Francisco Sagasti, expresidente de Per¨²: ¡°Mi papel es contribuir a un adelanto de elecciones¡±
El antecesor de Pedro Castillo en la presidencia dice en esta entrevista con EL PA?S que a los 78 a?os trabaja para que haya una renovaci¨®n pol¨ªtica en su pa¨ªs
Francisco Sagasti (Lima, 78 a?os) fue presidente de Per¨² durante ocho meses y diez d¨ªas. El Congreso lo nombr¨® en noviembre de 2020 sucesor de Martin Vizcarra, expulsado del poder por ¡°incapacidad moral¡±, para conducir el pa¨ªs hasta el siguiente proceso electoral, en el que result¨® elegido Pedro Castillo. Antiguo directivo del Banco Mundial y con d¨¦cadas de experiencia en pol¨ªticas p¨²blicas, Sagasti fue elegido precisamente por su trayectoria alejada de la primera l¨ªnea. Junto a Valent¨ªn Paniagua se sienta en la mesa de los dos ¨²nicos mandatarios peruanos en este siglo que no cargan con denunc...
Francisco Sagasti (Lima, 78 a?os) fue presidente de Per¨² durante ocho meses y diez d¨ªas. El Congreso lo nombr¨® en noviembre de 2020 sucesor de Martin Vizcarra, expulsado del poder por ¡°incapacidad moral¡±, para conducir el pa¨ªs hasta el siguiente proceso electoral, en el que result¨® elegido Pedro Castillo. Antiguo directivo del Banco Mundial y con d¨¦cadas de experiencia en pol¨ªticas p¨²blicas, Sagasti fue elegido precisamente por su trayectoria alejada de la primera l¨ªnea. Junto a Valent¨ªn Paniagua se sienta en la mesa de los dos ¨²nicos mandatarios peruanos en este siglo que no cargan con denuncias de corrupci¨®n. Se le reconoce tambi¨¦n su capacidad de gesti¨®n. Recibe a EL PA?S en su casa en Lima. Acaba de publicar Gobernar en tiempos de crisis. Pol¨ªtica e ideas en el Gobierno de Transici¨®n y Emergencia, Per¨² 2020-2021 (Planeta), un libro donde analiza su paso por el poder.
En los ¨²ltimos meses, Sagasti ha vuelto a sentarse en el piano y est¨¢ tratando de volver a coger su c¨¢mara y capturar paisajes, aunque le sea imposible volver a recorrer las calles sin pasar desapercibido. Prepara adem¨¢s su siguiente libro. En octubre cumplir¨¢ 79 a?os, pero todav¨ªa no piensa en escribir sus memorias. Militante del Partido Morado, sigue haciendo pol¨ªtica, mientras recibe cr¨ªticas por no ser m¨¢s duro con el Gobierno de Dina Boluarte.
Pregunta. Que usted sea un expresidente en libertad es algo que llama la atenci¨®n en Per¨².
Respuesta. Es lo normal. Las otras cosas son una aberraci¨®n.
P. Una aberraci¨®n que se ha repetido con mucha frecuencia.
R. Eso no quiere decir que gobernar de manera honesta, ¨ªntegra, sea un milagro. Ni siquiera en este pa¨ªs lo es. Yo creo que hemos tenido presidentes como [Valent¨ªn] Panigua, [Fernando] Bela¨²nde, Jos¨¦ Luis Bustamante y Rivero que han dado la talla.
P.?C¨®mo se explica que los ¨²nicos dos pol¨ªticos que se fueron con mayor aprobaci¨®n, usted y Paniagua, hayan sido presidentes de transici¨®n que no eligi¨® el pueblo?
R. Tiene que ver en c¨®mo funciona el sistema y el liderazgo pol¨ªtico. En una campa?a se crean una serie de distorsiones, porque en muchos casos quienes apoyan esperan algo en retorno. Ni Paniagua ni yo llegamos por esa ruta y, por tanto, no ten¨ªamos deudas que saldar.
P. En su libro cuenta que tuvo cinco encuentros con el expresidente Pedro Castillo cuando ya estaba en el Gobierno y hablaron de liderazgos. ?Castillo ten¨ªa carencias en ese sentido?
R. Fue un esfuerzo tratar de plantearle algunas ideas sobre la manera de ejercer el poder. Aparentemente, no hubo suficiente receptividad de su parte o quiz¨¢ comprensi¨®n de lo que quer¨ªa hacer. Hicimos un ¨²ltimo intento y pens¨¦ en dejarle unas notas en seis hojas. Desgraciadamente, esa reuni¨®n se retras¨® y no tuvimos m¨¢s de tres cuartos de hora. Fue muy breve y all¨ª me di cuenta que m¨¢s no se pod¨ªa hacer.
