El Brexit a¨²n puede fracasar: las claves de la carrera de obst¨¢culos que afronta el plan de May
El decisivo debate en el Parlamento de Reino Unido, previsto para el 11 de diciembre, paso a paso
La hora de la verdad para Theresa May llegar¨¢ el 11 de diciembre, cuando la C¨¢mara de los Comunes vote el tratado de retirada de la UE y la declaraci¨®n pol¨ªtica conjunta que la primera ministra se trajo de Bruselas despu¨¦s de largos meses de ag¨®nicas negociaciones. En los pr¨®ximos d¨ªas, la batalla tendr¨¢ varios frentes y en ninguno pintan bien las cosas para la mandataria brit¨¢nica.
1. Acusaciones de desacato
El pleno de la C¨¢mara de los Comunes discutir¨¢ ese martes una petici¨®n del Partido Laborista, los nacionalistas escoceses del SNP, los unionistas norirlandeses del DUP y los Liberales Dem¨®cratas, que han reclamado la apertura de un procedimiento parlamentario de desacato contra el Gobierno. El motivo: la negativa de Theresa May de entregar el informe legal completo del fiscal general, Geoffrey Cox, que baraj¨® el Ejecutivo para negociar el documento de salida con la UE. De salir adelante la iniciativa, algunos ministros se enfrentan a una suspensi¨®n y hasta expulsi¨®n como diputados. El procedimiento no detendr¨¢ el debate del Brexit, que comienza este martes y culminar¨¢ con la votaci¨®n el pr¨®ximo 11 de diciembre.
2. Un debate de 40 horas en Westminster
Este martes comenzar¨¢ en la C¨¢mara de los Comunes el debate sobre el acuerdo de retirada y la declaraci¨®n pol¨ªtica acordada con la UE. 40 horas de puro parlamentarismo en los que hasta el ¨²ltimo diputado tendr¨¢ la oportunidad de plasmar para la posteridad su posici¨®n sobre la decisi¨®n m¨¢s trascendente que ha adoptado Reino Unido en d¨¦cadas. El Gobierno tiene intenci¨®n de que el texto sea aprobado o rechazado en un solo bloque, pero nada impedir¨¢ a los diputados introducir enmiendas al texto. El Ejecutivo de May no est¨¢ obligado a incorporar esas enmiendas, que seguir¨ªan su propio curso, en la primera votaci¨®n, pero est¨¢ claro que si prosperaran textos alternativos que alteraran en gran medida la propia naturaleza del acuerdo acabar¨ªa cre¨¢ndose un laberinto legal de dif¨ªcil salida.
El inicio de la votaci¨®n coincide con la decisi¨®n del abogado general del Tribunal de Justicia de la UE, que concluye que Reino Unido puede dar marcha atr¨¢s de forma unilateral a su decisi¨®n de retirarse de la UE. Su opini¨®n no es vinculante, pero la Corte suele respetarla en el 80% de los casos. Se espera la decisi¨®n final antes de Navidad.
3. El cara a cara en televisi¨®n
Theresa May juega la carta de la ideolog¨ªa en la recta final, e impulsa un debate cara a cara con el l¨ªder de la oposici¨®n laborista, Jeremy Corbyn. Se celebrar¨ªa en la BBC el 9 de diciembre, dos d¨ªas antes de la votaci¨®n final. Todav¨ªa est¨¢ en el aire, porque el l¨ªder laborista exige un cara a cara sin periodistas ni comentaristas pol¨ªticos como pretende imponer la cadena de televisi¨®n p¨²blica.
Pero lo m¨¢s relevante no son los detalles de coreograf¨ªa. Ya han surgido muchos cr¨ªticos que acusan a May de jugar con las cartas marcadas. La primera ministra va a defender un Brexit que nunca defendi¨® en la campa?a del refer¨¦ndum de 2016. El laborista va a atacar un Brexit que en el fondo nunca le ha acabado de disgustar. Quedan fuera del debate aquellos euroesc¨¦pticos que reclaman el abandono sin condiciones de la UE, los proeuropeos que reclaman un segundo refer¨¦ndum o los nacionalistas escoceses, que se han visto arrastrados a una decisi¨®n de la que no se sienten part¨ªcipes ni beneficiarios.
4. La votaci¨®n clave: el 11 de diciembre
El d¨ªa de la verdad para Theresa May. Necesita el apoyo de unos 320 diputados (hay 650 esca?os, pero el speaker y sus vices tradicionalmente no votan y los diputados del norirland¨¦s Sinn F¨¦in no participan en las actividades parlamentarias) para sacar adelante su Brexit. Los c¨¢lculos actuales, tan fiables un d¨ªa como aventurados al siguiente, apuntan a que apenas cuenta con 240 (se calcula que hay 90 diputados conservadores en contra), y eso incluyendo a algunos laboristas proeuropeos y anti-Corbyn que estar¨ªan dispuestos a romper filas con su partido.
