Solo un poco puta

Tras superar el ecuador del confinamiento, decid¨ª aceptar las invitaciones a formar parte de InstagramLive de amigos y compa?eros de trabajo. Mar Flores, Vicky Mart¨ªn Berrocal, Ainhoa Arteta y Miriam Y¨¦benes, la lista me recordaba una de mis fiestas de cumplea?os pero en realidad es lo que el coronavirus ha hecho con mi vida social: una cadena de telecomunicaci¨®n donde el contenido principal es mostrar c¨®mo sobrellevamos la cuarentena.

La verdad es que un poco de exhibici¨®n sienta mejor de lo que esperaba. Adem¨¢s, me salen unas frases de inquietante trascendencia. ¡°Aprovechemos el encie...

Tras superar el ecuador del confinamiento, decid¨ª aceptar las invitaciones a formar parte de InstagramLive de amigos y compa?eros de trabajo. Mar Flores, Vicky Mart¨ªn Berrocal, Ainhoa Arteta y Miriam Y¨¦benes, la lista me recordaba una de mis fiestas de cumplea?os pero en realidad es lo que el coronavirus ha hecho con mi vida social: una cadena de telecomunicaci¨®n donde el contenido principal es mostrar c¨®mo sobrellevamos la cuarentena.

La verdad es que un poco de exhibici¨®n sienta mejor de lo que esperaba. Adem¨¢s, me salen unas frases de inquietante trascendencia. ¡°Aprovechemos el encierro para volver a respetar al tiempo¡±. Cuela perfectamente en mis InstaLives m¨¢s ¨ªntimos . Quiz¨¢s porque todos estamos en el mismo momento neotrascendente. En otros lives prefiero confirmar que estoy ahora m¨¢s refractario con Meghan Markle, entiendo que ha sido un error mudarse a Los ?ngeles en plena coronacrisis. ?C¨®mo se puede defender eso? Quedan como unos ricos cualquiera que viven encerrados en su burbuja. Algo que ya se sab¨ªa.

Propongo que nos enfoquemos en lo esencial. Es probable que as¨ª como dicen que se podr¨ªa acabar con el capitalismo m¨¢s salvaje, se domestique el culto a la celebridad. Ya empiezo a rechazar cualquier invitaci¨®n para un InstaLive que lleve impreso la palabra famoso. Y m¨¢s todav¨ªa la que ponga ¡°Famoso local¡±. Desconf¨ªo de quien me llama famoso. Y m¨¢s si te piden recomendaciones de libros y pel¨ªculas. Yo siempre sugiero Vargas Llosa y que disfruto cada d¨ªa las deliciosas columnas de Maruja Torres e ??igo Dom¨ªnguez en este diario. En una conversaci¨®n les pareci¨® insuficiente.

Es que me fastidia dar recomendaciones pero estoy atento a las de los otros. Segu¨ª la invitaci¨®n de Javier Mar¨ªas de ver El d¨ªa m¨¢s largo, la pel¨ªcula sobre el desembarco en Normand¨ªa, estrenada en 1962. Al cine b¨¦lico siempre le he visto demasiada carga heterosexual pero esta pel¨ªcula me atrap¨®. Sobre todo por el reparto. Es b¨¦lico y sexy. Crees ver a Steven Seagal joven entre los marines. Y es Steven Seagal. En un mismo bote, sospechas que est¨¢n Sal Mineo, Robert Mitchum y John Wayne y en efecto, son ellos. Richard Burton cierra la pel¨ªcula con un mon¨®logo espl¨¦ndido. Sean Connery hace de militar simp¨¢tico, Henry Fonda de buen hombre. Por un momento cre¨ª ver a Anthony Perkins, pero ya tem¨ªa perder la cabeza y que, al final del confinamiento, volver¨ªa a las calles un poco m¨¢s gay.

Siempre nos quedar¨¢ Sara Montiel. Lecturas desentierra, por el s¨¦ptimo aniversario de su fallecimiento, una entrevista donde Sara declara maravillas como que ella fue solo un poco putita, que hizo sexo sin amor con James Dean dos d¨ªas antes que ¨¦l se estrellase mortalmente o que entre Severo Ochoa y ella hubo ¡°atracci¨®n f¨ªsica y punto. Nos gustamos y nos acostamos¡±. Similar a Pretty Woman, que cumple 30 a?os de estrenarse. Una pel¨ªcula que en su momento se critic¨® porque ¡°embellec¨ªa¡± la prostituci¨®n. Algo que tambi¨¦n se podr¨ªa decir de Veneno, la brillante nueva serie de Los Javis, donde la vida en la Casa de Campo de un grupo de prostitutas es mucho m¨¢s solidaria y vertebrada que la del gobierno y la oposici¨®n. Pero el talentoso d¨²o de directores te hace recordar con La Veneno un extravagante momento de libertad alentado por la televisi¨®n. El marginado, el perdedor de pronto era la estrella.

Y para entender mejor el eterno fen¨®meno de Pretty Woman, conviene revisar Medianoche, la pel¨ªcula de Mitchell Leisen de 1942, que Alm¨®dovar desliza entre sus recomendaciones. Claudette Colbert interpreta una aventurera que llega a Par¨ªs tan solo con un vestido de noche y consigue inmiscuirse en una deliciosa trama sentimental de la jet set. Una cenicienta que pasa de corista a baronesa, infectando con su vida las vidas de otros. Eso s¨ª, m¨¢s simp¨¢tica, inocente y menos virulenta que un virus.