El restaurante de Pepe Rodr¨ªguez, de ¡®MasterChef¡¯, al l¨ªmite por culpa de la pandemia

Los cocineros Samantha Vallejo-N¨¢gera, Jordi Cruz y Pepe Rodr¨ªguez se han convertido en mucho m¨¢s que chefs. Son rostros populares que cada semana se cuelan en los hogares gracias a su aparici¨®n en el popular programa MasterChef, de Televisi¨®n Espa?ola. Llevan casi una d¨¦cada al frente del concurso de cocina, pero tambi¨¦n han seguido cada uno con sus negocios: Vallejo-N¨¢gera con una empresa de catering, Cruz con el tres estrellas Michelin AbAc y Rodr¨ªguez con El Boh¨ªo, situado en Illescas, Toledo. Sin embargo, este ¨²ltimo no pasa por su mejor momento. Como el propio Rodr¨ªguez ha contado, su establecimiento est¨¢ pasando un momento muy complicado a causa de la pandemia.

¡°Hay un momento en que cada uno tiene un l¨ªmite¡±, ha explicado el restaurador en una entrevista con la revista Lecturas. ¡°No las tengo todas conmigo. Estamos en ese l¨ªmite¡±, detalla Rodr¨ªguez en la charla, y aunque obviamente no quiere echar el cierre a su restaurante, asegura: ¡°No descarto nada¡±. ¡°Yo voy a dar todo lo que pueda para mantenerlo hasta que un d¨ªa diga: ¡®Se?ores, hasta aqu¨ª hemos llegado¡±, afirma.

Las restricciones por la pandemia del coronavirus han hecho que el cocinero tenga que echar el cierre de su establecimiento en alguna ocasi¨®n, y por tanto ha tenido a sus empleados en varias ocasiones en un ERTE, aunque explica que en este momento est¨¢n todos trabajando. ¡°El trabajo ha descendido un 40 o 50%. No puedes tener la misma plantilla¡±, reflexiona. Una situaci¨®n por la que han pasado much¨ªsimos negocios de hosteler¨ªa: se calcula que unos 85.000 establecimientos han echado el cierre de forma definitiva. Unos 355.000 empleados del sector han estado en un ERTE. De hecho, el propio Rodr¨ªguez se manifest¨® el pasado mayo de 2020 frente al Congreso de los Diputados junto a un centenar de compa?eros cocineros para reclamar medidas espec¨ªficas para el sector.

El de Rodr¨ªguez, por privilegiado, no ha estado menos afectado por la pandemia. El suyo lleg¨® a ser el restaurante mejor valorado de Espa?a en la aplicaci¨®n El Tenedor, en la que los usuarios califican la calidad de los establecimientos. Naci¨® como una peque?a tasca familiar de la mano de su abuela Valentina y de su t¨ªa Romana, que en 1935 abrieron una sencilla casa de comidas que se convirti¨® en el ¨²nico punto donde parar a almorzar entre Madrid y Toledo. Pero ¨¦l, tercera generaci¨®n, tom¨® las riendas ¡ªdespu¨¦s de formarse con grandes como Mart¨ªn Berasategui o Ferr¨¢n Adri¨¤¡ª y lo ha reconvertido a su vez en un lugar de peregrinaje donde mezcla la gastronom¨ªa popular manchega con la alta cocina, y donde da de comer a 60 comensales en dos plantas, en un edificio que poco tiene que ver con aquel de hace 85 a?os y que ha sometido a una reforma integral. Entre las elaboraciones del toledano, casado y con tres hijos, est¨¢n platos estrella como la pring¨¢ del cocido, berza y su caldo, la ropa vieja con el caldo de cocido, las lentejas con butifarra, el cabrito asado con cebolletas o la media croqueta de jam¨®n. Su trayectoria le hizo alzarse con el Premio Nacional de Gastronom¨ªa en el a?o 2010 y le ha otorgado una estrella Michelin.

Esta no es la primera dificultad econ¨®mica que atraviesa el cocinero. ?l mismo ha contado que cuando le ofrecieron ser jurado de MasterChef acept¨® en buena parte por dinero, porque El Boh¨ªo atravesaba una mala situaci¨®n a causa de la crisis. Adem¨¢s, Rodr¨ªguez le confesaba a ICON hace apenas un a?o, antes del estallido de la pandemia de coronavirus, que la posibilidad de ampliar el negocio estaba ah¨ª. ¡°Siempre ha habido ofertas para abrir en Madrid, pero si no lo hice durante la crisis, que en Illescas peg¨® muy duro, no lo voy a hacer ahora¡±, relataba. Quiz¨¢s esa decisi¨®n, que muchos considerar¨ªan conservador para un chef que podr¨ªa haber triunfado con facilidad en la capital, le ha salvado.