La cat¨¢strofe de la presa de Nova Kajovka pone en apuros la contraofensiva ucrania
La inundaci¨®n de las llanuras en torno al r¨ªo Dni¨¦per dificulta las operaciones de ataque y beneficia a las defensas rusas
La guerra total es aquella en la que ¡°todo es un objetivo y todo puede servir como arma, lo humano y lo no humano¡±. Esta descripci¨®n, escrita por Emmanuel Kreike, profesor de Historia de la Universidad de Princeton, casa a la perfecci¨®n con lo sucedido este martes en Ucrania con la destrucci¨®n de la presa de Nova Kajovka. Una infraestructura civil en manos de un ej¨¦rcito, el ruso, que termina por causar una cat¨¢strofe que no solo tendr¨¢ graves consecuencias humanitarias y medioambientales, tambi¨¦n militares. Porque si algo provocar¨¢ que el caudal del r¨ªo Dni¨¦per se llegue a triplicar en sus 60 kil¨®metros finales, adem¨¢s de dejar inhabitables decenas de pueblos, es obstaculizar la contraofensiva ucrania.
Todav¨ªa est¨¢n por aclarar las responsabilidades directas del derrumbe de la presa, pero Rusia es militarmente la m¨¢s beneficiada. Serhii Nayev, teniente general de las Fuerzas Armadas de Ucrania, asegur¨® el martes en un encuentro con la prensa que el Estado Mayor hab¨ªa previsto la posibilidad de que las fuerzas rusas dinamitaran la presa, por lo que los planes de la contraofensiva siguen en marcha. Pero Nayev tambi¨¦n admiti¨® que la prioridad es la asistencia civil en la zona: ¡°La orden ahora es tomar medidas para proteger a la poblaci¨®n civil¡±. Se prev¨¦ que el nivel del agua pueda aumentar hasta cinco metros este mi¨¦rcoles y que a partir del jueves empiece a retroceder, seg¨²n public¨® Ukrinform, la agencia estatal de noticias.
¡°En la situaci¨®n actual de socorro civil, quiz¨¢ durante semanas no podr¨¢n llevarse a cabo operaciones militares en la zona¡±, explica a EL PA?S J¨¦r?me Pellistrandi, general retirado del ej¨¦rcito franc¨¦s. Pellistrandi es menos optimista que Nayev y califica la destrucci¨®n de la presa de ¡°contratiempo brutal para los intereses militares ucranios¡±.
El r¨ªo Dni¨¦per es, a su paso por las provincias de Dnipropetrovsk y Jers¨®n, la l¨ªnea que separa a los dos ej¨¦rcitos. Desde principios de primavera se estaban llevando a cabo constantes incursiones de fuerzas especiales y navales ucranias en la orilla oriental, en territorio de la provincia de Jers¨®n ocupado por Rusia. En algunos asentamientos cercanos al delta y en islas del r¨ªo se hab¨ªan establecido posiciones ucranias. Todas estas avanzadillas tuvieron que abandonar este martes un territorio que hab¨ªa quedado inundado.
Tres unidades de fuerzas especiales diferentes hab¨ªan explicado en mayo a EL PA?S que llevaban meses en zona ocupada por Rusia para forzar que el enemigo tuviera que mantener tropas en la regi¨®n y para identificar posiciones defensivas para ser destruidas cuando diera comienzo un asalto al r¨ªo en la contraofensiva. ¡°Por lo menos se pod¨ªa intentar un ataque de confusi¨®n hacia Crimea, pero esto ahora ser¨¢ muy dif¨ªcil, requerir¨¢ semanas replantear esta misma opci¨®n¡±, afirma Pellistrandi.
Este general franc¨¦s subraya que si antes hab¨ªa que idear un asalto en puntos del r¨ªo con una anchura de entre 500 metros y un kil¨®metro, ahora pasar¨¢ a tener de dos a tres kil¨®metros. ¡°Para los rusos es una enorme ventaja t¨¢ctica, para su artiller¨ªa ser¨ªa muy f¨¢cil golpear el traslado de blindados en pontones¡±. Pellistrandi a?ade otro beneficio para el lado ruso, y es que podr¨¢n destinar tropas ahora estacionadas en el sur al frente este, donde el Ej¨¦rcito de Tierra ucranio est¨¢ atacando con fuerza.
Las tropas ucranias est¨¢n avanzando en Bajmut y en el frente de Zaporiyia en los primeros compases de la contraofensiva. En Bajmut, la ciudad de Donetsk arrasada y que Rusia conquist¨® el pasado mayo, un oficial ucranio de infanter¨ªa consultado por este diario, adem¨¢s de otros militares entrevistados por medios ucranios, aseguran que se ha recuperado en tres d¨ªas lo que se hab¨ªa perdido en toda la primavera. ¡°Hace un mes le dec¨ªa a mi familia que est¨¢bamos perdidos, que nos iban a aplastar; ahora somos nosotros los que vamos a aplastarles¡±, dice un comandante de batall¨®n de infanter¨ªa en conversaci¨®n telef¨®nica con EL PA?S. En el frente de Zaporiyia los avances tambi¨¦n han sido confirmados por el enemigo. Este eje es el m¨¢s estrat¨¦gico de la guerra porque permitir¨ªa a las Fuerzas Armadas de Ucrania avanzar hacia los territorios ocupados al este del Dni¨¦per sin tener que probar un asalto fluvial.
