Dos d¨¦cadas de cambios: as¨ª evolucion¨® Afganist¨¢n tras el derrocamiento de los talibanes
Los datos muestran avances en cobertura sanitaria, infraestructuras y educaci¨®n, aunque con matices, seg¨²n ONG que trabajan sobre el terreno
Los talibanes fueron expulsados del poder tras la invasi¨®n estadounidense a finales de 2001. Afganist¨¢n se encontraba completamente devastado tras m¨¢s de 20 a?os de guerra y cinco de un Emirato Isl¨¢mico fundamentalista y represivo, especialmente con las mujeres y ni?as. Ahora, dos d¨¦cadas despu¨¦s, el pa¨ªs presenta graves carencias que lo sit¨²an a¨²n como uno de los pa¨ªses menos desarrollados del planeta, seg¨²n organizaciones que trabajan sobre el terreno. Pese a ello, los avances han sido significativos en algunos aspectos....
Los talibanes fueron expulsados del poder tras la invasi¨®n estadounidense a finales de 2001. Afganist¨¢n se encontraba completamente devastado tras m¨¢s de 20 a?os de guerra y cinco de un Emirato Isl¨¢mico fundamentalista y represivo, especialmente con las mujeres y ni?as. Ahora, dos d¨¦cadas despu¨¦s, el pa¨ªs presenta graves carencias que lo sit¨²an a¨²n como uno de los pa¨ªses menos desarrollados del planeta, seg¨²n organizaciones que trabajan sobre el terreno. Pese a ello, los avances han sido significativos en algunos aspectos.
Su poblaci¨®n casi se ha doblado, la apertura al exterior en 2001 permiti¨® que llegara una lluvia de inversiones y el producto interior bruto (PIB) global y per c¨¢pita experiment¨® un fuerte incremento si se compara con el punto de partida, seg¨²n los datos del Banco Mundial. Los cambios han sido especialmente notables en sanidad, con la creaci¨®n de un sistema que ampli¨® la cobertura m¨¦dica; en educaci¨®n, con la escolarizaci¨®n de millones de ni?as y ni?os; y en el desarrollo de infraestructuras y servicios, como la ampliaci¨®n de las redes viarias o las mejoras en el acceso de la poblaci¨®n a la energ¨ªa el¨¦ctrica.
Salud
El sistema sanitario afgano inici¨® su reconstrucci¨®n en 2001, con la creaci¨®n del Paquete B¨¢sico de Salud, basado en la cooperaci¨®n p¨²blico-privada. El Ministerio de Sanidad afgano contrataba y delegaba funciones sanitarias en empresas y ONG que se compromet¨ªan a desarrollar la asistencia en todo el pa¨ªs. Este m¨¦todo ha demostrado ser eficaz, seg¨²n un informe de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) de 2015. Algunas cifras apuntan en esa direcci¨®n.
La mejora es especialmente palpable en lo que se refiere a mortalidad infantil. En 2001, 87 ni?os mor¨ªan antes de cumplir un a?o por cada 1.000 nacidos, y 124 antes de los cinco. El ¨²ltimo reporte, de 2018, reduce esas cifras a 46 y 60, respectivamente. La mortalidad maternal, las mujeres que mueren por complicaciones en el parto o posparto, pas¨® de 1.450 mujeres por cada 100.000 en 2000, a 638 en el ¨²ltimo informe de la OMS. Si bien sigue siendo una cifra alt¨ªsima en comparaci¨®n con las de los pa¨ªses desarrollados (en Espa?a, en 2018, la tasa era de 1,8), la reducci¨®n fue del 66%.
La ONG M¨¦dicos Sin Fronteras (MSF) lleva en Afganist¨¢n desde 1980 y, aunque se?ala que las estad¨ªsticas en un contexto de guerra como el de Afganist¨¢n corren el riesgo de no ser completamente rigurosas, admite algunas de las mejoras. Jos¨¦ Mas es el Responsable de la unidad de emergencias de la organizaci¨®n. ¡°Se han conseguido muchos avances, pero a¨²n falta para que Afganist¨¢n tenga par¨¢metros aceptables¡±, explica Mas.