P. ?Se pod¨ªa en entonces advertir el final anticipado del Gobierno de Castillo?
R. No esper¨¦ que llegara a esta situaci¨®n. Estamos en un pa¨ªs con tanta desconfianza que si uno no otorga un m¨ªnimo de confianza al otro es pr¨¢cticamente imposible establecer una relaci¨®n sensata y duradera. No esper¨¦ nunca esa combinaci¨®n de designaciones inapropiadas, de personas sin calificaci¨®n e involucradas en actos de corrupci¨®n. Mucho antes de su incomprensible golpe de Estado, en marzo y abril de 2021, publiqu¨¦ dos art¨ªculos indicando que la salida m¨¢s conveniente era el adelanto de elecciones y un nuevo Gobierno de transici¨®n. Ya desde hace buen tiempo ten¨ªa claro que no era la persona adecuada. Lo que me sorprendi¨® fue su total incompetencia y un Golpe de Estado fallido que no ten¨ªa ni pies ni cabeza.
P. ?El adelanto de elecciones debe ser la salida a la crisis actual?
R. Creo que s¨ª, recordemos que ya en el Congreso se plante¨® el adelanto de elecciones, ya la presidenta de la Rep¨²blica tambi¨¦n lo plante¨®. No estamos hablando de una idea que viene del aire, ha sido puesta en el tapete por varios actores pol¨ªticos.
P. Usted afirma en su libro que entendi¨® el car¨¢cter de Gobierno de transici¨®n.
R. Desde luego. Tuve una conciencia muy clara de que era un Gobierno temporal, de que est¨¢bamos en una crisis de salud tremenda por la pandemia, que no ten¨ªamos vacunas ni suficiente ox¨ªgeno, que no hab¨ªamos organizado un proceso razonable de contenci¨®n del contagio del virus. Adem¨¢s de que est¨¢bamos a meses de un proceso electoral extremadamente polarizado, en el medio de una crisis econ¨®mica con la peor ca¨ªda del PBI en la regi¨®n.
P. ?Por qu¨¦ la presidenta Boluarte no atendi¨® el car¨¢cter transitorio de su Gobierno?
R. Como expresidente de la Rep¨²blica no emito juicios de valor sobre quien est¨¢ ejerciendo el cargo en la actualidad.
P. ?C¨®mo nos encuentra como pa¨ªs estas Fiestas Patrias?
R. Muy dolidos, con muchas interrogantes y preguntas, y con un cierto grado de escepticismo por el comportamiento del Congreso, el Ejecutivo y algunas autoridades en otros poderes del Estado. Se llega con un ¨¢nimo un poco bajo.
P. ?M¨¢s desunidos de lo acostumbrado?
R. No creo que estemos m¨¢s desunidos, pero s¨ª se ve con mayor nitidez la fragmentaci¨®n pol¨ªtica.
P. ?Se ha preguntado c¨®mo hubiese sido su Gobierno si hubiese durado cinco a?os y no ocho meses?
R. Francamente, no. Durante el ejercicio del Gobierno no hubo tiempo, hab¨ªa que resolver. Ahora he estado m¨¢s dedicado a ver qu¨¦ fue lo que hicimos y qu¨¦ lecciones uno puede extraer para el futuro. Pero hay que ser muy claros: si la casa se est¨¢ incendiando no vas a pensar de qu¨¦ color quieres la manguera para apagar el fuego. ?Qu¨¦ hubiese sido diferente en un periodo m¨¢s largo? Evidentemente se pudo hacer mucho m¨¢s, pero al mismo tiempo las resistencias hubiesen sido peores.
P. ?Se ha planteado sumarse a las ¨²ltimas protestas?
R. D¨ªgame usted en qu¨¦ pa¨ªs del mundo se ha visto a un expresidente en una marcha por una variedad de temas que no generan consenso. M¨¢s puedo contribuir en otros espacios que saliendo a las calles. Mi papel est¨¢ en otros lugares para contribuir a las mismas cosas: adelanto de elecciones, que no haya impunidad en el caso de las personas que murieron en las manifestaciones y que haya una renovaci¨®n pol¨ªtica.
P. Sus cr¨ªticos consideran que eso es una tibieza de su parte.
R. Es una moderaci¨®n radical. Yo me reh¨²so a ponerme en un extremo o en otro. Si consideran que es tibio hablar con claridad, all¨¢ ellos. Yo respeto a quienes salen a marchar, piden paro, hacen huelga de hambre, a quienes tuitean. Pero me reh¨²so a que haya una sola manera de expresar disconformidad. Basta, por favor.
P. ?Entonces ya no postular¨¢ a ning¨²n cargo p¨²blico en el futuro?
R. No me lo estoy planteando. El tema ahora es ver c¨®mo se resuelve esta situaci¨®n, c¨®mo salir del entrampamiento pol¨ªtico.
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