la historia y requiere que se mueva entre tragedia e iron¨ªa o entre el realismo y la comedia m¨¢s absurda¡±, contin¨²a.
A la actriz estos piropos le saben a poco y a?ade m¨¢s: ¡°No solo sabe c¨®mo hacerlo con facilidad, sino que tambi¨¦n logra sorprenderte en cada toma. Su talento es infinito". Seg¨²n afirma la revista People, la pareja tuvo una conexi¨®n instant¨¢nea mientras rodaban el film en Nueva Orleans. ¡°Ten¨ªan una gran qu¨ªmica desde el principio¡±, ha comentado una fuente pr¨®xima al rodaje a la publicaci¨®n estadounidense.
Affleck y Ana de Armas fueron vistos recientemente en La Habana, Cuba, por donde pasearon juntos sin tapujos y visitaron restaurantes y tiendas en las que se dejaron fotografiar sin poner ninguna pega. ¡°Se les ve muy contentos, especialmente feliz a Ben. Se muestran cari?osos en p¨²blico y no se ocultan¡±, dijo la semana pasado un testigo de este viaje a la prensa de Estados Unidos.