Par¨ªs y Bruselas proh¨ªben las protestas de camioneros contra las restricciones por la covid
Las autoridades francesas y belgas buscan limitar el impacto de los ¡°convoyes de la libertad¡± inspirados en el bloqueo de Ottawa que pretenden paralizar las capitales
Par¨ªs no quiere ser Ottawa. Y el Gobierno franc¨¦s no quiere vivir, a dos meses de las elecciones presidenciales, una versi¨®n pand¨¦mica de las protestas de los chalecos amarillos que pusieron en jaque al El¨ªseo al inicio del mandato que Emmanuel Macron busca renovar en abril. Aunque el Ejecutivo trata de minimizar el alcance de esta nueva revuelta ciudadana, de manera preventiva, la Prefectura de Polic¨ªa de la capital francesa ha anunciado este jueves la prohibici¨®n de los ¡°convoyes de la libertad¡±, el movimiento motorizado que, inspirado en la protesta camionera contra la vacuna obligat...
Par¨ªs no quiere ser Ottawa. Y el Gobierno franc¨¦s no quiere vivir, a dos meses de las elecciones presidenciales, una versi¨®n pand¨¦mica de las protestas de los chalecos amarillos que pusieron en jaque al El¨ªseo al inicio del mandato que Emmanuel Macron busca renovar en abril. Aunque el Ejecutivo trata de minimizar el alcance de esta nueva revuelta ciudadana, de manera preventiva, la Prefectura de Polic¨ªa de la capital francesa ha anunciado este jueves la prohibici¨®n de los ¡°convoyes de la libertad¡±, el movimiento motorizado que, inspirado en la protesta camionera contra la vacuna obligatoria que tiene desde hace d¨ªas semiparalizada la capital canadiense, avanza ya desde todo el pa¨ªs rumbo a Par¨ªs.
El objetivo de este movimiento ciudadano organizado en redes sociales y servicios de mensajer¨ªa como Telegram, donde sus cuentas tienen varios miles de seguidores, es protestar este fin de semana en Par¨ªs por las restricciones sanitarias y, muy especialmente, contra el pasaporte de vacunaci¨®n. Luego continuar¨¢n rumbo a Bruselas para celebrar una ¡°convergencia europea¡± de manifestantes procedentes de otros pa¨ªses el lunes 14. Desde la capital belga, sede de las instituciones europeas, tambi¨¦n han reaccionado de forma preventiva frente al convoy. Las autoridades locales, regionales y federales han asegurado este jueves que ninguna manifestaci¨®n ha sido autorizada, puesto que a¨²n no han recibido ninguna solicitud formal. Pero que, en cualquier caso, se ha decidido prohibir la caravana y se han tomado medidas para evitar el bloqueo de la capital comunitaria.
La Prefectura de Par¨ªs les ha puesto el primer obst¨¢culo. Desde este viernes, d¨ªa previsto para la llegada de los primeros convoyes motorizados que empezaron a partir el mi¨¦rcoles desde varios puntos de Francia, se instalar¨¢ un dispositivo espec¨ªfico para ¡°impedir los bloqueos de las carreteras, sancionando y arrestando a los que contravengan esta prohibici¨®n de manifestaci¨®n¡±, se?ala el decreto oficial.
La justificaci¨®n de la medida, que prevalecer¨¢ desde el viernes 11 al lunes 14 de febrero, son los ¡°riesgos de perturbaci¨®n del orden p¨²blico que podr¨ªa causar esa manifestaci¨®n¡±. Seg¨²n la nota de la prefectura, su ¡°objetivo declarado es bloquear la capital entorpeciendo la circulaci¨®n por carretera en las calles de Par¨ªs para promover sus reivindicaciones, antes de continuar su periplo en direcci¨®n a Bruselas el lunes 14 de febrero¡±.
Aunque m¨¢s all¨¢ del rechazo a las restricciones sanitarias por el coronavirus ¡ªque no necesariamente a la vacuna en s¨ª¡ª es dif¨ªcil hallar muchas coincidencias pol¨ªticas en los participantes en los ¡°convoyes de la libertad¡±, en Francia resuena fuertemente estos d¨ªas el eco de las protestas de los chalecos amarillos (tambi¨¦n de filiaciones pol¨ªticas diversas, al menos en sus inicios), que protagonizaron fuertes manifestaciones desde finales de 2018 y a lo largo de buena parte de 2019, lastrando y marcando la agenda del Gobierno de Macron. Al igual que estas, las nuevas protestas tienen tambi¨¦n como trasfondo el alza de los precios de la energ¨ªa, un motivo de preocupaci¨®n generalizada pese a las medidas gubernamentales tomadas, un cheque inflaci¨®n y la fuerte limitaci¨®n del incremento de la factura el¨¦ctrica, entre otros.
