El otro equipo de Michael Robinson, Christine, sus dos hijos y una nieta
El exfutbolista y presentador era un amante del rugby, jugaba al golf, admiraba la pintura de Vel¨¢zquez y era amigo de Phil Collins
¡°Siento ser portador de malas noticias. No me han dado esperanzas¡±. Con sencillez, elegancia y discreci¨®n, cualidades que le caracterizaban, Michael Robinson anunciaba a este diario hace pocos d¨ªas que su c¨¢ncer, el melanoma que anunci¨® hace a?o y medio, estaba lejos de menguar. El exfutbolista y comentarista deportivo...
¡°Siento ser portador de malas noticias. No me han dado esperanzas¡±. Con sencillez, elegancia y discreci¨®n, cualidades que le caracterizaban, Michael Robinson anunciaba a este diario hace pocos d¨ªas que su c¨¢ncer, el melanoma que anunci¨® hace a?o y medio, estaba lejos de menguar. El exfutbolista y comentarista deportivo falleci¨® el martes 28 de abril en su casa de Marbella (M¨¢laga). Ten¨ªa 61 a?os.
El pasado 12 de marzo llegaron las malas noticias, con una met¨¢stasis de cerebro. Algo que hac¨ªa presagiar el final. Sin embargo, todo empez¨® con un bulto en una axila. ¡°Michael tienes c¨¢ncer, es uno malo, no tiene cura¡±, le dec¨ªa Robinson a Carles Francino en La Ventana de la Cadena Ser en diciembre de 2018. ¡°No me lo cre¨ªa. Yo me encontraba como una flor¡±. El martes Francino le recordaba, puesto que eran amigos desde hac¨ªa 30 a?os, cuando coincidieron en Canal+. Despu¨¦s el informador le pidi¨® que se uniera a ¨¦l en la radio: ¡°Cada lunes ven¨ªa a La ventana para criticar a Boris Johnson. Hace unas semanas coment¨® que para celebrar su cumplea?os hab¨ªa estado toda la familia juntos, con su familia, en un barco¡±, rememoraba sobre sus ¨²ltimas an¨¦cdotas juntos.
¡°Michael ha sido un apasionado de la vida¡±, contaba Carles Francino. ¡°Hac¨ªa que a su alrededor todo el mundo disfrutara, de lo que fuera, era un tipo extraordinario¡±. Quienes m¨¢s han disfrutado de ¨¦l han sido, l¨®gicamente, su esposa y sus hijos. Al lado de Michael siempre caminaba Christine, especialista en medicina china. El matrimonio estaba casado desde hace 40 a?os y ten¨ªa dos hijos, Liam, de 33 a?os, y Aimee, de 28, y una nieta.
Robinson fue un hombre de grandes gustos culturales. Le gustaba el arte, el cine, las series, como The Wire y Treme, o las producciones de la BBC. Era aficionado al humor ingl¨¦s, pero tambi¨¦n reconoc¨ªa hace casi una d¨¦cada en Jot Down: ¡°Eugenio me hac¨ªa partir de risa¡±. Era buen amigo de Phil Collins. Incluso puso voz a un personaje de la cinta Shrek. Le gustaban todos los g¨¦neros, en especial el arte cl¨¢sico, la pintura de Vel¨¢zquez, que ¡°dignific¨® la derrota y la muerte¡±. Tanto que cuando acab¨® su etapa futbol¨ªstica activa pens¨® incluso en volver a la universidad para estudiar Historia del Arte. Pero el deporte siempre marc¨® su carrera, dentro y fuera de los campos.
Fue cuando todav¨ªa jugaba en la Premier League brit¨¢nica cuando conoci¨® a Christine. Ella fue quien le acompa?¨® cuando arranc¨® su carrera deportiva en Espa?a. ?l siempre lo recordaba: cuando le fich¨® el Osasuna, ambos buscaron la supuesta ciudad en un mapa. Nunca la encontraron, obviamente. Ya aterrizados en Pamplona, a finales de los ochenta, se sintieron c¨®modos en la ciudad y, aunque cuando acab¨® su etapa como jugador de f¨²tbol volvieron a Inglaterra, a Windsor, finalmente vendieron su casa en esta ciudad a una hora de Londres para asentarse definitivamente en Madrid, donde Robinson triunfar¨ªa como comentarista deportivo desde principios de los noventa y hasta el final de sus d¨ªas. Hace un tiempo se hab¨ªa comprado una casa en Marbella, a apenas 100 metros de la orilla del mar, en la que se sent¨ªa feliz y con la que bromeaba: ¡°Yo tengo que ser imagen de la Junta de Andaluc¨ªa. ?Una persona con melanoma viviendo en la playa!¡±.
