?Orinar de pie u orinar sentados? Un dilema sobre el que hasta Messi ha opinado

Durante el confinamiento algunos hicieron pan, se raparon la cabeza, se dejaron bigote, intentaron hacer ejercicio online y, en el caso espec¨ªfico de aquellos que tienen pene, se cambiaron ciertos h¨¢bitos ¨ªntimos: empezaron a orinar sentados en el retrete. Este dato arroja la conclusi¨®n de que la limpieza y la comodidad del h¨¢bito privado animan a muchos a miccionar sentados. ¡°Es m¨¢s c¨®modo hacerlo as¨ª cuando te despiertas en medio de la noche y no tienes que encender la luz¡±, dec¨ªa Larry David en Curb your enthusiasm.

Tres a?os despu¨¦s del inicio de aquel encierro vuelve la pregunta: ?ser¨ªa mejor que los hombres hicieran pis sentados? Se lo preguntan en esos foros que funcionan como term¨®metro social de cierto tipo de masculinidad: ¡°?Sol¨¦is mear sentados?¡±, pregunt¨® un usuario de Forocoches. El 61,33% de usuarios dijo s¨ª, aunque hay que tener en cuenta la mezcla de postiron¨ªa y troleo que se estila en esos foros. Tambi¨¦n se lo preguntan medios como The Guardian. Al lanzar esta cuesti¨®n al aire es muy habitual que las respuestas m¨¢s recurrentes hablen de motivos fisiol¨®gicos. Almudena Coloma del Peso, especialista en Urolog¨ªa Funcional en Lyx Instituto de Urolog¨ªa, asegura que aunque hay algunos estudios al respecto que han evaluado las diferencias en cuanto a flujo miccional entre orinar de pie y sentado en los varones, los resultados no son claros.

¡°Seg¨²n algunos estudios, parece que el flujo miccional podr¨ªa ser mejor estando de pie para los varones que orinan de esta forma de manera habitual. En caso de pacientes con s¨ªntomas miccionales secundarios a hipertrofia prost¨¢tica parece que es beneficioso hacerlo sentados. En las mujeres se recomienda orinar sentadas, dado que cuando no orinan de esta forma, se ven obligadas a hacerlo en cuclillas, lo que supone hacerlo en tensi¨®n, y no se permite una buena relajaci¨®n del suelo p¨¦lvico. Pero esto no parece ser un problema en el caso de los varones, debido a que la disposici¨®n de su aparato urinario permite realizarlo de pie en una posici¨®n relajada¡±, explica la doctora.

Por su parte, Anastasia T¨¦llez, antrop¨®loga, directora del Observatorio de las Masculinidades de Elche y del Postgrado de Especialista Universitario en Masculinidades, G¨¦nero e Igualdad, comenta que cualquier hombre se negar¨¢ a orinar sentado en un ba?o p¨²blico por motivos de higiene y por una pura cuesti¨®n de arquitectura: en los ba?os de hombres hay urinarios, siempre m¨¢s disponibles, c¨®modos y r¨¢pidos que el retrete. A?ade que dentro de estos ¨²ltimos est¨¢ ¡°la famosa mosca, ara?a o diana¡±. Se trata de unas pegatinas que se ponen ¡°como un se?uelo, porque el subconsciente de los hombres hace que apunten y as¨ª, hay que limpiar menos¡±, aclara. Antes de hablar con ICON, seg¨²n revela, pudo preguntar a hasta casi 70 hombres al respecto de esta cuesti¨®n antes de nuestra charla y asegura que 50 de ellos le aseguraron que en sus casas orinan sentados por higiene y comodidad. Parece que Forocoches no ment¨ªa. ¡°Por supuesto, tenemos que tener en cuenta que hablamos del ¨¢mbito de la privacidad y de un ambiente limpio¡±, matiza.

Un acto tan ¨ªntimo, un acto tan p¨²blico

Como si se tratase del pez¨®n masculino frente al pez¨®n femenino, se dir¨ªa que el acto masculino de orinar ha estado siempre presente a nuestro alrededor, mientras el de las mujeres permanece en secreto. Hombres orinando en la calle y en festivales. Michael Douglas orinando en una cazuela en La guerra de los Rose, Jack Nicholson orinando sobre un compa?ero de trabajo en Lobo, Adam Sandler ense?ando al ni?o que debe cuidar a orinar en plena calle en Un pap¨¢ genial... en el caso de esta ¨²ltima, la escena pareci¨® tan divertida y representativa a los productores que la eligieron para el p¨®ster promocional de la pel¨ªcula. Todos ellos lo hac¨ªan de pie.

