Muere el expresidente de Nicaragua Enrique Bola?os Geyer, abanderado anticorrupci¨®n
El exmandatario derrot¨® con una amplia mayor¨ªa a Daniel Ortega en 2001, pero su gobierno se vio acosado por la oposici¨®n pol¨ªtica del l¨ªder del Frente Sandinista
El expresidente de Nicaragua, Enrique Bola?os Geyer, ha fallecido la noche del lunes a los 93 a?os en su casa a las afueras de Managua, ha informado su familia a trav¨¦s de redes sociales. Pol¨ªtico conservador, lleg¨® a la presidencia de Nicaragua tras vencer con una amplia mayor¨ªa a Daniel Ortega en las elecciones de 2001, pero su mandato se vio afectado por las zancadillas pol¨ªticas del l¨ªder del Frente Sandinist...
El expresidente de Nicaragua, Enrique Bola?os Geyer, ha fallecido la noche del lunes a los 93 a?os en su casa a las afueras de Managua, ha informado su familia a trav¨¦s de redes sociales. Pol¨ªtico conservador, lleg¨® a la presidencia de Nicaragua tras vencer con una amplia mayor¨ªa a Daniel Ortega en las elecciones de 2001, pero su mandato se vio afectado por las zancadillas pol¨ªticas del l¨ªder del Frente Sandinista, que a trav¨¦s del control de sindicatos y organizaciones sociales organizaba revueltas para desestabilizar al Ejecutivo. Su mayor legado fue su lucha contra la corrupci¨®n, una cruzada personal que gener¨® una tormenta pol¨ªtica en Nicaragua cuando anunci¨® las investigaciones contra el expresidente Arnoldo Alem¨¢n, que ser¨ªa acusado y condenado por desfalcar las arcas del Estado. Esa batalla legal, aunque le gener¨® un gran reconocimiento internacional, tambi¨¦n lo desgast¨® pol¨ªticamente.
Bola?os Geyer era un f¨¦rreo antisandinista, pero durante su mandato tuvo que negociar con Ortega. En la d¨¦cada del ochenta, durante el gobierno revolucionario, fue presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (COSEP), la patronal de Nicaragua, y cre¨ªa firmemente en incentivar la inversi¨®n como principal forma de sacar al pa¨ªs de la pobreza. Su eslogan de campa?a era ¡°remangu¨¦monos las mangas¡±, es decir, un llamado a los nicarag¨¹enses a ponerse a trabajar. Hered¨® de su predecesor, Arnoldo Alem¨¢n, un pa¨ªs devastado por el hurac¨¢n Mitch en 1998, que dej¨® m¨¢s de 3.000 muertos, 700.000 damnificados y p¨¦rdidas millonarias en infraestructura.
Alem¨¢n era un pol¨ªtico querido en las regiones rurales del pa¨ªs, donde llev¨® ayuda gracias a los fondos que Nicaragua recibi¨® para la reconstrucci¨®n tras el paso del hurac¨¢n, pero ese cari?o se trunc¨® en desprecio cuando Bola?os Geyer destap¨® los casos de corrupci¨®n del pol¨ªtico, que desvi¨® a arcas personales m¨¢s de 100 millones de d¨®lares, lo que le vali¨® ser se?alado como uno de los mandatarios m¨¢s corruptos del mundo y que su nombre apareciera en la lista de los m¨¢s buscados por el FBI. Gracias a los esfuerzos de Bola?os y su lucha contra la corrupci¨®n, Alem¨¢n fue condenado a 20 a?os de c¨¢rcel, en 2003, por el robo masivo de dinero p¨²blico.
Alem¨¢n hab¨ªa negociado con Daniel Ortega un acuerdo pol¨ªtico, llamado El pacto, a trav¨¦s del cual se repart¨ªan las instituciones nicarag¨¹enses: nada se mov¨ªa en Nicaragua sin el visto bueno de ambos caudillos. El pol¨ªtico fue cediendo importantes espacios a Ortega a cambio de ser sobrese¨ªdo: ya hab¨ªa negociado una reforma que cambiaba el porcentaje necesario para acceder a la Presidencia, de un 45% a un 35% siempre y cuando haya una diferencia de cinco puntos entre el candidato del primero y segundo lugar; Alem¨¢n entreg¨® el control de la directiva de la Asamblea Nacional a Ortega una vez que este asumi¨® el poder en 2007; Alem¨¢n dej¨® que los diputados de su partido, el PLC, supuestos opositores, apoyaran las iniciativas del Frente Sandinista de Liberaci¨®n Nacional en el Parlamento, convirti¨¦ndose en danzarines del baile del pacto; y dej¨® que sus magistrados en la Corte Suprema hicieran la vista gorda cuando se permiti¨® la reelecci¨®n de Ortega, hasta entonces prohibida. El expresidente, adem¨¢s, fue una pieza importante en la divisi¨®n de la oposici¨®n, lo que benefici¨® en las elecciones al Frente Sandinista.
Esa lucha de poder desgast¨® el Gobierno de Bola?os Geyer, que tuvo que maniobrar no solo con dos poderosos bloques pol¨ªticos opositores (liberales de Alem¨¢n y sandinistas de Ortega), sino que debi¨® enfrentar la desestabilizaci¨®n que causaban las continuas asonadas de sindicatos y estudiantes, capaces de paralizar Managua y otras ciudades del pa¨ªs. ¡°El sandinismo es lo ¨²nico que sabe. El capricho, el garrote, la sangre, el asalto, las turbas, el incendio, la asonada. ?Qu¨¦ triste! Deber¨ªan civilizarse alg¨²n d¨ªa¡±, dec¨ªa Bola?os Geyer.
A pesar de las continuas crisis, Bola?os Geyer logr¨® estabilizar la econom¨ªa de Nicaragua y firm¨® el Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos y Centroam¨¦rica, llamado Cafta. Negoci¨® tambi¨¦n con la comunidad internacional el perd¨®n del 80% de la deuda que aflig¨ªa a Nicaragua y, adem¨¢s, gener¨® incentivos a la inversi¨®n que permitieron un crecimiento econ¨®mico sostenible, en niveles que Nicaragua no conoc¨ªa en d¨¦cadas. Al centrarse en la macroeconom¨ªa, su gesti¨®n se olvid¨® de los m¨¢s pobres, bolsa de poblaci¨®n de la que Ortega siempre se vali¨®. Tambi¨¦n era un pol¨ªtico muy conservador: durante su Administraci¨®n, en 2006, se aprob¨® la penalizaci¨®n total del aborto, con los votos del Frente Sandinista, en un gui?o de Ortega a las clases conservadoras en su af¨¢n de retomar el poder en Nicaragua, lo que logr¨® en 2007.
Tras su retiro de la pol¨ªtica, Bola?os Geyer se dedic¨® a crear una enorme biblioteca virtual que lleva su nombre, lo que para ¨¦l, amante de la tecnolog¨ªa, ser¨ªa su principal legado para los nicarag¨¹enses.
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