El Papa urge a la pol¨ªtica a liberarse del yugo del poder econ¨®mico
La primera enc¨ªclica de Francisco critica la sumisi¨®n de los gobiernos ante las empresas
En la p¨¢gina 46 de una enc¨ªclica que urge una y otra vez a los pol¨ªticos a liberarse del yugo de los poderes econ¨®micos y gobernar a favor de la gente y de la tierra, el papa Francisco se hace una pregunta que parece una llamada a la revoluci¨®n: ¡°?Para qu¨¦ se quiere preservar hoy un poder que ser¨¢ recordado por su incapacidad de intervenir cuando era urgente y necesario?¡±. La primera enc¨ªclica escrita ¨ªntegramente por Jorge Mario Bergoglio logr¨® ayer una expectaci¨®n inusitada durante su presentaci¨®n en el Vaticano, en la que intervinieron un cient¨ªfico laico y un representante del patriarca ortodoxo de Constantinopla.
Hasta el jesuita Federico Lombardi, uno de los m¨¢s veteranos del lugar, reconoci¨® que en los 25 a?os que lleva trabajando en el Vaticano jam¨¢s hab¨ªa presenciado una expectaci¨®n ¡°tan intensa, prolongada y global¡± ante la publicaci¨®n de un documento pontificio. Una parte puede deberse al predicamento medi¨¢tico de Francisco. Y otra no menor a las cr¨ªticas preventivas de sus detractores. Desde hace muchos meses, sectores conservadores de dentro y fuera de la Iglesia ¡ªen especial los estadounidenses¡ª ven¨ªan recomend¨¢ndole al Papa que se abstuviera de intervenir en asuntos cient¨ªficos. No se descarta que desde dentro del Vaticano, donde los sectores m¨¢s reaccionarios siguen teniendo sucursal abierta, les fuesen filtrando algunos detalles preocupantes para sus intereses pol¨ªticos, econ¨®micos y financieros. La publicaci¨®n de la enc¨ªclica Laudato si¡¯ (Alabado seas, tomado del C¨¢ntico de las criaturas de San Francisco de As¨ªs) ha confirmado sus temores.
Invito a todos a detenerse a pensar en los desaf¨ªos sobre el medio ambiente. #LaudatoSi
— Papa Francisco (@Pontifex_es) June 18, 2015
Aunque Francisco se esfuerza en demostrar con abundantes citas que sus inmediatos antecesores ¡ªBenedicto XVI y Juan Pablo II¡ª ya dijeron cosas por el estilo, o las dijeron en lat¨ªn o no colocaron bien el acento, porque nunca la repercusi¨®n fue tan grande. Durante las 191 p¨¢ginas de la enc¨ªclica, dividida en seis cap¨ªtulos, Jorge Mario Bergoglio acusa con dureza a la pol¨ªtica de sumisi¨®n ante los poderes econ¨®micos financieros. Hay un p¨¢rrafo en la p¨¢gina 46 que contiene la m¨²sica de toda la enc¨ªclica. En la primera parte, el Papa formula una propuesta, en este caso para evitar el desarrollo de armas qu¨ªmicas o biol¨®gicas: ¡°Se requiere de la pol¨ªtica una mayor atenci¨®n para prevenir y resolver las causas que pueden originar nuevos conflictos¡±. Y, a continuaci¨®n, se muestra cr¨ªtico y pesimista ante la actitud de los gobernantes: ¡°Pero el poder conectado con las finanzas es el que m¨¢s se resiste a ese esfuerzo, y los dise?os pol¨ªticos no suelen tener amplitud de miras¡±. Es entonces cuando se hace la pregunta de para qu¨¦ sirve perpetuar un sistema pol¨ªtico que no interviene cuando es ¡°urgente y necesario¡± hacerlo.
La enc¨ªclica papal, en siete frases
¡°Este siglo podr¨ªa ser testigo de cambios clim¨¢ticos inauditos¡±.
¡°Conviene evitar una concepci¨®n m¨¢gica del mercado¡±.
¡°La tradici¨®n cristiana nunca reconoci¨® como absoluto el derecho a la propiedad privada¡±.
¡°Llama la atenci¨®n la debilidad de la pol¨ªtica internacional¡±.
¡°El gemido de la hermana Tierra se une al gemido de los abandonados del mundo¡±.
¡°Las finanzas ahogan a la econom¨ªa real. No se aprendieron las lecciones de la crisis financiera mundial¡±.
¡°La tecnolog¨ªa basada en combustibles f¨®siles muy contaminantes ¨Csobre todo el carb¨®n, pero a¨²n el petr¨®leo y, en menor medida, el gas¨C necesita ser reemplazada progresivamente y sin demora¡±.