La doctora Del Peso se?ala un momento oportuno para dejar de hacerlo. ¡°A partir de los 50 a?os, cuando los problemas prost¨¢ticos hacen que la orina salga m¨¢s dispersa y con menor fuerza, es m¨¢s dif¨ªcil dirigirlo hacia el interior del inodoro si el hombre est¨¢ de pie¡±. Curioso resulta, por tanto, que Anastasia T¨¦llez confiese que aquellos de mayor edad a los que pregunt¨® sobre sus h¨¢bitos urinarios aseguraran que jam¨¢s se sientan ni en casa, ni en ba?os p¨²blicos. Las brechas generacionales. ¡°De hecho, se?alan que si nosotras pudi¨¦ramos, tampoco lo har¨ªamos, porque es m¨¢s f¨¢cil y m¨¢s r¨¢pido. Tras ese argumento habr¨¢ que ver si no est¨¢ el miedo a hacer las cosas como mujeres. Orinar tiene una performatividad con mucha simbolog¨ªa con perspectiva de g¨¦nero. De hecho, en la adolescencia ellos hacen pis en grupo para ver qui¨¦n llega m¨¢s lejos, y entra en juego la competitividad y el atributo sexual de ver qui¨¦n puede m¨¢s¡±, dice la antrop¨®loga.

Ritxar Bacete Gonz¨¢lez, escritor e investigador, especialista en g¨¦nero y masculinidades, confirma que la forma en la que los hombres orinan tiene sesgos de g¨¦nero y comparte un recuerdo de adolescencia en su pueblo: ¡°Varios amigos nos coloc¨¢bamos en una misma l¨ªnea y despu¨¦s de haber contenido la orina durante largo tiempo, compet¨ªamos a ver qui¨¦n llegaba m¨¢s lejos¡­ Era un acto presexual de demostraci¨®n de capacidad, competencia, control y exhibici¨®n del pene, ?tierna homosociabilidad! Y, sin saberlo, tambi¨¦n de hombr¨ªa¡±.

Carmelo Hern¨¢ndez, psic¨®logo criminalista que colabora en el postgrado de Masculinidades e Igualdad de la Universidad Miguel Hern¨¢ndez, hace una pregunta. ¡°?Mear en manada y exhibir los genitales al viento como demostraci¨®n de poder corporativo es un signo inequ¨ªvoco de que es mucho m¨¢s que una cuesti¨®n de higiene? Lo es. Tambi¨¦n es mucho m¨¢s que una cuesti¨®n de cuidado personal saludable. Los gestos para m¨ª siempre son importantes, as¨ª como la actitud, y en este caso nos estamos refiriendo al simbolismo de adoptar la postura de micci¨®n sentado. Puede ser un granito de arena brillante en la inmensa playa de la lucha por la igualdad de g¨¦nero. Para algunos hombres de todas las edades, orinar de pie representa todav¨ªa la ¨²ltima frontera frente al feminismo igualitario, y es una l¨ªnea roja que para ellos no se tiene que traspasar, y por eso defienden la postura de miccionar de pie como quien defiende el basti¨®n de su hombr¨ªa. Supongo que esos hombres sienten una especie de humillaci¨®n ante la idea de tener que sentarse como hacen las mujeres para miccionar. Les hace sentirse inferiores, sumisos y, en suma, afeminados¡±.

En otro mundo

En Jap¨®n, una encuesta de 2020 llevada a cabo por Panasonic (que all¨ª tambi¨¦n comercializa productos electr¨®nicos de saneamiento) arroj¨® el dato de que el 70% de los hombres hacen pis sentados, y en Alemania cada vez son m¨¢s los sitzpinklers, el nombre que reciben los hombres que orinan sentados. De hecho, en los ba?os p¨²blicos germanos no solo existen cada vez m¨¢s carteles que piden a los hombres que no orinen de pie, sino que hay un dispositivo llamado WC Geist (¡¯fantasma de ba?o¡¯) que en el momento en el que alguien levanta la tapa del retrete, le pide que se siente. De estos gadgets ya est¨¢n lanz¨¢ndose diferentes versiones con voces de celebridades. Hablando de nombres conocidos, poco a poco van siendo m¨¢s los famosos que dicen p¨²blicamente ser sitzpinklers. ¡°Hago pis sentado, no salpica, lo mand¨¢s para abajo¡±, confes¨® Messi en un programa de televisi¨®n.

Bacete Gonz¨¢lez reconoce que el di¨¢logo entre el inodoro y el hombre ha cambiado con los a?os, al menos en su caso. ¡°En lo que a mis micciones cotidianas se refiere, he de reconocer que me muevo en la ambivalencia. S¨ª, lo confieso: a veces lo hago sentado y otras, de pie. Cuando tengo prisa lo hago erguido, como en los viejos tiempos. Cuando me pongo ideol¨®gico, hay algo que quiero ver en el m¨®vil, quiero unos segundos de soledad o est¨¢ mi hijo cerca y quiero dar ejemplo, me siento en la taza¡±. El acto es ¨ªntimo, s¨ª, pero es la intimidad donde hay m¨¢s militancia.

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