Otro indicador que sirve como referencia para explicar la evoluci¨®n en cobertura sanitaria, es la inmunizaci¨®n contra enfermedades como la polio, que ha subido 51 puntos porcentuales desde 2001 a 2020 (del 24% al 75% de los menores de un a?o inmunizados). Sin embargo, el desaf¨ªo es el 25% restante que sigue sin vacunar. ¡°Esto implica que la inmunizaci¨®n no llega a toda la poblaci¨®n, es otro de los s¨ªntomas de que el sistema de salud es insuficiente¡±, opina Mas.
El descenso de la cifra de personas sin acceso a medios de higiene b¨¢sicos (letrinas, alcantarillado, agua potable y jab¨®n) va al comp¨¢s de la reducci¨®n de enfermedades relacionadas con la mala calidad del agua. Las diarreas (una infecci¨®n que puede resultar mortal en edades tempranas y situaciones de precariedad alimentaria) se redujeron un 43,1% entre 2009 y 2019, seg¨²n el Instituto de M¨¦tricas y Evaluaci¨®n de la Salud (IMHE por sus siglas en ingl¨¦s). En ese mismo periodo, la incidencia del sarampi¨®n retrocedi¨® un 82,3%.
Educaci¨®n y empleo femenino
La situaci¨®n de la mujer en Afganist¨¢n durante los cinco a?os que gobernaron los talibanes entre 1996 y 2001 fue de absoluta discriminaci¨®n, represi¨®n y reclusi¨®n. Ten¨ªan prohibido estudiar, salir a la calle sin ser acompa?adas por un var¨®n y, en general, viv¨ªan una situaci¨®n de constante terror en la que todos los aspectos de sus vidas estaban sometidos a los hombres. A partir de 2001, la situaci¨®n mejor¨®, especialmente en las ciudades.
Las mujeres y ni?as tuvieron de nuevo acceso a la educaci¨®n. La escolarizaci¨®n de las menores pas¨® de un 0% en 2001 a un 77,7% solo dos a?os despu¨¦s, seg¨²n los datos recogidos por el Banco Mundial. Es una cifra que no ha parado de crecer hasta el 82,9% de 2018, ¨²ltimo dato registrado. David del Campo es director de Cooperaci¨®n Internacional y Acci¨®n Humanitaria de Save the Children, ONG que trabaja en el pa¨ªs asi¨¢tico desde 1976. ¡°Hay dos motivos que explican ese aumento: la apertura al exterior, que hizo que llegaran muchas organizaciones e inversiones y el cuidado de las estad¨ªsticas, que el Banco Mundial empez¨® a mimar para que se viera que invertir en Afganist¨¢n daba frutos¡±.
La incorporaci¨®n de la mujer al mercado laboral tambi¨¦n despeg¨® sin los talibanes en el poder. Ellas han pasado de representar el 14,9% de la poblaci¨®n activa en 2001 al 21,76% en 2019. En esto, la educaci¨®n tambi¨¦n ha sido un factor clave, aunque no solo a nivel formativo. ¡°La mejora en los indicadores educativos se debe tambi¨¦n a la incorporaci¨®n de mujeres al cuerpo de maestros y maestras en Afganist¨¢n¡±, se?ala Del Campo. En 2018, hab¨ªa alrededor de 120.000 trabajadoras en el sistema educativo, el 25% del total.
Infraestructuras y servicios
Afganist¨¢n es un pa¨ªs de monta?as y valles, que ocupan gran parte de su extensi¨®n, y la mayor parte de la poblaci¨®n vive en el medio rural. En 2018, solo el 25% de afganos viv¨ªa en ciudades. Con la inversi¨®n extranjera y la cooperaci¨®n al desarrollo, la red de carreteras se ampli¨® hasta cubrir casi 50.000 kil¨®metros, y las redes ferroviarias mejoraron, seg¨²n el Ministerio de Estad¨ªstica e Informaci¨®n de Afganist¨¢n. La Agencia Espa?ola para la Cooperaci¨®n Internacional y el Desarrollo (Aecid), ejecut¨® varios proyectos de construcci¨®n de carreteras hasta que transfiri¨® todos sus proyectos a las autoridades afganas en 2013.
