Decenas de muertos en un bombardeo saud¨ª que ha afectado a un hotel en Yemen
La coalici¨®n liderada por Riad tambi¨¦n ha atacado un puesto de control de los rebeldes Huthi
Varias decenas de personas, incluidos civiles, han muerto este mi¨¦rcoles al norte de San¨¢ en un bombardeo de la coalici¨®n que dirige Arabia Saud¨ª, seg¨²n fuentes oficiales y sanitarias yemen¨ªes. Al parecer, alguno de los proyectiles ha alcanzado un modesto hotel cercano a un puesto de control de los rebeldes Huthi, que dominan el noroeste de Yemen, incluida la capital, tras haber expulsado hace dos a?os al presidente Abdrabbo Mansur Hadi, a quien apoyan las fuerzas ¨¢rabes. El incidente eleva la tensi¨®n ante la manifestaci¨®n convocada para ma?ana jueves por el expresidente Ali Abdal¨¢ Saleh, hasta ahora aliado de los Huthi.
El hospedaje afectado, un edificio de dos plantas situado en Arhab, a una veintena de kil¨®metros de San¨¢, ha quedado completamente destruido y dejado atrapados a sus ocupantes. Im¨¢genes difundidas por medios locales muestran varios cuerpos entre los escombros. Adem¨¢s, los aviones tambi¨¦n han atacado un puesto de control situado a escasos kil¨®metros del hotel y desde el que los milicianos Huthi vigilan el acceso a la capital.
¡°Hemos enviado seis ambulancias a Arhab que han sacado 35 cuerpos, y trasladado a 13 heridos a tres hospitales¡±, ha declarado el director de la Media Luna Roja en San¨¢, Husein al Tawil, citado por la agencia France Presse.
Los rebeldes, a quienes Arabia Saud¨ª tacha de estar a las ¨®rdenes de Ir¨¢n, han acusado enseguida a la aviaci¨®n saud¨ª y asegurado que todos los afectados eran civiles. El portavoz de la coalici¨®n no se ha pronunciado. La agencia Saba, bajo control Huthi, ha informado de 71 v¨ªctimas, entre muertos y heridos. La cadena de televisi¨®n Al Masira habla de ¡°41 m¨¢rtires y decenas de heridos¡±, sin precisar si hab¨ªa combatientes entre ellos. En realidad la distinci¨®n es complicada, ya que los milicianos Huthi no llevan uniforme y tampoco es inusual que los civiles yemen¨ªes vayan armados.
¡°Numerosos simpatizantes de los Huthi se hab¨ªan congregado en la zona en respuesta al llamamiento de sus dirigentes para bloquear la entrada a la ciudad a los seguidores de Saleh¡±, explica a EL PA?S un observador yemen¨ª desde San¨¢. El expresidente, cuya alianza con los rebeldes siempre se ha considerado un matrimonio de conveniencia, ha empezado a mostrar signos de impaciencia con el rumbo adoptado por estos. En medio de las crecientes sospechas de que intenta alcanzar un arreglo pol¨ªtico con sus rivales, este superviviente nato intenta hacer una demostraci¨®n de fuerza ma?ana con motivo del 35? aniversario del Congreso General Popular, el partido que ha seguido dirigiendo a pesar de verse obligado a ceder el poder a Hadi tras las protestas de 2011.
Yemen es un pa¨ªs dislocado por la mala gobernanza de d¨¦cadas, la pobreza, la sequ¨ªa y, como guinda, la guerra civil desatada por la intervenci¨®n militar saud¨ª en apoyo del presidente Hadi, respaldado en un refer¨¦ndum e internacionalmente reconocido, pero con escasa popularidad dentro del pa¨ªs.
Desde el inicio del conflicto en marzo de 2015 hasta el pasado 15 de julio, la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) hab¨ªa documentado 8.389 muertos y 47.741 heridos, al menos la mitad de ellos civiles. Otras agencias de la ONU estiman que los muertos superan los 10.000. Pero lo que es tanto o m¨¢s grave, la guerra ha destruido la precaria econom¨ªa de un pa¨ªs que ya era el m¨¢s pobre del mundo ¨¢rabe y dejado a 19 millones de sus casi 26 millones de habitantes dependientes de la ayuda humanitaria, en especial en las provincias bajo control rebelde, donde se concentra el 80% de la poblaci¨®n.
La pasada primavera, la falta de acceso a agua potable, alimentos y medicinas propici¨® el estallido de una epidemia de c¨®lera que ya se ha cobrado cerca de 2.000 vidas y afecta a medio mill¨®n de personas. A pesar de esa situaci¨®n cr¨ªtica, ni la mediaci¨®n de la ONU ni los esfuerzos de la Uni¨®n Europea han logrado un cese de las hostilidades. Adem¨¢s, la presencia en el sur del pa¨ªs de fuerzas de la coalici¨®n ¨¢rabe, en particular del Ej¨¦rcito de Emiratos ?rabes Unidos, ha dado alas a los separatistas para tratar de desligarse del norte, cuya dominaci¨®n han lamentado desde la reunificaci¨®n en 1990.
¡°En 2017, el n¨²mero de ataques a¨¦reos mensuales est¨¢ siendo tres veces mayor que el a?o pasado y los enfrentamientos armados registrados cada mes se han m¨¢s que doblado¡±, denunci¨® el pasado viernes el secretario general adjunto de la ONU para Asuntos Humanitarios, Stephen O¡¯Brien.
Pocos d¨ªas antes, un informe de la Unidad de Protecci¨®n en Yemen, que coordina el ACNUR, hab¨ªa contabilizado 5.676 bombardeos en los seis primeros meses del a?o. Aunque el informe no identifica a los responsables, la coalici¨®n que dirige Arabia Saud¨ª controla el espacio a¨¦reo yemen¨ª desde que lanz¨® su ofensiva en 2015. Acusada de haber alcanzado a civiles en varias ocasiones, sus responsables han reconocido algunos errores como el proyectil contra un funeral en San¨¢ en octubre de 2016 que dej¨® 140 muertos. Estados Unidos ha realizado tambi¨¦n algunos ataques con aviones o drones contra la rama local de Al Qaeda.
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