Isabel II muestra su ¡°gran afecto¡± por Escocia con un broche de diamantes de su abuela
La reina ha lucido una joya con forma de cardo, la flor que representa a Escocia, en la sexta sesi¨®n de apertura del Parlamento en Holyrood
Los broches son uno de los accesorios favoritos de la reina Isabel II, que suele lucirlos en su solapa izquierda en muchas de sus apariciones. La ¨²ltima ha tenido lugar este 2 de octubre, durante la sexta sesi¨®n inaugural del Parlamento escoc¨¦s en Holyrood, y en esta ocasi¨®n ha estado cargada de significado. Porque la reina no ha elegido un broche al azar de su extensa colecci¨®n (Leslie Field, autora del ...
Los broches son uno de los accesorios favoritos de la reina Isabel II, que suele lucirlos en su solapa izquierda en muchas de sus apariciones. La ¨²ltima ha tenido lugar este 2 de octubre, durante la sexta sesi¨®n inaugural del Parlamento escoc¨¦s en Holyrood, y en esta ocasi¨®n ha estado cargada de significado. Porque la reina no ha elegido un broche al azar de su extensa colecci¨®n (Leslie Field, autora del libro Las joyas de la reina afirma que tiene cerca de un centenar) sino uno que representa su cari?o por Escocia, en un momento tenso en el que los partidos favorables a un nuevo refer¨¦ndum para la independencia de la zona son mayor¨ªa en el Parlamento aut¨®nomo.
La joya escogida por la soberana ha sido el conocido como Diamond Thistle Brooch (broche de cardo de diamantes), una espectacular pieza que perteneci¨® a su abuela, la reina Mar¨ªa (1910-1936), gran coleccionista de joyas. El cardo es la flor nacional de Escocia, uno de sus s¨ªmbolos, como el tart¨¢n. Cuenta la leyenda que esta planta silvestre adquiri¨® dicho simbolismo porque sirvi¨® para alertar a los guerreros escoceses del peligro de un ataque dan¨¦s hace siglos: en plena noche, uno de los invasores pis¨® un cardo y las espinas le provocaron tal dolor que su grito sirvi¨® de alarma y los escoceses pudieron atacar y vencer a sus enemigos. Esta humilde flor est¨¢ presente en muchos blasones escoceses y da nombre a la Orden del Cardo, la segunda m¨¢s importante en el Reino Unido despu¨¦s de la de la Jarretera, y fue institucionalizada en 1678 por Jaime II (aunque se data su creaci¨®n en tiempos de Carlomagno) para premiar a los escoceses que apoyaron su causa. Hoy en d¨ªa la reina es la soberana de esta orden de caballer¨ªa, cuyo lema latino reza ¡°Nemo me impune lacessit¡± (nadie me hace da?o con impunidad).
Todo ese significado oculto en esta joya sirvi¨® para reforzar el discurso de unidad y cari?o por la regi¨®n que la reina dio ante la C¨¢mara en Holyrood. ¡°He hablado en varias ocasiones de mi profundo y perdurable afecto por este maravilloso pa¨ªs y de los muchos momentos felices que compart¨ª aqu¨ª con el pr¨ªncipe Felipe¡±, dijo, recordando a su esposo, Felipe de Edimburgo, que falleci¨® el pasado 9 de abril, a los 99 a?os. No se trata de la primera vez que la monarca luce esta pieza alargada de estilo art d¨¦co, que su abuela, la princesa Mar¨ªa de Teck, esposa de Jorge V, sol¨ªa llevar en sus tocados; existe incluso una fotograf¨ªa de la actual reina de ni?a junto a su abuela en la que esta lo lleva prendido en uno de sus sombreros.
Tampoco es el ¨²nico broche con este motivo que atesora la soberana: en m¨¢s de una ocasi¨®n ha utilizado el broche de los tres cardos, del que se afirma que fue un regalo que le hizo el sult¨¢n de Om¨¢n por su Jubileo de Diamante en 2012 (con el que se celebraron sus seis d¨¦cadas en el trono), y con el que en 2014 acudi¨® en Glasgow a la inauguraci¨®n de los Juegos de la Commonwealth. La flora siempre ha tenido un significado especial en el Reino Unido, asociada a los distintos territorios que lo conforman: la rosa es el s¨ªmbolo de Inglaterra; el tr¨¦bol, de Irlanda; el narciso representa Gales, y el cardo se identifica con Escocia. Todas estas plantas cargadas de simbolismos est¨¢n presentes en muchas de las joyas de la familia real brit¨¢nica, y tambi¨¦n han formado parte de estilismos reales: la diadema de la coronaci¨®n de Jorge IV, con la que las reinas acuden a la apertura del Parlamento desde la reina Adelaida, fue creada en 1820 por Rundell & Bridge y est¨¢ adornada con cardos, rosas y tr¨¦boles, las mismas plantas que se pueden ver en el bordado del vestido del retrato oficial de la reina Mar¨ªa, de 1911. La tradici¨®n se ha mantenido: Kate Middleton, duquesa de Cambridge, tambi¨¦n llev¨® estas flores en el encaje hecho a mano de su vestido nupcial de Alexander McQueen, con el que se cas¨® con el pr¨ªncipe Guillermo en 2011.