Macron viaja a Washington para ¡°resincronizarse¡± con Biden ante el impacto de la guerra en Ucrania
El presidente de Estados Unidos acoge en una visita de Estado a su hom¨®logo franc¨¦s, m¨¢ximo honor para un l¨ªder extranjero
El palacio del El¨ªseo desborda de orgullo por la visita de Estado a Estados Unidos de Emmanuel Macron a partir de este mi¨¦rcoles, el m¨¢ximo honor que el presidente estadounidense puede dedicar a un invitado extranjero. Macron lleva un mensaje europeo para Joe Biden: los efectos econ¨®micos de la guerra en Ucrania son mayores en Europa que en EE UU, y el plan masivo de inversiones de ...
El palacio del El¨ªseo desborda de orgullo por la visita de Estado a Estados Unidos de Emmanuel Macron a partir de este mi¨¦rcoles, el m¨¢ximo honor que el presidente estadounidense puede dedicar a un invitado extranjero. Macron lleva un mensaje europeo para Joe Biden: los efectos econ¨®micos de la guerra en Ucrania son mayores en Europa que en EE UU, y el plan masivo de inversiones de Biden ¨Dla llamada ley para la reducci¨®n de la inflaci¨®n¨D es proteccionista y crea una desventaja industrial y comercial para la UE.
Es la segunda visita de Estado de Macron a Washington desde que lleg¨® al El¨ªseo en 2017. Ning¨²n otro presidente de la V Rep¨²blica, fundada en 1958, ha disfrutado de este doble privilegio. La primera visita fue con Donald Trump en la Casa Blanca. Tambi¨¦n es la primera visita de Estado organizada por Biden desde que asumi¨® el poder en enero de 2021, y se justifica porque Francia es ¡°el aliado m¨¢s antiguo¡± de EE UU y ¡°uno de [sus] mejores y m¨¢s decisivos socios¡±, seg¨²n declar¨® un alto funcionario de la Casa Blanca antes del viaje.
Las relaciones sufrieron altibajos durante la presidencia de Trump. Pero llegaron a una m¨¢xima tensi¨®n con Biden ya en la presidencia en septiembre de 2021, cuando Australia rompi¨® un compromiso con Francia y renunci¨® a la compra de submarinos franceses para sustituirlos por sumergibles estadounidenses de propulsi¨®n nuclear. Par¨ªs lleg¨® a llamar a consultas a su embajador en Washington.
En Par¨ªs, aquella decisi¨®n, a espaldas de Francia, se interpret¨® como la confirmaci¨®n de que, m¨¢s all¨¢ de Trump, algo profundo hab¨ªa cambiado en EE UU. Ya no se pod¨ªa contar con ese pa¨ªs como un socio fiable y permanente. La invasi¨®n rusa de Ucrania ha obligado a matizar esta constataci¨®n: sin la ayuda militar estadounidense, posiblemente Rusia no habr¨ªa sufrido los reveses de estos ¨²ltimos meses. Pero no ha modificado la idea de que Europa necesita una autonom¨ªa militar para el d¨ªa en que Washington se desentienda definitivamente del continente.
El incidente por los submarinos queda lejos y ahora Macron entiende la invitaci¨®n a EE UU como un reconocimiento a su liderazgo en Europa y a lo que el El¨ªseo llama ¡°una relaci¨®n muy especial¡±, t¨¦rmino que tradicionalmente se aplicaba al v¨ªnculo entre EE UU y el Reino Unido. Con Londres fuera de la UE y Alemania en plena reorientaci¨®n geopol¨ªtica, Francia ¨D¨²nica potencia nuclear de la UE y ¨²nico miembro del club en el Consejo de la Seguridad de la ONU¨D aspira a ser el interlocutor privilegiado con la superpotencia.
En v¨ªsperas del viaje, un colaborador de Macron, que pidi¨® anonimato, resumi¨® as¨ª el mensaje franc¨¦s a Biden: ¡°Vemos un riesgo de desajuste entre Europa y EE UU. No solo porque los precios de la energ¨ªa son significativamente m¨¢s elevados en Europa, sino tambi¨¦n porque EE UU adopta unas disposiciones para invertir en su industria que, de alg¨²n modo, acrecientan el riesgo de un desajuste entre Europa y EE UU¡±.
El temor en la UE es, por ejemplo, que los subsidios estadounidenses a los autom¨®viles el¨¦ctricos acaben frenando el desarrollo de este sector en Europa. ¡°Estamos viendo c¨®mo hay empresas que se marchan de Europa a EE UU por los enormes subsidios que se est¨¢n pagando all¨ª¡±, dijo a mediados de octubre el ministro de Econom¨ªa y Clima alem¨¢n, Robert Habeck, tras reunirse con el ministro franc¨¦s de Finanzas, Bruno Le Maire.
Macron parte del diagn¨®stico siguiente: pol¨ªticamente, EE UU y la UE se han alineado en la reacci¨®n ante la invasi¨®n rusa de Ucrania del pasado febrero. Ambos han impuesto sanciones, han enviado armas a Ucrania y ayuda econ¨®mica. Al mismo tiempo, hay una disparidad en el impacto de estas sanciones y de la guerra en la econom¨ªa: mayor, se?ala el El¨ªseo, en la UE que en EE UU.
Explica la citada fuente francesa: ¡°Debe producirse una resincronizaci¨®n entre las agendas pol¨ªticas, que estamos gestionando de manera perfectamente coordinada cuando se trata de la crisis en Ucrania, y las agendas econ¨®micas, de modo que las consecuencias de la guerra de Rusia en Ucrania se gestionen de manera coherente entre los americanos y nosotros¡±.
La soluci¨®n, seg¨²n el El¨ªseo, debe venir, en parte, de Washington, con exenciones para sectores de la industria europea. Pero sobre todo de Europa, que ¡°debe demostrar su capacidad de entrar en esta competici¨®n¡± con un plan similar al de Biden. Otro motivo de desacuerdo entre Macron y Biden es la relaci¨®n con China. Macron rechaza la confrontaci¨®n con Pek¨ªn. Y ve, en la pol¨ªtica de EE UU, una voluntad de mantener el liderazgo global estadounidense que dice entender, pero que no es la europea.
Macron, que aterriz¨® en Washington en la noche del martes, viaja con una comitiva que incluye directivos empresariales franceses, astronautas, el director de cine Claude Lelouch y el escritor estadounidense Douglas Kennedy, reconocido franc¨®filo. La jornada estrella ser¨¢ el jueves, con una reuni¨®n de trabajo y una rueda de prensa con Biden, y la cena de Estado en la Casa Blanca con centenares de invitados. La visita concluir¨¢ el viernes en Nueva Orleans, colonia francesa hasta que en 1803 Napole¨®n Bonaparte la vendi¨® por 15 millones de d¨®lares de la ¨¦poca a Estados Unidos junto a todo el territorio de Luisiana, una quinta parte de la superficie actual del pa¨ªs.
Sigue toda la informaci¨®n internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.