Esta mejora en infraestructuras tambi¨¦n se deja notar en el acceso a la energ¨ªa el¨¦ctrica, en 2002 solo el 6,3% de la poblaci¨®n ten¨ªa acceso a ella, en 2016 la cobertura llegaba al 84,1%.
Las telecomunicaciones han crecido exponencialmente, un aspecto clave en un pa¨ªs donde los talibanes prohibieron la televisi¨®n y la m¨²sica. Hoy, el panorama es muy diferente, en 2019 hab¨ªa registradas 39,4 millones de l¨ªneas de telefon¨ªa m¨®vil frente a los 2,1 de 2006. Incluso los dirigentes de la milicia fundamentalista se han pasado a Twitter. Sus portavoces utilizan esa red social para difundir sus comunicados.
Una posible cat¨¢strofe humana sin ¡°f¨¢cil parang¨®n¡±
Los entrevistados mantienen la cautela con respecto a si, con los talibanes otra vez en el poder, estos cambios se revertir¨¢n. ¡°La situaci¨®n es de incertidumbre, no hay escuelas abiertas, ni universidades, no hay vida ordinaria¡±, cuenta Del Campo. Afirma que la necesidad ahora pasa por que la presi¨®n internacional redefina la relaci¨®n con los talibanes con ¡°pragmatismo¡±, para forzarlos a respetar los avances conseguidos en estas dos d¨¦cadas. Del Campo se?ala, adem¨¢s, la necesidad de preservar la presencia de maestras en el sistema educativo. ¡°Si les impiden seguir trabajando [a las mujeres], el impacto va a ser muy negativo para los ni?os y ni?as de Afganist¨¢n¡±.
La situaci¨®n que afronta el pa¨ªs es muy preocupante. Al conflicto hay que sumar una dura sequ¨ªa, as¨ª como una pobreza end¨¦mica, agravada por la pandemia del coronavirus. A esto se a?ade ahora la congelaci¨®n de fondos internacionales al desarrollo, como la que anunci¨® el pasado mi¨¦rcoles el Banco Mundial en respuesta a los recelos que suscitan los talibanes.
Mas tiene experiencia en lugares de conflicto como Yemen, Siria o Rep¨²blica Centroafricana. Sin embargo, esta crisis le parece m¨¢s grave. ¡°Hay conflictos, y cat¨¢strofes que afectan a una regi¨®n, pero esto afecta a todo el pa¨ªs. Puede alcanzar a millones y millones de personas, no le encuentro f¨¢cil parang¨®n¡±. Cuando EE UU y sus aliados han concluido ya una presencia militar que ha durado 20 a?os, MSF, al igual que Save the Children y otras ONG, no tiene pensado retirarse de Afganist¨¢n: ¡°Si abandon¨¢ramos ahora, ser¨ªa permitir que la gente sucumbiera a todo aquello contra lo que nosotros hemos estado luchando 40 a?os¡±.
Fuentes: Banco Mundial, Organizaci¨®n Mundial de la Salud, Ministerio de Estad¨ªstica e Informaci¨®n de Afganist¨¢n, Save the Children, M¨¦dicos Sin Fronteras, Agencia Espa?ola para la Cooperaci¨®n Internacional y el Desarrollo.
Sigue toda la informaci¨®n internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.
M¨¢s informaci¨®n
Archivado En
- Afganist¨¢n
- Guerra
- Sanidad
- Educaci¨®n
- Mujeres
- Educaci¨®n primaria
- Sanidad p¨²blica
- ONG
- MSF
- Save The Children
- Carreteras
- Higiene
- Sarampi¨®n
- Ayuda humanitaria
- Conflictos
- Terrorismo
- Infancia
- Trabajo
- PIB
- Poblaci¨®n
- Asia
- Feminismo
- Estados Unidos
- Conflictos armados
- Guerrilla Talib¨¢n
- Econom¨ªa
- Pobreza
- Derechos mujer
- Cooperaci¨®n y desarrollo
- Reconstrucci¨®n
- Indicadores sociales
- Indicadores econ¨®micos