El duque de Kent, primo, amigo y hombre de compa?¨ªa de Isabel II en su desfile de cumplea?os

Isabel II es una isla. No importa qui¨¦nes o cu¨¢ntos la rodeen en los actos oficiales. Los brit¨¢nicos reconocen, admiran ¡ªen su gran mayor¨ªa¡ª y esperan de la reina una entereza solitaria que no atribuyen a ning¨²n otro miembro de la familia real. Por eso tuvo categor¨ªa de conmoci¨®n nacional su imagen en la capilla de San Jorge el pasado 17 de abril, ...

Isabel II es una isla. No importa qui¨¦nes o cu¨¢ntos la rodeen en los actos oficiales. Los brit¨¢nicos reconocen, admiran ¡ªen su gran mayor¨ªa¡ª y esperan de la reina una entereza solitaria que no atribuyen a ning¨²n otro miembro de la familia real. Por eso tuvo categor¨ªa de conmoci¨®n nacional su imagen en la capilla de San Jorge el pasado 17 de abril, durante el funeral de su esposo, Felipe de Edimburgo. Sentada ella sola en una esquina del coro, de luto riguroso, la jefatura del Estado reca¨ªa sobre una peque?a mujer que cuatro d¨ªas despu¨¦s iba a cumplir 95 a?os.

Por eso los miembros de la casa de Windsor se han conjurado para acompa?arla a partir de ahora en los actos oficiales. Y este s¨¢bado, cuando Isabel II presida la ceremonia del Trooping the Colour, a su lado estar¨¢ su primo, el duque de Kent (85 a?os). Da lo mismo que un a?o antes la reina ya hubiera asistido sola al desfile de estandartes con que se celebra oficialmente su cumplea?os. Y que no fuera la primera vez. Hay un prop¨®sito expl¨ªcito de respaldar a la monarca en la reanudaci¨®n de sus obligaciones, a medida que las restricciones sociales se relajan. A pesar de que el palacio de Buckingham se esfuerza estos d¨ªas en recalcar que Isabel II ya est¨¢ ansiosa por retomar el mando y que recibe este viernes a los l¨ªderes del G-7 en Cornualles, y al estadounidense Joe Biden el domingo, en Windsor. Pero el s¨¢bado es el evento por excelencia.

El Trooping the Colour se celebra desde hace m¨¢s de 260 a?os. Se instaur¨® durante el reinado de Carlos II. El segundo s¨¢bado de cada junio, los brit¨¢nicos celebran el aniversario oficial de su soberana (el cumplea?os de la reina es en realidad el 21 de abril, y lo festeja ese d¨ªa de un modo m¨¢s privado). M¨¢s de 1.000 oficiales y soldados, 200 caballos y seis bandas militares para mostrar los estandartes de los distintos cuerpos del ej¨¦rcito frente al palacio de Buckingham. Los devotos de la serie The Crown (Netflix) recordar¨¢n el inicio de la cuarta temporada, en la que Isabel II acaricia y tranquiliza a su caballo antes de salir por la entrada principal del palacio, montada a la amazona, para ser aclamada por el gent¨ªo.

Un total de 36 veces ha presidido as¨ª la reina la ceremonia, para la que se agolpan a lo largo de Mall, en el lado del parque de Saint James que da a las Caballerizas Reales, miles de ciudadanos. Otros optan por un sitio en las gradas montadas, cuyo precio puede superar los 50 euros. En los ¨²ltimos a?os, Isabel II contemplaba desde el coche oficial un espect¨¢culo que culminaba siempre con el saludo desde el balc¨®n central del palacio de los miembros m¨¢s relevantes de la familia real.

En 2020, todo se traslad¨®, de un modo m¨¢s reducido, pero igual de estricto, disciplinado y elegante, al cuadr¨¢ngulo del castillo de Windsor, donde Isabel II se recluy¨® junto a su esposo desde el inicio de la pandemia. Felipe de Edimburgo, retirado a?os antes de la vida p¨²blica, no se dej¨® ver en esa ocasi¨®n. El s¨¢bado, sin embargo, la reina estar¨¢ acompa?ada por su primo Eduardo, el duque de Kent. Hijo del pr¨ªncipe Jorge, el hermano de Jorge VI, es uno de los miembros de la familia real m¨¢s cercanos a la reina y que menos quebraderos de cabeza le ha dado. Tambi¨¦n ten¨ªa un parentesco, m¨¢s lejano, con el esposo de Isabel II. Gran parte de su vida la ha dedicado al ej¨¦rcito. Ingres¨® en la Real Academia Militar de Sandhurst a los 18 a?os, donde se gradu¨® como teniente segundo, y no se retir¨® hasta 20 a?os despu¨¦s.

El duque de Kent es uno de los miembros de la familia real con un nivel m¨¢s discreto, pero sigue participando todos los a?os en decenas de actos oficiales en representaci¨®n de la reina. Ya la acompa?¨® en el Trooping the Colour de 2013. Ha sido promotor activo, en nombre de la casa real, del Comercio Exterior del Reino Unido, y se ha movido por medio mundo. Dos son, sin embargo, las cosas por las que es m¨¢s conocido. Su intensa afici¨®n al tenis, que le lleva a participar todos los a?os en la ceremonia de entrega de premios en el Torneo de Wimbledon. Y su matrimonio con Katharine Worsley, a la que precisamente conoci¨® en una base militar de Inglaterra. Ella se ha ganado el calificativo de la ¡°m¨¢s aislada de la realeza¡±, the reclusive royal, porque ha huido de la escena p¨²blica, se convirti¨® al catolicismo y abandon¨® el rito anglicano de la casa real, y durante a?os dio clases de m¨²sica en secreto a los ni?os de un colegio p¨²blico de primaria. La reina mantiene con ella una estrecha relaci¨®n. La pareja vive en uno de los apartamentos privados del palacio de Kensington, y acude siempre que la monarca les necesita. El pr¨®ximo s¨¢bado, el duque de Kent acudir¨¢ de nuevo al lado de Isabel II para celebrar con ella sus 95 a?os.