Anna Castillo: ¡°Durante un mes eres la actriz del momento y luego dejas de serlo. No pasa nada¡±
La int¨¦rprete catalana lleva a?os sin parar de trabajar y, a la vez, en la carpeta ¡°actriz del momento¡±. Ahora, estrena ¡®La vida era eso¡¯ sabiendo que un momento solo lleva a otro, y a otro, y a otro...
Anna Castillo (Barcelona, 27 an?os) tiene la capacidad de que uno tenga la sensacio?n de conocerla de toda la vida a los cinco minutos de verla por primera vez. Quiza?s antes. Y eso es algo que tambie?n transmite a los cinco minutos de aparecer en pantalla. Quiza? menos. Pongamos el caso de La vida era eso, o?pera prima de David Marti?n de los Santos, que se estrena el 10 de diciembre y es la peli?cula que nos ha trai?do aqui?. En ella interpreta a la veintean?era compan?era de habitacio?n en un hospital del personaje de Petra Marti?nez, que tiene 77 an?os. Y desde que abre la boca el espectador ya intuye que esas mujeres, por distintas que parezcan, van a terminar siendo amigas.
Porque es imposible no querer ser amigo de Anna Castillo, una actriz que consigue ser el objeto de atencio?n de todas sus peli?culas y, a la vez, convencer con el personaje que esta? interpretando en ese momento. A saber que? te?rmino usara? la psicologi?a para ese grado extremo de empati?a, pero si no hay uno deberi?a haberlo. Y es una maravilla de capacidad.
¡°Yo es que solo se? hacerlo asi?¡±, cuenta ella, con la soltura que da haberlo explicado mil veces, en una terraza del centro de Madrid, la ciudad en la que vive desde hace an?os. ¡°Solo puedo partir desde la verdad, desde mi? misma, desde la naturalidad. A veces sujeta al guion li?nea por li?nea y otras con mucho margen de improvisacio?n, como en Girasoles silvestres, la peli?cula que acabo de rodar con Jaime Rosales, que es a base de crear situaciones muy reales. La verdad es que me siento muy co?moda trabajando asi?. Y ma?s me vale, porque es co?mo me sale¡±.
Esa forma tan concreta de aduen?arse de los personajes se cobra su propia factura. ¡°Lo que yo hago provoca que me llamen para ciertos papeles. Mujeres con fuerza, que mantienen la alegri?a incluso cuando afrontan la tragedia. No me quejo, yo creo que hay mucho margen ahi?, todas son diferentes, pero todas son muy mi?as. Doy algo mi?o a mis papeles siempre¡±.
Es verdad que sus personajes tienen tanto en comu?n como cosas que les separan. Es fa?cil ver las semejanzas entre la decidida adolescente de El olivo, de Iciar Bollai?n, con la que gano? el Goya a Actriz Revelacio?n en 2017, y la tambie?n echada p¡¯alante Susana de La llamada. Aunque ambas tienen un pasado y unas experiencias distintas, no dejan de ser esa vecina encantadora que siempre saluda en el portal. Sobre todo en La llamada, el proyecto que puso a Javier Ambrossi y Javier Calvo en el mapa. ¡°Los Javis tienen una cosa muy especial, que es crear un universo propio: una combinacio?n de Disney con lo trash. Aquello fue muy especial y todos los implicados nos vimos metidos en una vora?gine maravillosa¡±, recuerda.
Anna Castillo fue miembro del elenco original que convirtio? ese musical de bolsillo en un feno?meno teatral y que an?os despue?s rodo? la peli?cula basada en aquella obra que ya habi?an visto casi 500.000 espectadores. ¡°Me he dado cuenta de que a cada cual, dependiendo cua?ndo la vea, desde do?nde la vea y en que punto este?, La llamada le habla de una cosa o de otra. Cuando yo la hice, para mi? estaba clari?simo que era una peli?cula sobre buscar la felicidad. Una peli?cula que habla sobre quererse a uno mismo es muy valiosa aunque a muchos les parezca ligera. A ver, yo se? por propia experiencia que es muy importante para mucha gente: para los actores y el equipo, seguro. Nos marco?. Pero tambie?n para muchos espectadores¡±.
Ha aparecido sola en la entrevista, algo que, con franqueza, cada vez extran?a ma?s en un mundo donde los inte?rpretes esta?n ma?s sobreprotegidos por agentes y jefes de prensa. Aqui?, en esta terraza, ha quedado con el equipo de fotografi?a y se toma con naturalidad cada vez que un mensajero nos interrumpe, porque hemos llegado antes que el resto y nos van dejando alrededor paquetes de ropa o el servicio de comida de la sesio?n ¡°?Puedo coger un sa?ndwich?¡±, pregunta. ¡°Que? pintaza tienen¡±, exclama ilusionada mientras elige. Anna Castillo es ese tipo de persona que le ve el encanto hasta a un sa?ndwich de avituallamiento.
Habla por los codos. No es muy aficionada a las entrevistas, asegura, pero sin embargo le encanta ¡°pasar un rato de charleta¡±. Cuenta que es asi? de abierta siempre y lo ilustra con ane?cdotas. De fuera de los rodajes, como aquella vez que conocio? en una fiesta a Estopa, que le encantan, y paso? la noche de risas con uno de ellos, el que no era: ¡°Toda la noche llama?ndole David y era Jose?. Asi? soy yo¡±. Tambie?n de los plato?s, como cuando Jaime Rosales le dio hace poco un toquecillo en el plato? de Girasoles silvestres. ¡°E?l es muy serio, y yo no. Y en un momento me dijo que quiza?s entre tomas deberi?a estar ma?s tensa¡±. Pero no se arredro?. ¡°Yo le dije que si estoy tensa todo el rato la tensio?n se me pasa. Me paso de rosca y ya estoy en otro nivel¡±.