La destrucci¨®n de la presa de Nova Kajovka har¨¢ todav¨ªa m¨¢s tit¨¢nico un desembarco en el Dni¨¦per. Charles Rei, militar retirado de Estados Unidos y destacado comentarista de la invasi¨®n rusa en las redes sociales, da ahora por imposible un intento de asalto anfibio ucranio: ¡°Cruzar el r¨ªo a trav¨¦s del embalse y curso abajo ya era extremadamente dif¨ªcil; ahora es t¨¦cnicamente imposible¡±. La carretera de la presa, adem¨¢s, ya no existe.
Mark Hertling, teniente general retirado de Estados Unidos, coincid¨ªa el martes con Rei en que la situaci¨®n perjudica a ambos bandos, aunque m¨¢s al ucranio porque, si bien las l¨ªneas defensivas rusas a pie de r¨ªo han quedado inundadas, las opciones de establecer una cadena de suministros en un intento de asalto a trav¨¦s del r¨ªo quedan seriamente afectadas.
Pellistrandi subray¨® que lo m¨¢s dram¨¢tico es la cat¨¢strofe ecol¨®gica. Toneladas de materiales contaminantes en el embalse de la presa llegar¨¢n a las llanuras del Dni¨¦per, adem¨¢s del cambio en el ecosistema. Los efectos para el sector agrario tambi¨¦n ser¨¢n dram¨¢ticos, seg¨²n ha incidido el Gobierno ucranio. Otro franc¨¦s, Fran?ois Heisbourg, analista de referencia del Instituto Internacional de Estudios Estrat¨¦gicos, afirmaba en la cadena LCI que el mundo estaba frente a ¡°un acto que puede considerarse como el primer ecocidio en una guerra moderna¡±.
Kreike, uno de los referentes acad¨¦micos en el estudio del uso de la naturaleza como arma de guerra, recuerda en su libro Scorched earth que el ecocidio no est¨¢ reconocido como un crimen internacional. Un ecocidio es la destrucci¨®n de un ecosistema en detrimento de la vida. Kreike analiza en su obra casos de destrucci¨®n expresa de ecosistemas con fines militares y para la destrucci¨®n de colectivos sociales y su territorio. Esto, el profesor de Princeton lo define como ¡°ambienticidio¡±. Los ejemplos hist¨®ricos que pone en Scorched earth coincidir¨ªan con lo que habr¨ªa realizado Rusia si se confirmara que ha detonado la presa de Nova Kajovka. El primer ejemplo que utiliza Kreike en el libro es del siglo XVI, las revueltas en los Pa¨ªses Bajos contra Felipe II. La nobleza local que se levant¨® contra el emperador destruy¨® diques que inundaron extensos territorios, ciudades, provocando migraciones masivas, pero que permitieron los asaltos de sus buques de guerra.
Hay tres tesis sobre lo que puede haber sucedido en Nova Kajovka. Kiev defiende a capa y espada que ha sido Rusia la que ha destruido la presa con detonaciones. Aunque la Casa Blanca ha dicho que todav¨ªa no puede sacar conclusiones en este sentido, fuentes del Gobierno estadounidense afirmaron a la cadena NBC que ten¨ªan informaci¨®n de que la autor¨ªa de la cat¨¢strofe era rusa. El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, y altos representantes de la Uni¨®n Europea han mostrado p¨²blicamente su convicci¨®n de que las tropas rusas son las responsables.
La versi¨®n del Kremlin es que saboteadores ucranios explosionaron la presa. Una consecuencia de ello es que la pen¨ªnsula de Crimea, anexionada unilateralmente por Rusia en 2014, dejar¨¢ de recibir agua a trav¨¦s del canal procedente del r¨ªo Dni¨¦per. La tercera versi¨®n, que de alguna manera sustentaron las autoridades rusas en la ocupada Nova Kajovka, es que la presa se derrumb¨® porque estaba en mal estado. La infraestructura hab¨ªa sufrido m¨²ltiples explosiones en el ¨²ltimo a?o, tanto de la artiller¨ªa ucrania como de las tropas rusas cuando se retiraron de la orilla occidental el pasado noviembre. M¨²ltiples testimonios de ambos bandos recogidos en medios y en canales de Telegram mostraron a unidades de los dos Ej¨¦rcitos apostadas en el r¨ªo que fueron sorprendidas ante la crecida del agua y huyendo en el ¨²ltimo minuto.
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