Anatom¨ªa de un fiasco: el Pearl Harbor de Israel en torno a Gaza

Cerca de las 6.30 del s¨¢bado 7 de octubre los servicios de inteligencia israel¨ªes, considerados uno de los mejores del mundo, detectaron un inusual aumento de la actividad de grupos palestinos en la frontera de la franja de Gaza. Lanzaron una alerta, pero nadie la recibi¨®. El sofisticado sistema militar de comunicaciones de tecnolog¨ªa digital hab¨ªa quedado desactivado en el per¨ªmetro fronterizo. La paz del sabbat, cuando se detiene la vida cotidiana en las comunidades jud¨ªas, coincid¨ªa con el final de la semana de fiesta religiosa del Sucot, o de los Tabern¨¢culos, en una de las jornadas...

Cerca de las 6.30 del s¨¢bado 7 de octubre los servicios de inteligencia israel¨ªes, considerados uno de los mejores del mundo, detectaron un inusual aumento de la actividad de grupos palestinos en la frontera de la franja de Gaza. Lanzaron una alerta, pero nadie la recibi¨®. El sofisticado sistema militar de comunicaciones de tecnolog¨ªa digital hab¨ªa quedado desactivado en el per¨ªmetro fronterizo. La paz del sabbat, cuando se detiene la vida cotidiana en las comunidades jud¨ªas, coincid¨ªa con el final de la semana de fiesta religiosa del Sucot, o de los Tabern¨¢culos, en una de las jornadas m¨¢s tranquilas del a?o, solo por detr¨¢s del Yom Kipur. Hac¨ªa exactamente 50 a?os que Israel no sufr¨ªa una agresi¨®n semejante, en la guerra de octubre de 1973 contra Siria y Egipto que estuvo a punto de perder, precisamente en el d¨ªa de la expiaci¨®n jud¨ªa.

Cuando los soldados de los cuarteles situados en torno al enclave costero palestino se despertaron, se encontraron en ropa interior frente a los fusiles de los milicianos en uniforme de camuflaje de la fuerza Nujba, la unidad de ¨¦lite del brazo armado de Ham¨¢s. Para la mayor¨ªa de ellos, junto con otros 1.400 israel¨ªes, fue lo ¨²ltimo que vieron. Otros son ahora rehenes en alg¨²n escondite subterr¨¢neo de Gaza, junto con m¨¢s de un centenar de compatriotas, en su mayor¨ªa civiles, del Movimiento de Resistencia Isl¨¢mica, que controla el territorio palestino desde hace 17 a?os.

El asesor de seguridad nacional del Gobierno israel¨ª, Tzachi Hanegbi, hab¨ªa asegurado seis d¨ªas antes en una entrevista radiof¨®nica: ¡°Ham¨¢s se muestra muy contenido y es consciente de las represalias que puede sufrir si nos desaf¨ªa¡±. Nadie esperaba en Israel el ataque coordinado por parte de centenares de miembros de Ezedin al Qasam, el ala militar de Ham¨¢s, junto con miles de civiles palestinos armados, cuando penetraron hasta 30 kil¨®metros en territorio israel¨ª. Nadie esperaba que echaran abajo con excavadoras y explosivos tramos enteros de una valla de separaci¨®n considerada inexpugnable desde hace a?os. Que se dispararan desde el enclave palestino m¨¢s de 2.500 cohetes contra territorio israel¨ª en una oleada masiva que en realidad constitu¨ªa una gran cortina de humo. O que comandos adiestrados durante meses sortearan la verja tecnol¨®gica con parapentes, o la atravesaran en moto por las primeras fisuras abiertas. Tampoco era de prever que en un primer golpe de mano, drones comerciales cargados de explosivos estallaran sobre las torres de vigilancia.

Israel llevaba m¨¢s de una d¨¦cada previniendo la amenaza de una incursi¨®n nocturna a trav¨¦s de los t¨²neles excavados por Ham¨¢s bajo la frontera del enclave. Pero la infiltraci¨®n masiva del enemigo se produjo en plena superficie y al amanecer del primer s¨¢bado de octubre con veh¨ªculos cargados de milicianos y militantes en armas.

¡°Cuando se acabe esta guerra, se investigar¨¢n los fallos de seguridad que se han producido¡±, anunciaba esta semana el teniente coronel Richard Hecht, el portavoz internacional de las Fuerzas Armadas. Una veintena de poblaciones y asentamientos de kibutz (cooperativas agr¨ªcolas) en la parte israel¨ª de la frontera, as¨ª como al menos cuatro acuartelamientos del ej¨¦rcito fueron tomados por m¨¢s de 1.500 milicianos y militantes de las fuerzas de Ham¨¢s, en la operaci¨®n denominada Diluvio de Al Quds, en referencia al nombre dado en ¨¢rabe a Jerusal¨¦n por los palestinos. En una de las bases militares atacadas se concentraba la mayor parte de los mandos de la Divisi¨®n de Gaza del Comando Sur, de manera que las unidades militares de la zona quedaron descabezadas desde un primer momento, con su capacidad de respuesta limitada.

