Trump dise?a un equipo econ¨®mico centrado en los aranceles, las rebajas fiscales y la energ¨ªa
El presidente electo se rodea de expertos leales con sensibilidades diferentes, pero deja claro que ¨¦l mismo marcar¨¢ las prioridades
Donald Trump ha dado pistas algo contradictorias en la selecci¨®n de los altos cargos de su equipo econ¨®mico. El presidente electo de EE UU, sin embargo, ha marcado el terreno con lo que son las tres prioridades con las que afrontar¨¢ el nuevo mandato cuando tome posesi¨®n el pr¨®ximo 20 de enero. Los aranceles a las importaciones ¨Dcomo castigo o herramienta de negociaci¨®n¨D, las rebajas generalizadas de impuestos y el impulso a la producci¨®n de energ¨ªas f¨®siles definen su programa econ¨®mico. Las sensibilidades de los escogidos son diferentes, pero su autonom¨ªa de decisi¨®n ser¨¢ limitada. Trump reci...
Donald Trump ha dado pistas algo contradictorias en la selecci¨®n de los altos cargos de su equipo econ¨®mico. El presidente electo de EE UU, sin embargo, ha marcado el terreno con lo que son las tres prioridades con las que afrontar¨¢ el nuevo mandato cuando tome posesi¨®n el pr¨®ximo 20 de enero. Los aranceles a las importaciones ¨Dcomo castigo o herramienta de negociaci¨®n¨D, las rebajas generalizadas de impuestos y el impulso a la producci¨®n de energ¨ªas f¨®siles definen su programa econ¨®mico. Las sensibilidades de los escogidos son diferentes, pero su autonom¨ªa de decisi¨®n ser¨¢ limitada. Trump recibe como herencia una econom¨ªa en buena forma, pero est¨¢ dispuesto a marcar diferencias con su antecesor, Joe Biden, desde el principio.
Los hombres clave del equipo econ¨®mico de Trump ser¨¢n el secretario del Tesoro, Scott Bessent; el secretario de Comercio, Howard Lutnick; el zar de la energ¨ªa, Doug Burgum; el representante comercial, Jamieson Greer; el director del Consejo Econ¨®mico Nacional de la Casa Blanca, Kevin Hassett, y el director de la Oficina de Administraci¨®n y Presupuesto, Russell Vought. A ellos se suman, desde fuera del Gabinete, Elon Musk y Vivek Ramaswamy al frente del autodenominado ¨Daunque org¨¢nicamente inexistente¨D Departamento de Eficiencia Gubernamental. Aun sin contar con los secretarios de Energ¨ªa, Trabajo, Transporte, Vivienda y Agricultura, con un papel subsidiario, los planteamientos de los principales espadas de la pol¨ªtica econ¨®mica trumpista son en muchos aspectos contradictorios.
Los inversores vivieron cierto espejismo con el nombramiento del multimillonario Scott Bessent, fundador de Key Square Group, anunciado en la noche del pasado viernes, como responsable del Tesoro. Bessent es una figura respetada en Wall Street y en el mercado cundi¨® la impresi¨®n de que su selecci¨®n era se?al de una pol¨ªtica econ¨®mica ortodoxa de control del d¨¦ficit p¨²blico y promoci¨®n del crecimiento en la que las rebajas de impuestos se graduar¨ªan y la amenaza de aranceles ser¨ªa m¨¢s bien instrumental.
Bessent sintetiza sus recetas en el 3/3/3: recortar el d¨¦ficit federal ¨Dque ahora ronda el 7%¨D hasta el 3% del producto interior bruto, lograr un crecimiento anual del 3% y aumentar la producci¨®n nacional de petr¨®leo en tres millones de barriles diarios. Los inversores aplaudieron su nombramiento con una rebaja transitoria en los tipos de inter¨¦s de la deuda del Tesoro y una ca¨ªda del d¨®lar.
Ese alivio, sin embargo, dur¨® poco. El propio presidente electo se encarg¨® el lunes de devolver la incertidumbre al mercado de divisas con la amenaza de aranceles unilaterales del 25% para todos los productos importados de M¨¦xico y Canad¨¢ (hasta ahora exentos en virtud del tratado de libre comercio vigente entre los tres pa¨ªses) y de un 10% adicional a los ya establecidos para los productos chinos. Trump, sin embargo, mantuvo este mi¨¦rcoles una conversaci¨®n con la presidenta de M¨¦xico, Claudia Sheinbaum, que calific¨® de ¡°maravillosa¡± y que deja en el aire la efectividad de la amenaza arancelaria.
