La tierra del candidato de Lula conf¨ªa en su sucesor
La zona m¨¢s pobre de Brasil se inclina por Fernando Haddad, el designado por el expresidente encarcelado
Con un saco de cinco kilos de arroz en las manos, Damiana da Concei??o, de 33 a?os, muestra c¨®mo hac¨ªa para conseguir el ¨²nico alimento que llegaba a la mesa cuando era m¨¢s joven. "Caminaba con mi madre hasta [la ciudad de] Inaj¨¢. Me pon¨ªa el saco en la cabeza y volv¨ªa". Vecina de la zona rural de Manari, en Pernambuco, esta ama de casa relata que le tomaba un d¨ªa entero ir y volver del municipio vecino, a m¨¢s de 30 kil¨®metros de distancia. Hoy, los cinco kilos de arroz que Damiana recib¨ªa se han transformado en la tarjeta del programa Bolsa Familia, que utiliza para sacar 427 reales (unos 109 d¨®lares) al mes, la ¨²nica renta de la casa, donde vive con sus cuatro hijos.
Damiana cuenta la historia del saco de arroz para explicar por qu¨¦ todav¨ªa vota "a Lula". "Despu¨¦s de que apareciera Lula [da Silva], todo mejor¨®. Ahora incluso puedo ir al mercado", dice. Pero la "mejora" que relata dista mucho de unas buenas condiciones de vida. La casa donde vive hoy ya no es de barro, sino de cemento, pero todav¨ªa utiliza el fog¨®n de le?a que ten¨ªa en su antigua vivienda: sobrevive en el patio porque no tiene dinero para comprar una bombona de butano. La cisterna, construida durante los a?os de Lula, est¨¢ vac¨ªa desde hace m¨¢s de dos a?os porque el cami¨®n ya no pasa a rellenarla. En el ambiente seco donde vive Damiana, el agua que se utiliza es la del pozo. Cuando hay.
Manari est¨¢ situada en el sertao de Pernambuco, la zona m¨¢s ¨¢rida de Brasil. Con 20.000 habitantes, esta peque?a ciudad est¨¢ entre las m¨¢s subdesarrolladas, con un nivel de desarrollo equiparable al de Hait¨ª, el pa¨ªs m¨¢s pobre de Am¨¦rica. M¨¢s de la mitad de las familias reciben el subsidio del Bolsa Familia, un n¨²mero que puede explicar por qu¨¦ casi ocho de cada diez?votantes votaron por Dilma Rousseff?¡ªdel Partido de los Trabajadores (PT, centroizquierda)¡ª hace cuatro a?os. "Si no fuera por el Bolsa Familia, la gente de aqu¨ª ya se habr¨ªa muerto de hambre", dice Maria Elenice da Silva, de 30 a?os, desempleada y con cuatro hijos.
La regi¨®n Nordeste de Brasil concentra m¨¢s del 55% de la pobreza extrema del pa¨ªs y los Estados de Bah¨ªa y Pernambuco suman la mayor¨ªa de ciudadanos en esa situaci¨®n, casi de subsistencia. Aunque las cifras no son ni mucho menos halag¨¹e?as, durante los a?os del Gobierno del PT, toda la regi¨®n y, m¨¢s espec¨ªficamente, Pernambuco,?experimentaron un fuerte crecimiento: entre 2008 y 2012, su econom¨ªa creci¨® un 4%, frente al 2,6% de la media nacional.
Gobernando con buenas condiciones pol¨ªticas y econ¨®micas e invirtiendo en proyectos de distribuci¨®n de renta, Lula permaneci¨® en la memoria de gran parte de los electores como "el padre de los pobres", como resume do?a Maria Edilene da Silva. No sabe exactamente la edad que tiene ¡ª"creo que tengo 28"¡ª, pero sabe responder sin pesta?ear a qui¨¦n votar¨¢. "Es Lula, ?no?", dice, para corregir que ha olvidado el nombre del candidato designado por el exmandatario encarcelado desde abril, Fernando Haddad. Ella, su marido y sus dos hijos viven en una peque?a casa de una habitaci¨®n. "Construimos esta casa con el dinero que recibimos de Lula", explica.
En Pernambuco, Haddad tiene el 33% de intenci¨®n de voto, seg¨²n el ¨²ltimo sondeo del Instituto Datafolha. De entre los Estados en los que se levant¨® la encuesta es el ¨²nico en el que el PT lidera la disputa. En el Nordeste, tambi¨¦n la ¨²nica regi¨®n donde Haddad va en cabeza, el 38% optar¨¢n por el candidato progresista. La fidelidad al PT en la regi¨®n que concentra m¨¢s de la mitad de la pobreza extrema del pa¨ªs no es meramente pasional: en Manari, solo el 3,8% de la poblaci¨®n estaba empleada en 2016, seg¨²n los datos m¨¢s recientes del IBGE. En el paro y viviendo en una regi¨®n semi¨¢rida, en la que no todo lo que se planta crece, a los habitantes del lugar les quedan pocas alternativas de supervivencia que no pasen por la ayuda de los programas sociales.
Do?a Maria Luzia Adalto explica, mientras corta le?a para cocinar los frijoles para el almuerzo, que ella y sus cinco hijos sobreviven con los 535 reales (137 d¨®lares) mensuales del Bolsa Familia. El miedo de perder la ayuda es la mayor motivaci¨®n para votar al candidato de Lula. "Si no gana el candidato de Lula, eliminar¨¢n el Bolsa Familia", a?ade, repitiendo lo que pregonaron insistentemente los asesores de la campa?a del PT en 2014. El segundo motivo es el desconocimiento: "No s¨¦ qui¨¦nes son los otros candidatos", confiesa. No conoce ni siquiera al propio Haddad. "No s¨¦ su nombre. Solo s¨¦ que es de Lula". A su lado, do?a Pequena da Silva a?ade: "Voy a saber qui¨¦n es [Haddad] cuando vea la urna". Escu¨¢lida, esta madre de dos hijos sobrevive con 250 reales (65 d¨®lares) al mes. El miedo de perder el subsidio y el desconocimiento del candidato del PT son sentimientos que comparte Damiana, que vive en la casa al lado. "Es aquel que tiene el pelo bonito, ?no?", pregunta. "Pero aqu¨ª todos votan a Lula. Si ese hombre pierde las elecciones, ?te imaginas c¨®mo ser¨¢ mi vida?".
A pesar de la gran dependencia que hay del Bolsa Familia, en el sertao de Pernambuco quienes apoyen al "candidato de Lula"?no solo ser¨¢n los beneficiarios del programa social. En S?o Domigos, en el distrito de Parnamirim, a 400 kil¨®metros de Manari, la funcionaria Francisca Edna enumera las razones para creer que all¨ª "solo se vota a Lula". "Antes las casas eran de barro, la gente no ten¨ªa televisi¨®n. Ahora tienen hasta antena parab¨®lica", dice. En el mercado, el comerciante Jeov¨¢ Pereira da Silva dice que los empleos generados en la era Lula son el principal motivo para escoger a su candidato. "Trajo muchos empleos a la regi¨®n", dice. "Si no fuera por ¨¦l, hoy no habr¨ªa nadie aqu¨ª. Estar¨ªa todo el mundo por ah¨ª, por el mundo, buscando trabajo". Para ¨¦l, la v¨ªa f¨¦rrea Transnordestina y el trasvase del r¨ªo S?o Francisco "no se hubieran convertido en realidad" si no fuera por el expresidente. "Por eso, aqu¨ª no hay dos partidos. Es el PT y ya est¨¢".
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