Esa forma expansiva de ser tambie?n tiene un lado malo, como descubrio? durante el confinamiento. ¡°Ahora cuando lo recuerdo me da bastante ternura. Estaba bien, en mi casa, con mi pareja y mis gatos. Pero soy muy ansiosa y no tener nada que hacer me daba mucha rabia. Me daba la impresio?n de que se me escapaba la vida y no me daba la gana aprender un idioma o ponerme hacer yoga. Me aburri?a como una ostra, me causaba mucha frustracio?n, me daba llanto¡±.
Seguramente tambie?n tenga algo que ver con esta sensacio?n el hecho de llevar desde nin?a trabajando a un ritmo infernal. ¡°Justo antes de la pandemia habi?a decidido parar un par de meses porque se me veni?an muchas cosas y queri?a tomarme un respiro. Y cuando iba a reincorporarme, llega esto. Fue como ¡®parad ya ?no? ?Ya esta? bien!¡±.
Asegura no recordar en que? momento decidio? ser actriz, ¡°pero porque siempre ha estado ahi?. Actuar era desde nin?a mi vi?a de escape ante la vida. Era un juego. Recuerdo, siendo enana, decirle a mi madre que queri?a hacer peli?culas, que yo no queri?a hacer anuncios. Y ella me preguntaba: ¡®?Pero co?mo quie?n?¡¯, ¡®Pues como Julia Roberts¡±, recuerda mientras se parte de risa. ¡°Despue?s me fui haciendo mayor. Mis padres me ayudaron mucho y entre? en esto de una forma natural, como que fue ocurriendo¡±, explica. Castillo no viene de una familia relacionada con la actuacio?n. Su madre es profesora, su padre, comercial. Pero la apoyaron. Le buscaron una agencia de representacio?n y con 12 an?os ya estaba en un programa infantil de TV3, Su?per Tres.
¡°Hicieron un grupo musical que daba como bolos y despue?s me llamaron para integrarme en el programa¡±, explica. M¨¢s tarde, se mudari?a a Madrid, donde entrari?a a trabajar en series como Amar es para siempre. ¡°Fue una escuela, trabaje? con actores bueni?simos y aprendi? muchi?simo. Es tanto volumen de trabajo que tienes que ser capaz de hacer de todo y a veces sientes un poco la presio?n. Y los guiones van a tope. Alli? lo triste es muy triste y si te enfadas, el enfado es a lo bestia. Fueron dos an?os muy intensos¡±.
En el cine, Anna Castillo es tambie?n esa chica a la que llaman para ser una secundaria con peso. ¡°Es para lo que cuentan conmigo la mayor parte de las veces. Que es lo lo?gico, porque hay muchos ma?s papeles de reparto que protagonistas. No tengo problema, muchos son una preciosidad¡±. Es el caso de La vida era eso. Su personaje es el desencadenante de la accio?n, la peli?cula seri?a imposible sin ella en la habitacio?n del hospital, pero apenas esta? 40 minutos en pantalla. A partir de ahi? el peso de la historia lo lleva Petra Marti?nez, una actriz veterana. ¡°Es inagotable, tiene una energi?a desbordante. Ella montaba sus propias obras de teatro y asi? estuvo hasta que llego? el cine y la televisio?n¡±. En alguna entrevista, Castillo ha soltado la siguiente reflexio?n: ¡°Petra me pone un espejo delante y me hace pensar que mi generacio?n somos un con?azo, unos quejicas, siempre agobiados por el trabajo y con una ambicio?n a veces mal colocada¡±. ?Que? queri?a decir? ¡°Pues que la veo a ella, que lleva toda la vida trabajando sin darse importancia y eso me parece maravilloso. Para Petra esto se hace por placer y para sentirnos mejor. Si no, es mejor no seguir. A veces creo que en mi generacio?n nos ponemos muy trascendentes¡±.
Para entender esto no esta? de ma?s tener en cuenta que a Anna Castillo la han sen?alado como actriz a seguir desde hace an?os. ¡°Empezaron a decir eso de que yo era ¡®la actriz del momento¡¯ cuando me nominaron para el Goya con El olivo. Antes incluso de ganarlo. Y a mi? eso me llenaba de dudas. No lo entendi?a. Yo vei?a actrices bueni?simas ?Por que? era mi momento y no el suyo? No se? si diri?a que estaba agobiada, pero desde luego no me senti?a co?moda. Lo que pasa es que me di cuenta de que es de esas cosas que aparecen y desaparecen. Tienes un estreno y durante un mes eres la actriz del momento, y luego dejas de serlo seis meses hasta el siguiente. No pasa nada. En esta profesio?n todo es relativo¡±.
La consecuencia es su filosofi?a para afrontar la vida, basada en la certeza de que ser perfecto todo el tiempo, en todos los aspectos de la vida quiza?s no sea un objetivo razonable. ¡°Yo no soy de las actrices que se castigan. Soy consciente de que las cosas salen bien, mal y regular. Y hay que asumirlo. Y cuando llego a casa dejo el trabajo y descanso. A ver, si el di?a ha sido duro, fi?sica o emocionalmente, llego reventada, como todo el mundo. Y no es que me desentienda del personaje. A mi? me gusta mucho meterme en su vida. Hago un trabajo para intentar entender sus cargas, su pasado, su forma de actuar. Me gusta entender que? lleva encima, que? le ha pasado que no sale en la peli?cula. Pero luego llego a casa y ceno, no me llevo sus traumas conmigo¡±.
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