Los tipos de la deuda tambi¨¦n repuntaron con la designaci¨®n de Hassett, uno de los que pilotaron las rebajas fiscales en el primer mandato de Trump. A eso se suma la presencia de Lutnick, que ha abrazado decididamente la pol¨ªtica proteccionista, y el nombramiento como representante comercial de Greer, que trabaj¨® en los aranceles del republicano en su anterior mandato.
Todos esos movimientos convierten la tarea de Bessent de pilotar desde el Tesoro una pol¨ªtica de responsabilidad fiscal en la cuadratura del c¨ªrculo. El recorte masivo de gasto que promete el Departamento de Eficiencia Gubernamental va a ser ¡°bastante f¨¢cil¡±, seg¨²n dijo Maye Musk, la madre de Elon Musk, en un programa de Fox News, pero muy pocos lo ven as¨ª. El hombre m¨¢s rico del mundo ha llegado a decir que se pod¨ªan recortar dos de los 6,7 billones de d¨®lares de gasto p¨²blico del Gobierno federal, pero sin explicar c¨®mo, m¨¢s all¨¢ de ejemplos llamativos, pero muy limitados. La mayor partida son intereses de la deuda (de obligado pago), gasto militar (que Trump ha dicho que quiere aumentar) y prestaciones reconocidas (como seguridad social y sanidad, que el presidente electo prometi¨® respetar y tienen tendencia a crecer).
Seg¨²n el Fondo Monetario Internacional, las deportaciones masivas anunciadas por Trump y los aranceles casi indiscriminados tendr¨ªan un efecto negativo sobre el crecimiento y sobre la inflaci¨®n. La subida de los precios por las restricciones de oferta puede frenar las rebajas de tipos de inter¨¦s de la Reserva Federal, dificultando el abaratamiento del servicio de la deuda. Las rebajas de impuestos tender¨ªan a impulsar el crecimiento, pero a costa de un mayor d¨¦ficit y deuda y, por tanto, de una mayor carga de intereses.
Ni siquiera est¨¢ del todo claro c¨®mo ser¨¢ el reparto de competencias. En sus nombramientos, Trump ha ido poniendo tareas. En el comunicado en que design¨® a Bessent se hablaba del papel del d¨®lar como moneda de reserva, de frenar el camino insostenible de la deuda federal, impulsar la competitividad y priorizar el crecimiento, pero no se hablaba ni de impuestos ni de aranceles, m¨¢s all¨¢ de una referencia de pasada a ¡°los desequilibrios comerciales injustos¡±. En cambio, s¨ª se refiri¨® a la pol¨ªtica comercial al nombrar a Howard Lutnick: ¡°Liderar¨¢ nuestra agenda de aranceles y comercio, con responsabilidad directa adicional sobre la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos¡±. El representante comercial, Jamieson Greer, depender¨¢ del propio Lutnick.
Adem¨¢s, Trump tendr¨¢ dos figuras cercanas en las que apoyarse en la Casa Blanca a quienes ya conoce de su anterior mandato. Russell Vought, a quien define como ¡°un agresivo recortador de costos y desregulador¡±, repite como director de la Oficina de Administraci¨®n y Presupuesto. Est¨¢ vinculado al programa m¨¢ximo de los conservadores, el Proyecto 2025. Adem¨¢s, trabajar¨¢ codo con codo en la Casa Blanca con Kevin Hassett, director del Consejo Econ¨®mico Nacional de la Casa Blanca. Al anunciar su nombramiento, dijo: ¡°Juntos, renovaremos y mejoraremos nuestros recortes fiscales r¨¦cord, y garantizaremos un comercio justo con los pa¨ªses que se han aprovechado de Estados Unidos en el pasado¡±.
Sean m¨¢s o menos agresivas las rebajas fiscales (el Congreso tiene ah¨ª la ¨²ltima palabra) y la pol¨ªtica comercial, en lo que no parece haber dudas es en que Trump impulsar¨¢ en todo lo posible las energ¨ªas f¨®siles por encima de las consideraciones medioambientales. El zar de la energ¨ªa Doug Burgum es su enlace con las petroleras y la pol¨ªtica del presidente electo al respecto est¨¢ muy clara: ¡°Perforar, perforar, perforar¡±.