A falta de una investigaci¨®n oficial, la prensa israel¨ª y medios internacionales han recopilado elementos del ataque que permiten bosquejar, junto con la opini¨®n de expertos consultados, una reconstrucci¨®n del ataque que ha sido calificado por el presidente israel¨ª, Isaac Herzog, como ¡°el Pearl Harbor de Israel¡±.

Una operaci¨®n planificada desde, al menos, 2022

No fue una operaci¨®n improvisada. Ham¨¢s hab¨ªa planeado matar o secuestrar civiles y militares israel¨ªes desde, al menos, 2022, seg¨²n la fecha que figura en documentos hallados en poder de milicianos abatidos en los que se detallaba su plan de operaciones, seg¨²n una informaci¨®n publicada este s¨¢bado en la edici¨®n digital del diario hebreo Haaretz.

Desde el exilio en Turqu¨ªa, el numero dos del comit¨¦ ejecutivo pol¨ªtico de Ham¨¢s, Saleh al Aruri, declaraba a la cadena catar¨ª Al Jazzeera que las brigadas Ezedin al Qasam hab¨ªan lanzado ¡°una operaci¨®n bien planeada¡± contra la Divisi¨®n de Gaza de Israel. El mismo dirigente islamista justific¨® el ataque como ¡°una acci¨®n preventiva ante los movimientos observados en el Comando Sur del ej¨¦rcito¡±, as¨ª como para mostrar ¡°que Israel era incapaz de defender sus posiciones¡±. Sin embargo, los objetivos pol¨ªticos de Ham¨¢s eran bien otros, seg¨²n el exministro de Asuntos Exteriores israel¨ª Shlomo Ben Ami: ¡°Busca frenar la normalizaci¨®n de las relaciones entre Israel y Arabia Saud¨ª, vaciar las c¨¢rceles israel¨ªes de prisioneros palestinos, mediante el intercambio con rehenes jud¨ªos, y seguir apoder¨¢ndose de la hegemon¨ªa pol¨ªtica en Palestina, al calor de la causa de Jerusal¨¦n y del icono de la mezquita de Al Aqsa¡±.

P¨¦rdida de visi¨®n desde el cuartel general

A pesar de su confianza ciega en la tecnolog¨ªa, los analistas de inteligencia de guardia en las torres Kyria de Tel Aviv, sede del Ministerio de Defensa y del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, perdieron la visi¨®n de cuanto ocurr¨ªa en torno a la franja de Gaza. En los ¨²ltimos a?os, Israel ha primado la vigilancia electr¨®nica de sus fronteras frente a la de patrullas militares convencionales. En visitas organizadas por el ej¨¦rcito, los periodistas extranjeros han podido observar c¨®mo los soldados montan guardia frente a pantallas de ordenador y televisi¨®n, como en el centro de observaci¨®n de Rosh Hanikra, en la frontera con L¨ªbano, mientras apenas se observan retenes militares en el exterior.

Mohamed Deif, jefe de las brigadas Ezedin al Qasam, y Yahya Sinwar, jefe pol¨ªtico de Ham¨¢s en Gaza, buenos conocedores de la mentalidad israel¨ª tras haber pasado largos a?os en la c¨¢rcel, han explotado esta debilidad del ej¨¦rcito. En contrapartida, han sabido mantener en secreto durante m¨¢s de un a?o los preparativos para la mayor ofensiva lanzada contra Israel en medio siglo.

Las im¨¢genes aireadas en Israel en series de televisi¨®n como Fauda, en las que los jefes del Shin Bet (seguridad interior) y los de las unidades militares en territorio palestino escuchan las conversaciones de los l¨ªderes de Ham¨¢s y siguen sus movimientos a trav¨¦s de drones y sat¨¦lites, no parecen corresponderse con la realidad del ataque lanzado por sorpresa por Ham¨¢s, que el pasado s¨¢bado se cobr¨® la vida de 1.400 israel¨ªes y concluy¨® con el secuestro de m¨¢s de un centenar de ellos.

¡°El movimiento isl¨¢mico dio una sorpresa estrat¨¦gica, al no participar en las ofensivas de la Yihad Isl¨¢mica contra Israel en los ¨²ltimos a?os¡±, puntualizaba Shlomo Ben Ami, en recientes declaraciones a EL PA?S. ¡°Ahora nos han goleado con una sorpresa t¨¢ctica, al penetrar en Israel a trav¨¦s de la valla tradicional, en lugar de por t¨²neles bajo la barrera subterr¨¢nea¡±. Este complejo sistema defensivo fue construido la pasada d¨¦cada con un coste de m¨¢s de 950 millones de euros bajo los gobiernos de Netanyahu.

