Pol¨¦mica en Argentina por las cifras de desaparecidos de la dictadura

Un hombre cercano a Macri, el ministro de Cultura de Buenos Aires y director del Teatro Col¨®n, Dar¨ªo Lop¨¦rfido, ha asegurado: ¡°En la Argentina no hubo 30.000 desaparecidos. Ese n¨²mero se arregl¨® en una mesa¡±. Lop¨¦rfido, respetado por su gesti¨®n al frente de uno de los teatros de ¨®pera m¨¢s importantes del mundo, aclar¨® despu¨¦s que se refer¨ªa a las investigaciones de Graciela Fern¨¢ndez Meijide, una conocida pol¨ªtica y dirigente de las organizaciones de derechos humanos, madre de un desaparecido, que apunta que la cifra est¨¢ m¨¢s cercana a los 9.000.

Pero cuestionar la cifra de 30.000 reconocida por todas las organizaciones de derechos humanos se tom¨® r¨¢pidamente como una provocaci¨®n. Entre otras cosas porque fue el propio dictador, Jorge Videla, quien puso en cuesti¨®n esa cifra de 30.000 y habl¨® de 8.000. Nadie cree a Videla en Argentina. Estela de Carlotto, l¨ªder de Abuelas de Mayo, se indign¨®. ¡°Nosotros manejamos esa cifra de 30.000 porque los propios genocidas lo llevaron a 45.000. Todav¨ªa estamos recibiendo denuncias de nietos que nacieron en cautiverio porque hay personas que se est¨¢n animando ahora a contar la verdad. ?Qu¨¦ maldad empezar a manejar cifras! Que nos d¨¦ la lista de los que ¨¦l piensa que son, si la tiene¡±, contest¨®.

Juicios pendientes

El Gobierno trata de aplacar la pol¨¦mica en un tema muy sensible y que puede reavivar todos los prejuicios sobre Macri que est¨¢n instalados en la izquierda argentina y que hace un a?o dificultaban mucho su crecimiento electoral. Macri siempre fue visto como un hombre muy a la derecha. Desde hace dos a?os, el presidente, guiado por su gur¨² ecuatoriano Jaime Dur¨¢n Barba, asesor pol¨ªtico, ha hecho un trabajo muy fuerte para suavizar su imagen. Y logr¨® ganar las elecciones. Su n¨²mero dos, Marcos Pe?a, convoc¨® el mi¨¦rcoles a Estela de Carlotto a una reuni¨®n en la Casa Rosada para buscar un acercamiento. Ella, cercana al kirchnerismo, ha sido muy cr¨ªtica con Macri y el presidente de momento no tiene previsto recibirla, pero el gesto de su mano derecha es una llamada al di¨¢logo.

Sin embargo, la tensi¨®n y desconfianza de este sector hacia el Gobierno se reflej¨® en la reuni¨®n. Macri abandon¨® la Casa Rosada poco antes de llegara Carlotto, con lo que ni siquiera hubo un saludo, algo que ya es simb¨®lico, y en la cita los dirigentes de las organizaciones de derechos humanos plantearon cr¨ªticas al Gobierno no solo en esta cuesti¨®n sino tambi¨¦n por los miles de despedidos de la administraci¨®n o por la detenci¨®n de Milagro Sala, una dirigente social de Jujuy, en el Norte argentino, encarcelada hace dos semanas tras un acampada de m¨¢s de un mes frente a la sede del Gobierno. Estela de Carlotto ech¨® en cara al Gobierno estas situaciones y mostr¨® que el Ejecutivo no lo va a tener f¨¢cil en las relaci¨®n con Abuelas y otras organizaciones a¨²n m¨¢s cercanas al kirchnerismo.

Claudio Avruj, secretario de Derechos Humanos de Macri, que tambi¨¦n estuvo en esa reuni¨®n en la Casa Rosada, trat¨® de suavizar la pol¨¦mica en conversaci¨®n con EL PA?S. ¡°Los n¨²meros no son lo importante. 30.000 es el n¨²mero establecido en la sociedad y simb¨®lico. Es verdad que la CONADEP [Comisi¨®n Nacional sobre la Desaparici¨®n de Personas] habl¨® de 9.000 pero a¨²n hay muchos juicios pendientes. El tema de los desaparecidos debe ser cuidado, el Gobierno no quiere establecer una pol¨¦mica con los n¨²meros¡±, dijo.

Avruj tambi¨¦n responde a la inquietud en el mundo de los derechos humanos con los despidos de empleados p¨²blicos que tienen que ver con este sector, por ejemplo en el portal de noticias Infojus. ¡°Hay despidos porque hubo un sobredimensionamiento del Estado, y eso genera inquietud. Pero todos los programas en temas de memoria van a seguir, no hay ning¨²n tipo de recorte. Es falso que vayamos a cambiar la pol¨ªtica. Ya lo dijo el presidente, la pol¨ªtica en derechos humanos y delitos de lesa humanidad va a seguir, y tambi¨¦n los juicios, aunque esperamos que no se alarguen en el tiempo por el bien de todos, especialmente de los testigos¡±, remat¨® Avruj.