En el ecuador de la enc¨ªclica, Jorge Mario Bergoglio advierte a los gobernantes de que su discurso contradictorio ¡ªuna libertad econ¨®mica que en realidad solo beneficia a los poderosos¡ª ¡°deshonra a la pol¨ªtica¡±. En la p¨¢gina 128, recrimina a pol¨ªticos y empresarios por reaccionar ¡°con lentitud¡± al desaf¨ªo de las energ¨ªas renovables, mientras que en la sociedad civil s¨ª se ha generado un gran debate. Unas cuantas p¨¢ginas m¨¢s adelante, vuelve a denunciar que el poder econ¨®mico-financiero de car¨¢cter transnacional ¡°tiende a predominar sobre la pol¨ªtica¡±. El Papa utiliza aqu¨ª un ejemplo de rabiosa actualidad y un lenguaje que bien podr¨ªan asumir los activistas m¨¢s cr¨ªticos con el actual sistema econ¨®mico.
¡°La pol¨ªtica no debe someterse a la econom¨ªa¡±, clama Francisco, ¡°y esta no debe someterse a los dict¨¢menes y al paradigma eficientista de la tecnocracia. Hoy, pensando en el bien com¨²n, necesitamos imperiosamente que la pol¨ªtica y la econom¨ªa, en di¨¢logo, se coloquen decididamente al servicio de la vida, especialmente de la vida humana. La salvaci¨®n de los bancos a toda costa, haciendo pagar el precio a la poblaci¨®n, sin la firme decisi¨®n de revisar y reformar el entero sistema, reafirma un dominio absoluto de las finanzas que no tiene futuro y que solo podr¨¢ generar nuevas crisis despu¨¦s de una larga, costosa y aparente curaci¨®n¡±. El Papa alude a la crisis financiera que se inici¨® en 2007 como la ocasi¨®n perdida para haber desarrollado una ¡°nueva econom¨ªa m¨¢s atenta a los principios ¨¦ticos¡±.
Principales textos de doctrina social
'Mater et magistra', promulgada por Juan XXIII en 1961, obtuvo, como la enc¨ªclica de Francisco, un gran eco para la ¨¦poca. En ella, el llamado Papa bueno sosten¨ªa que "la econom¨ªa debe estar al servicio del hombre".
En 1963 ¡ªel a?o de su muerte¡ª, public¨® 'Pacem in Terris', una defensa de la paz entonces amenazada por la crisis de Cuba.
De las enc¨ªclicas de Pablo VI se puede destacar la 'Populorum Progressio' (1967), y de Juan Pablo II, la 'Laborem exercens' (1981) y la 'Centesimus annus'.
El Papa eleva a¨²n m¨¢s el tono de su llamada de atenci¨®n: ¡°El drama del inmediatismo (sic) pol¨ªtico, sostenido tambi¨¦n por poblaciones consumistas, provoca la necesidad de producir crecimiento a corto plazo. Respondiendo a intereses electorales, los gobiernos no se exponen f¨¢cilmente a irritar a la poblaci¨®n con medidas que puedan afectar al nivel de consumo o poner en riesgo inversiones extranjeras. La miop¨ªa de la construcci¨®n de poder detiene la integraci¨®n de la agenda ambiental con mirada amplia en la agenda p¨²blica de los Gobiernos¡±. Y se permite un consejo: ¡°La grandeza pol¨ªtica se muestra cuando, en momentos dif¨ªciles, se obra por grandes principios y pensando en el bien com¨²n a largo plazo. Al poder pol¨ªtico le cuesta mucho asumir este deber en un proyecto de naci¨®n¡±.
Reconocer errores
Pero si hay que escoger un p¨¢rrafo que re¨²na todo el enfado y la desesperanza de Francisco, hay que irse casi al final: ¡°La pol¨ªtica y la econom¨ªa tienden a culparse mutuamente por lo que se refiere a la pobreza y a la degradaci¨®n del ambiente. Pero lo que se espera es que reconozcan sus propios errores y encuentren formas de interacci¨®n orientadas al bien com¨²n. Mientras unos se desesperan solo por el r¨¦dito econ¨®mico y otros se obsesionan solo por conservar o acrecentar el poder, lo que tenemos son guerras o acuerdos espurios donde lo que menos interesa a las dos partes es preservar el ambiente y cuidar a los m¨¢s d¨¦biles¡±.
Una enc¨ªclica, la primera escrita de pu?o y letra por Francisco, que a veces es un grito y a veces un llanto: ¡°El gemido de la hermana tierra se une al gemido de los abandonados del mundo¡±.
La lejan¨ªa de los periodistas
Dice Jorge Mario Bergoglio que a los excluidos nadie los tiene en cuenta, que a veces se les considera "un mero da?o colateral". Y a?ade que una buena parte de la culpa la tienen los periodistas: "Ello se debe en parte a que muchos profesionales, formadores de opini¨®n, medios de comunicaci¨®n y centros de poder est¨¢n ubicados lejos de ellos, en ¨¢reas urbanas aisladas, sin tomar contacto directo con sus problemas. Viven y reflexionan desde la comodidad de un desarrollo y de una calidad de vida que no est¨¢n al alcance de la mayor¨ªa de la poblaci¨®n mundial".
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