¡°No ha existido un despliegue militar serio en la frontera de Gaza¡±, argumenta Ben Ami. ¡°La debilidad de la Autoridad Palestina ha desviado hasta Cisjordania el foco de los movimientos militares de Israel, mientras que no se ha prestado la atenci¨®n debida a la seguridad en torno a la franja de Gaza, y se ha reforzado en puntos como la frontera libanesa¡±.

Sin mandos y sin comunicaciones, Israel tard¨® muchas horas en evaluar la entidad del ataque sufrido en Gaza, antes de que el primer ministro, Benjam¨ªn Netanyahu, declarara el estado de guerra. Mientras, las im¨¢genes que circulaban por las redes sociales mostraban que no se trataba de un ataque como los habituales desde la Franja. Netanyahu, que ha centrado en la seguridad sus mandatos al frente del Gobierno durante tres lustros, es visto ahora como responsable de haber da?ado la reputaci¨®n de Israel como principal potencia militar, y m¨¢s temida, en Oriente Pr¨®ximo.

Imagen de gobernante pragm¨¢tico

Desde la guerra de mayo de 2021 en la franja de Gaza, Ham¨¢s ha preferido mostrar una imagen de gobernante pragm¨¢tico, interesado en mantener la estabilidad en la frontera para que miles de trabajadores gazat¨ªes pueden conservar sus empleos en la agricultura o la construcci¨®n en Israel. Los analistas de seguridad israel¨ªes son ahora conscientes de haber sido enga?ados durante meses en una estratagema de Ham¨¢s sin precedentes.

Una fuente del movimiento islamista citada por la agencia Reuters ha asegurado que ¡°Ham¨¢s se esforz¨® en dar la impresi¨®n de que no estaba en condiciones de afrontar una nueva guerra¡±. ¡°Pero Ham¨¢s ha utilizado informaci¨®n de inteligencia sin precedentes para lanzar un enga?o a Israel: mientras se preparaba para una guerra a gran escala, intentaba mostrarse interesada en la reconstrucci¨®n de la econom¨ªa de Gaza¡±, revel¨® la misma fuente.

En 2022, el jefe de relaciones internacionales de Ham¨¢s, Basem Naim, aseguraba a EL PA?S en Gaza que su organizaci¨®n hab¨ªa dado un cambio al aceptar la creaci¨®n de un Estado de Palestina en las fronteras anteriores a la guerra de 1967 (la franja de Gaza, Cisjordania y Jerusal¨¦n Este), aunque sin reconocer al Estado de Israel. La revisi¨®n estatutaria destac¨® entonces que el conflicto con Israel tienen un car¨¢cter ¡°pol¨ªtico¡± y carece de ¡°base religiosa¡± frente al pueblo jud¨ªo.

¡°Somos una organizaci¨®n responsable¡±, aseguraba entonces Naim. ¡°Hay que entender que hoy en Gaza se est¨¢n realizando intensos esfuerzos. En la ¨²ltima escalada (entre Israel y la Yihad Isl¨¢mica), no estuvimos directamente involucrados y Ham¨¢s no quiso expandir la intensidad de la batalla¡±, apostill¨®.

El exalmirante y exjefe de servicio de seguridad interior Ami Ayalon explica: ¡°Como otros directores del Shin Bet, advert¨ª al Gobierno de que era claro que Ham¨¢s solo pretende destruir Israel y crear un Estado palestino regido por la shar¨ªa (ley isl¨¢mica)¡±. ¡°Ham¨¢s es la rama palestina de los Hermanos Musulmanes, una entidad pol¨ªtica surgida en Egipto. Pero el comportamiento de su brazo militar ha sido similar al del Estado Isl¨¢mico. Es lo que hemos visto en los ataques en la frontera de Gaza con el asesinato de mujeres y ni?os. No ha sido una acci¨®n de guerra, sino de terrorismo radical¡±, advierte este experto en seguridad nacional.

El ej¨¦rcito de Israel ha revelado esta semana el hallazgo de decenas de cad¨¢veres en Kfar Aza, un kibutz cerca de Gaza, con 750 habitantes civiles, al concluir los combates con el ¨²ltimo reducto de los milicianos, que lo tomaron el pasado s¨¢bado. Un portavoz del ej¨¦rcito israel¨ª cifr¨® en decenas los cad¨¢veres encontrados, entre ellos un n¨²mero de ni?os y beb¨¦s sin especificar.

Pocas horas antes, hablando desde una localizaci¨®n oculta, el jefe militar de Ham¨¢s, Mohamed Deif, describi¨® el ataque como ¡°una explosi¨®n de la angustia de los palestinos por el trato sufrido por Israel durante d¨¦cadas¡±. Casi 24 horas despu¨¦s del inicio del ataque masivo de las brigadas de Ezedin al Qasam, todav¨ªa hab¨ªa familias israel¨ªes escondidas en sus casas a la espera de que el ej¨¦rcito les rescatara de una amenaza existencial. Un terror que no olvidar¨¢n nunca.

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