Robinson era muy discreto con su vida privada y sus hijos. Apenas hablaba en p¨²blico de ellos y hay escasas im¨¢genes de la familia juntos. S¨ª que desgran¨® una an¨¦cdota sobre Liam hace algo m¨¢s de dos a?os, en una entrevista con Risto Mejide. Entonces cont¨® que, cuando volvi¨® a El Sadar ya como comentarista en Canal+, su visita no termin¨® de gustar y esa inquina se reflej¨® en su hijo. ¡°Le ped¨ª al gerente del club si mi hijo, de siete a?os, pod¨ªa saltar al campo con el capit¨¢n del Osasuna y su camiseta roja. Cuando el ni?o estaba en el t¨²nel para salir de la mano de I?aki Ib¨¢?ez, el delegado les separ¨® e impidi¨® a mi hijo saltar¡±, contaba, dolido. "No s¨¦ qu¨¦ diablos hice tan mal para que me tengan tanta man¨ªa, para inclusive hacerle eso a mi hijo¡ A m¨ª pueden machacarme, pueden dejarme cojo, pero hacer eso a un ni?o de siete a?os¡ No he sido capaz de perdon¨¢rselo¡±.
El futbolista no solo amaba su deporte, sino que tambi¨¦n era gran aficionado al golf, as¨ª como al rugby, al que calificaba como ¡°el deporte de equipo por excelencia¡±. Y precisamente su hijo decidi¨® seguir ese camino. Liam Robinson naci¨® en Liverpool, pero se ha criado en Espa?a. Lleg¨® al pa¨ªs cuando ten¨ªa solo ocho meses y sus padres se instalaron en Pamplona. Durante a?os se dedic¨® al rugby de manera profesional, inici¨¢ndose en Madrid, en la urbanizaci¨®n de La Moraleja, donde viv¨ªan, cuando ten¨ªa apenas seis a?os. Pese a que pod¨ªa haber sido internacional con Escocia, se decidi¨® por Espa?a, porque le hac¨ªa ¡°m¨¢s ilusi¨®n¡±. Ese deporte le aportaba ¡°conocer otras culturas, divertirme jugando, viajar y hacer amigos¡±. ¡°El rugby te forma como deportista y como persona¡±, declaraba al diario As hace a?os. En los ¨²ltimos a?os, Liam era la mano derecha de su padre, uno de sus colaboradores en su programa Informe Robinson ¡ªque estren¨® en 2007 y con el que gan¨® dos premios Ondas¡ª. Adem¨¢s ten¨ªa el cargo de director creativo de su empresa, Robinson Productions, una productora a la vez que creadora de contenidos, organizadora de eventos y consultora.
Su hija Aim¨¦e tambi¨¦n ocup¨® titulares hace unos a?os, pero por un suceso muy diferente. En junio de 2017, la joven estuvo presente durante los atentados de Londres. Aim¨¦e mand¨® mensajes esa noche a sus padres, que los vieron a la ma?ana siguiente. ¡°Menos mal que mi mujer y yo est¨¢bamos ya en la cama y no fuimos conscientes de lo que nos estaba mandando, porque si no me habr¨ªa llevado un susto de muerte y no habr¨ªa sabido c¨®mo reaccionar¡±, contaba Robinson despu¨¦s de lo ocurrido y ante los micr¨®fonos de la Cadena Ser. En los mensajes, la joven arrancaba diciendo: ¡°Londres ha enloquecido. Estoy en el puente de Londres y hay un hombre que se ha vuelto loco, est¨¢ gritando, disparando y con una navaja. Tengo miedo¡±. Pero, al final de los mismos, les tranquilizaba: ¡°Probablemente cuando os levant¨¦is os encontr¨¦is las noticias, pero ya estoy bien. Qu¨¦ triste¡±.