El diario ¡®The Sun¡¯ revela un v¨ªdeo de Kate Middleton del fin de semana
La princesa de Gales camina sonriente, junto a su esposo Guillermo, en una tienda-granja de Windsor que, seg¨²n el tabloide brit¨¢nico, visit¨® con su familia
El tabloide brit¨¢nico The Sun ha decidido asumir el papel de caballero andante en defensa de Kate Middleton y ha publicado un v¨ªdeo de la princesa de Gales, grabado el fin de semana en una tienda-granja de Windsor. El diario ya hab¨ªa adelantado el domingo la exclusiva, pero sin ofrecer im¨¢genes. Kate Middleton se hab¨ªa dejado ver por los alrededores de su residencia de Adelaide Cottage en dos ocasiones. Junt...
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El tabloide brit¨¢nico The Sun ha decidido asumir el papel de caballero andante en defensa de Kate Middleton y ha publicado un v¨ªdeo de la princesa de Gales, grabado el fin de semana en una tienda-granja de Windsor. El diario ya hab¨ªa adelantado el domingo la exclusiva, pero sin ofrecer im¨¢genes. Kate Middleton se hab¨ªa dejado ver por los alrededores de su residencia de Adelaide Cottage en dos ocasiones. Junto a su esposo Guillermo hab¨ªa acudido a un mercado de hortalizas y frutas, y ambos hab¨ªan animado a sus hijos en las actividades deportivas del fin de semana. Los testigos citados por el diario elogiaban ¡°su buen aspecto¡± y respiraban aliviados por su presencia, despu¨¦s del revuelo de los ¨²ltimos d¨ªas.
The Sun, que hab¨ªa impulsado d¨ªas antes una campa?a en defensa de la privacidad de la princesa, bajo el titular Lay Off Kate (Dejad en paz a Kate), en contra del clamor popular que exig¨ªa a Middleton dar la cara, ha decidido publicar ahora las im¨¢genes que ten¨ªa guardadas. ¡°Hemos decidido contar ayer su aparici¨®n, y mostrar hoy el v¨ªdeo [por el lunes], en un intento de poner fin a lo que el propio palacio de Kensington ha llamado ¡®la locura de las redes sociales¡±, se justifica el peri¨®dico.
La princesa aparece en las im¨¢genes vistiendo una sudadera y unos leggings, con una bolsa de pl¨¢stico en la mano con algunas compras. Middleton camina sonriente junto a Guillermo de Inglaterra, que lleva una gorra que le oculta parte del rostro.
Los medios brit¨¢nicos, m¨¢s contenidos respecto a la pol¨¦mica en torno a Middleton de lo que suelen ser con temas referentes a la familia real, comenzaron sin embargo el lunes a reclamar mayores explicaciones al palacio de Kensington, al que exigen que ponga fin a la oleada de rumores y especulaciones en torno a la salud de la princesa.
Middleton desapareci¨® de la escena p¨²blica a mediados de enero, cuando el palacio de Kensington anunci¨® que se hab¨ªa sometido a una ¡°cirug¨ªa abdominal¡±, sin especificar m¨¢s sobre el diagn¨®stico. Reclamaron entonces un respeto a la privacidad de la princesa, y anunciaron que permanecer¨ªa de 10 a 14 d¨ªas de convalecencia en el hospital, y que se retirar¨ªa de las actividades p¨²blicas, para llevar a cabo su recuperaci¨®n, hasta despu¨¦s de Pascua. Esto es, hasta el 17 de abril, fecha en la que concluyen en el Reino Unido las actividades escolares.
A pesar de la cantidad ingente de especulaciones, rumores y teor¨ªas de la conspiraci¨®n que circulaban por las redes sociales, la prensa del Reino Unido mantuvo un tono discreto respecto al paradero y el estado de salud de Middleton.
Hasta que sali¨® a la luz la foto de la discordia: la instant¨¢nea aparentemente tierna e inocente de Middleton, rodeada de sus tres hijos en Adelaide Cottage, la residencia donde vive actualmente la familia, que la princesa decidi¨® distribuir en las redes sociales para celebrar el D¨ªa de la Madre (en el Reino Unido es el 10 de marzo) y agradecer las muestras de apoyo recibidas durante las semanas previas.
Las principales agencias de comunicaci¨®n denunciaron a las pocas horas que la imagen hab¨ªa sido manipulada y la retiraron de sus servidores. La propia princesa de Gales pidi¨® perd¨®n al d¨ªa siguiente en X (antes Twitter) y reconoci¨® su culpa. ¡°Como muchos fot¨®grafos aficionados, a veces experimento con la edici¨®n. Quiero expresar mis disculpas por cualquier confusi¨®n que haya provocado la foto familiar que compartimos ayer. Espero que todos pudieran celebrar un feliz D¨ªa de la Madre¡±, admiti¨®.
El episodio provoc¨® una grave crisis de credibilidad, y calent¨® los ¨¢nimos de la prensa brit¨¢nica, que desde entonces exige, con un tono cada vez m¨¢s contundente, alg¨²n tipo de comunicado o declaraci¨®n que ponga fin a una locura de la que, por primera vez en d¨¦cadas, no son ellos los principales responsables. El control, o m¨¢s bien el descontrol, se lo han arrebatado las redes sociales.
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