Turqu¨ªa liberar¨¢ a 90.000 reos debido al coronavirus, pero no a los presos por motivos pol¨ªticos

El Parlamento de Turqu¨ªa aprob¨® durante la noche del lunes una suerte de amnist¨ªa destinada a liberar a unos 90.000 reclusos y descongestionar as¨ª el sistema penitenciario turco por temor a que la Covid-19 se extienda por sus c¨¢rceles. El problema, se quejan la oposici¨®n y las organizaciones de derechos humanos, es que se deja fuera de estos beneficios a decenas de miles de personas condenadas por motivos pol¨ªticos, incluidos decenas de periodistas actualmente entre rejas.

Esta amnist¨ªa es en realidad una reforma de varias leyes que afectan al enjuiciamiento penal y al sistema penitenciario y que llevaban tiempo ¡°en preparaci¨®n¡±, pero cuyos trabajos se ¡°han acelerado¡± debido a la extensi¨®n de la epidemia por coronavirus, explica Cahit ?zkan, vicepresidente del grupo parlamentario del partido oficialista AKP (islamista, en el Gobierno). En Turqu¨ªa se han detectado ya m¨¢s de 60.000 infectados por la Covid-19 y se han registrado unas 1.300 muertes, tres de ellas de presos, seg¨²n datos del Ministerio de Justicia. Adem¨¢s, 17 reclusos y 79 empleados del sistema penitenciario han dado positivo.

Un reciente informe del Consejo de Europa revela que las c¨¢rceles turcas est¨¢n entre las m¨¢s saturadas del continente. La poblaci¨®n carcelaria de Turqu¨ªa es de 286.000 personas ¨Cse ha doblado en los ¨²ltimos siete a?os debido a las purgas y a la persecuci¨®n de la oposici¨®n¨C, pero las plazas oficiales de sus 385 prisiones son solo 235.000. Esto provoca, denuncia Human Rights Watch (HRW), que muchos internos tengan que dormir en colchones sobre el suelo, que falte material de higiene y que, obviamente, no se pueda guardar la distancia requerida para evitar el contagio. Tampoco se han repartido mascarillas entre los internos y no todos los celadores las llevan puestas.

Las nuevas disposiciones penales permitir¨¢n cumplir la pena en arresto domiciliario a aquellos que se hallen en c¨¢rceles de r¨¦gimen abierto y a una serie de categor¨ªas de presos en las instituciones ordinarias, por ejemplo los mayores de 65 a?os, las mujeres con ni?os peque?os, los reclusos que hayan cumplido la mayor parte de su condena y los enfermos graves (actualmente hay unos 1.500, seg¨²n la asociaci¨®n de derechos humanos IHD). Todas estas liberaciones ser¨¢n supervisadas por un juez. Eso s¨ª, quedar¨¢n excluidos de estos beneficios los acusados por delitos sexuales, maltrato a mujeres, asesinato, narcotr¨¢fico y terrorismo.

El problema, arguye Emma Sinclair-Webb, de HRW, es que ¡°Turqu¨ªa abusa de las leyes antiterroristas. Cualquiera que critique al Gobierno puede ser condenado por estas leyes¡±. Entre ellos hay al menos un centenar de periodistas; cientos de alcaldes, concejales, cargos locales y exdiputados del partido prokurdo HDP ¨Cincluidos sus antiguos l¨ªderes, Selahattin Demirtas y Figen Yuksekdag¨C, y miles de profesores, jueces, polic¨ªas y funcionarios de diversa categor¨ªa de afiliaci¨®n izquierdista o vinculados a la cofrad¨ªa del predicador islamista Fethullah G¨¹len, acusada de estar detr¨¢s del intento de golpe de Estado de 2016. ¡°Turqu¨ªa es probablemente el pa¨ªs del mundo con m¨¢s condenados por terrorismo. Y algunas de estas personas sufren enfermedades graves y no tienen acceso a tratamiento en las c¨¢rceles¡±, se queja Sinclair-Webb. ¡°Para ellos, la Covid-19 puede ser una condena a muerte¡±, contin¨²a. Otra de las cr¨ªticas es que la ley deja fuera a las 43.000 personas que permanecen en prisi¨®n preventiva en espera de sentencia firme.

Por ello, la oposici¨®n hab¨ªa pedido incluir en la amnist¨ªa a aquellos condenados solo por delitos de palabra, relata el diputado socialdem¨®crata Zeynel Emre. En otros casos ¨Ccomo el de excluir de los beneficios penitenciarios a los condenados por violencia machista (en un momento en el que el confinamiento ha disparado los casos de maltrato un 38% seg¨²n cifras de la Polic¨ªa)¨C los grupos pol¨ªticos progubernamentales aceptaron las enmiendas de la oposici¨®n, pero en la cuesti¨®n del terrorismo han sido inflexibles, por lo que el texto ha salido adelante solo con los votos del islamista AKP y sus aliados de la extrema derecha. ¡°El terrorismo es una l¨ªnea roja para nosotros. Turqu¨ªa ha sufrido mucho por el terrorismo¡±, dice por tel¨¦fono el diputado oficialista Cahit ?zkan: ¡°No podemos aceptar que, por no utilizar armas, se los excluya de esta definici¨®n. Hay veces que la parte no armada de una organizaci¨®n terrorista es m¨¢s peligrosa incluso que la que utiliza las pistolas¡±.