Seg¨²n la emisora Franceinfo, que dice haber podido consultar una nota de los servicios secretos internos emitida el lunes, las antenas territoriales de este organismo siguen ¡°con atenci¨®n¡± un movimiento de fuerte ¡°¨¦xito virtual¡± que, a pesar de encontrarse a¨²n ¡°lejos de estar estructuralmente consolidado¡±, es capaz de dar un ¡°nuevo impulso¡± a los ¡°chalecos amarillos¡±, pero tambi¨¦n a los seguidores de teor¨ªas de la conspiraci¨®n y al movimiento de protesta contra el certificado covid, hoy transformado en pasaporte de vacunaci¨®n.
¡°Hast¨ªo¡± ante las restricciones
El portavoz del Gobierno, Gabriel Attal, asegur¨® el mi¨¦rcoles que el Ejecutivo es consciente de que hay ¡°un hast¨ªo y fatiga de los franceses ante el virus y las medidas que hemos tenido que tomar desde el principio de la pandemia para proteger¡± a los ciudadanos. Pero advirti¨® en contra de aquellos ¡°movimientos pol¨ªticos a menudo radicales que han buscado capitalizar ese hast¨ªo y fatiga para intentar crear un movimiento¡± de protesta que va m¨¢s all¨¢ de las fronteras galas y que, seg¨²n Le Parisien, el propio Macron ha pedido ¡°seguir de cerca¡±. De hecho, el objetivo declarado de la mayor parte de los participantes en los ¡°convoyes de la libertad¡± es Bruselas.
La cabalgata, que podr¨ªa amargar el San Valent¨ªn de la capital comunitaria, adonde tiene previsto llegar el 14 de febrero, se anuncia como una ¡°acci¨®n pac¨ªfica¡±, pero en Bruselas ya cuentan con antecedentes de concentraciones promovidas por grupos contrarios a las medidas anticovid que acabaron y¨¦ndose de las manos. Hace algo m¨¢s de tres semanas, unas 50.000 personas recorrieron las calles y las instituciones europeas para reclamar, entre otras cosas, el fin del pasaporte covid y reflejar su temor ante la vacunaci¨®n obligatoria.
Los convocantes eran otros, pero de nombre muy parecido: la organizaci¨®n Europeans United for Freedom, tambi¨¦n paneuroepa, logr¨® atraer manifestantes de varios pa¨ªses y elev¨® la asistencia a cotas sin apenas precedentes. En aquella marea humana se mezclaba de todo, desde hippies a conspiranoicos, pasando por gente corriente fatigada tras dos a?os de pandemia; acab¨® con disturbios, choques con la polic¨ªa y varios edificios p¨²blicos atacados, como la sede del Servicio Europeo de Acci¨®n Exterior, que lidera el espa?ol Josep Borrell, jefe de la diplomacia europea. El presidente del grupo Europeans United for Freedom, Tom Meert, ha dado tambi¨¦n su visto bueno a la convocatoria del convoy. ¡°Es realmente popular dentro de nuestro movimiento¡±, ha dicho, seg¨²n ha recogido Politico.
Los convocantes del convoy con destino Bruselas a¨²n no se han puesto en contacto con las autoridades belgas para solicitar oficialmente la manifestaci¨®n, seg¨²n ha informado Philippe Close, alcalde de Bruselas, pero estas ya han reaccionado anunciando su prohibici¨®n. La polic¨ªa tiene previsto desplegar un anillo de seguridad en torno a la capital comunitaria para desviar ¡°los veh¨ªculos de motor que lleguen a la capital a pesar de la prohibici¨®n¡±, seg¨²n ha anunciado Close en redes sociales. El alcalde ha a?adido en una entrevista en RTBF que es ¡°inadmisible¡± que se paralice la ciudad, con camiones y otros veh¨ªculos, pero se ha mostrado abierto a una manifestaci¨®n al uso, de las que se autorizan m¨¢s de 1.000 al a?o.
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