Los Trump y los Biden, dos familias pol¨¦micas a las puertas de la Casa Blanca
Los clanes de los candidatos han estado siempre bajo los focos por el rumbo pol¨ªtico de sus patriarcas. El del presidente es menos discreto que el del aspirante
Las fotos de familias esconden las imperfecciones. Los Trump y los Biden han posado para varias instant¨¢neas durante la campa?a presidencial de 2020, pero no han podido ocultar las grietas que los ponen en el centro de la pol¨¦mica: conflictos de intereses, drogas, tragedias y envidias. Por un lado est¨¢n los Trump, a quienes Estados Unidos ya les c...
Las fotos de familias esconden las imperfecciones. Los Trump y los Biden han posado para varias instant¨¢neas durante la campa?a presidencial de 2020, pero no han podido ocultar las grietas que los ponen en el centro de la pol¨¦mica: conflictos de intereses, drogas, tragedias y envidias. Por un lado est¨¢n los Trump, a quienes Estados Unidos ya les conoc¨ªa antes de que se mudaran a la Casa Blanca por sus apariciones en la televisi¨®n, una familia medi¨¢tica que en los ¨²ltimos cuatro a?os ha confirmado la excentricidad de su clan y ha dejado ver las luchas de poder entre sus miembros. M¨¢s discretos han sido los Biden, viejos conocidos de Washington y que en los ocho a?os de la vicepresidencia al lado de Barack Obama se mantuvieron casi en el anonimato, pero que en los ¨²ltimos meses han atra¨ªdo la atenci¨®n por sus vidas personales y tragedias.
Joe Biden ha contado en varias entrevistas lo dif¨ªcil que le ha resultado superar la muerte de su hijo mayor, Beau, exfiscal general de Delaware que en 2015 falleci¨® por un tumor cerebral a los 46 a?os. ¡°Beau deber¨ªa estar compitiendo por la presidencia¡±, dijo entre l¨¢grimas en un directo en la televisi¨®n, durante las primarias. La historia de las p¨¦rdidas de Biden empieza varias d¨¦cadas atr¨¢s cuando su primera esposa, Neilia, y a su hija Naomi, de 13 meses, murieron en un accidente de coche. Junto a ellas viajaban tambi¨¦n los dos chicos, Beau y Hunter. Ellos sobrevivieron y se volvieron m¨¢s cercanos a su padre, que tras la tragedia pens¨® en dejar su incipiente carrera pol¨ªtica. Un par de a?os m¨¢s tarde su hermano le present¨® a una joven maestra de ingl¨¦s: Jill Jacobs, quien tard¨® dos a?os y cinco propuestas de matrimonio en casarse con Biden. La hija de ambos, Ashley, es una activista y filantr¨®pica que promueve el comercio justo y mantiene un perfil p¨²blico bajo. El recuerdo de Beau solo puede hacer enfurecer a Biden si su nombre sale de la boca de Donald Trump.
Pero los se?alamientos del presidente hacia la familia Biden son principalmente hacia el segundo hijo del dem¨®crata: Hunter. El abogado de 50 a?os tiene un historial de drogas por el que fue expulsado de las Fuerzas Armadas, pero para la campa?a del republicano se ha vuelto un objetivo por su relaci¨®n con la firma ucraniana de gas Burisma. Hunter Biden fue invitado a ser parte del Consejo de Administraci¨®n de la firma, cuando su padre era vicepresidente de EE UU, y Trump le ha se?alado de aprovecharse del cargo de su padre para hacer negocios. ¡°Soy un Biden y mi padre nunca ha sugerido que el perfil p¨²blico de la familia sea mi prioridad. La prioridad siempre ha sido clara para ¨¦l y ara m¨ª: nunca huyas de los problemas¡±, cont¨® Hunter a la revista Vanity Fair, el a?o pasado. El segundo hijo de Biden tambi¨¦n se vio envuelto en una pol¨¦mica al anunciar su relaci¨®n con la viuda de su hermano Beau, Hallie, con quien solo sali¨® durante un a?o.
M¨¢s pol¨¦micos han sido los Trump que, como el patriarca, han estado acostumbrados a romper los moldes a la vista de todos: Ivanka, Donald Jr., Eric, Tiffany y Barron. En las ¨²ltimas semanas se ha visto a Ivanka haciendo campa?a en los estados clave. Ella y esposo, Jared Kushner, se mudaron a Washington para trabajar en la Casa Blanca como asesores de Trump. Aunque el conflicto de inter¨¦s est¨¢ a la vista, el presidente ha sugerido en varias ocasiones que la mayor de sus hijas podr¨ªa tener una carrera pol¨ªtica en el futuro. Kushner, por su parte, se ha dedicado a hacer buena parte de la Pol¨ªtica Exterior de la Administraci¨®n, con un especial enfoque en Oriente Pr¨®ximo. Mientras Eric Trump se dedica a administrar las empresas de bienes ra¨ªces del presidente, Donald Jr., que hab¨ªa intentado mantenerse alejado de su padre, se ha ido abriendo un hueco casi como su portavoz no oficial, de la mano de su novia, Kimberly Guilfoyle, una expresentadora de la cadena Fox que ahora lleva las finanzas de la campa?a del republicano. La madre de Donald Jr., Ivana, contaba en sus memorias que propuso nombrar a su primer hijo como el magnate y que este se neg¨® en un principio. ¡°No puedes hacer eso. ?Qu¨¦ pasa si resulta ser un perdedor?¡±, le dijo.
Los menores son Tiffany, una abogada reci¨¦n graduada de la Universidad de Georgetown y que casi no visita la Casa Blanca, hija del matrimonio del republicano con la actriz Marla Maples; y Barron, el adolescente que ha crecido lo m¨¢s alejado posible de los focos por petici¨®n de su madre, y primera dama, Melania Trump. La tambi¨¦n exmodelo, de origen esloveno, se ha convertido en uno de los puntos de mayor atenci¨®n cerca del presidente por sus desaires. Melania conoci¨® a Trump en 2001 y se cas¨® con ¨¦l cuatro a?os m¨¢s tarde. La pareja fue pol¨¦mica desde el comienzo. ¡°Sonr¨ªe, querida. Eres bella y rica¡±, le dec¨ªa Trump despu¨¦s de celebrar su matrimonio. La primera dama es una inc¨®gnita y en pocas ocasiones ha revelado sus opiniones aunque a veces se le ve inc¨®moda al lado de Trump. El misterio ha quedado desvelado recientemente por una excolaboradora que grab¨® en audio una conversaci¨®n en la que la primera dama reconoce que le aburren las tareas de la residencia presidencial: ¡°Me estoy partiendo el culo para hacer las cosas de Navidad en la Casa Blanca. ?A nadie le importa un carajo la Navidad y la decoraci¨®n!¡±, se le escuchaba decir en la grabaci¨®n.