Si, por un milagro, Theresa May sacara adelante el acuerdo (tendr¨ªa que ser ratificado en la cumbre de la UE del 13 y 14 de diciembre), lo que se habr¨ªa aprobado ser¨ªa la Withdrawal Act (moci¨®n de retirada de la UE), es decir, el tratado con la UE. Quedar¨ªa por delante la Withdrawal Bill?(Ley de Retirada de la UE), que supondr¨ªa nuevas semanas de debates y enmiendas, pero dar¨ªa algo m¨¢s de tranquilidad al Gobierno de May. Por poner un ejemplo parlamentario cercano al espa?ol, es como si el Gobierno saca adelante la votaci¨®n en bloque que supone la enmienda a la totalidad de los Presupuestos Generales: respira tranquilo, aunque le queden duras semanas por delante y alg¨²n susto.
5. ?Qu¨¦ pasa si gana el 'no'? Cuatro d¨ªas de p¨¢nico...
Si fuera rechazado en la primera intentona, el 11 de diciembre, el reglamento le permite al Gobierno someter de nuevo el acuerdo a votaci¨®n en un plazo de cuatro d¨ªas. Se ha especulado con la posibilidad de que esta sea la opci¨®n preferida por el equipo de May. Juegan con la idea de que el rechazo a su plan sumir¨ªa al pa¨ªs en la incertidumbre y, tras 96 horas de supuesto p¨¢nico en los mercados, la libra en ca¨ªda libre, la presi¨®n de los votantes o del mundo empresarial, muchos diputados conservadores se pensar¨ªan dos veces su osad¨ªa previa y votar¨ªan a favor de May. En cualquier caso, es una situaci¨®n extrema que el Gobierno no contempla oficialmente y que tensar¨ªa las cuerdas del Parlamento.
6. Otra alternativa: la moci¨®n de censura
Si el acuerdo del Brexit es rechazado estrepitosamente en el Parlamento, el Partido Laborista ya ha anunciado su intenci¨®n de presentar una moci¨®n de confianza, equivalente a la moci¨®n de censura espa?ola, pero sin necesidad de candidato alternativo ni esp¨ªritu constructivo. L¨®gicamente, una derrota en esta moci¨®n mandar¨ªa a Theresa May a la calle. Pero no es lo mismo para los diputados conservadores euroesc¨¦pticos votar en contra de un Brexit que no les convence que votar para derribar a su propio Gobierno. No est¨¢ claro que algo as¨ª pudiera prosperar.
7. ?Otra posibilidad? Elecciones anticipadas
Es una opci¨®n que nunca ha abandonado el tablero pol¨ªtico. Si May sufriera una humillaci¨®n colosal el 11 de diciembre, ser¨ªa complicado permanecer al frente de Downing Street. Sin embargo, la primera ministra ha demostrado hasta ahora un pragmatismo y una frialdad de c¨¢lculo al poner en marcha los procedimientos legislativos o pol¨ªticos que lleva a pensar que, si le queda una posibilidad por remota que sea de resistir, resistir¨¢.
8. Una ¨²ltima opci¨®n: un nuevo acuerdo el 21 de enero
Si nada de lo anterior prospera, la ley permite a May, ante una derrota parlamentaria, un plazo fijo para acudir de nuevo ante la C¨¢mara de los Comunes y proponer una alternativa. En este caso, tendr¨ªa tiempo hasta el 21 de enero de 2019. Nadie ha expresado en voz alta en qu¨¦ podr¨ªa consistir este plan b, pero se abren diversas opciones. Negociar posibles cambios del acuerdo con la UE parece dif¨ªcil, pero quiz¨¢ una extensi¨®n de los plazos del Art¨ªculo 50, el texto activado por Reino Unido para iniciar la salida de la Uni¨®n Europea, podr¨ªa ponerse sobre la mesa. Hoy la fecha fijada para abandonar las instituciones comunitarias es el 29 de marzo de 2019.
9. ?Y un segundo refer¨¦ndum?
Nadie hubiera pensado que esta posibilidad tuviera vuelo hasta hace unas semanas, cuando se ha comenzado a comprobar la desesperada situaci¨®n en que se encuentra el Gobierno de May. De momento, la primera ministra la esgrime m¨¢s como una amenaza hacia los euroesc¨¦pticos que como una opci¨®n a tener en cuenta. Reglamentariamente es posible, si prosperara alguna moci¨®n de los defensores de una segunda consulta posterior a la previsible derrota del acuerdo con la UE el 11 de diciembre. Los t¨¦cnicos del Gobierno calculan al menos un periodo legal necesario de 22 semanas antes de que se pudiera celebrar ese segundo refer¨¦ndum, que requiere una ley espec¨ªfica para ser convocado.
10. Tragedia o final feliz
Si unos y otros tiraran la toalla y se resignaran sin m¨¢s al resultado del 11 de diciembre, la opci¨®n es binaria. O, si el acuerdo es derrotado y no se pone en marcha ninguna alternativa, Reino Unido se encaminar¨¢ hacia un Brexit a las bravas, sin acuerdo ni periodo de transici¨®n, el pr¨®ximo 29 de marzo. El Gobierno y la UE llevan meses preparando dispositivos extraordinarios para hacer frente a esta eventualidad, pero todos admiten que la incertidumbre y el posible caos que generar¨ªa este escenario podr¨ªa hundir la econom¨ªa brit¨¢nica. Esa es finalmente la bala de plata de May, consciente de que, al borde del precipicio, muy pocos se deciden a dar el salto.
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