Tocar un instrumento incrementa la neuroplasticidad del cerebro en los ni?os

Algunas mujeres embarazadas escuchan m¨²sica o colocan los cascos sobre su vientre para que las melod¨ªas que disfrutan conecten directamente con sus beb¨¦s durante la gestaci¨®n. La mayor¨ªa de ellas afirman que cuando posan los auriculares sobre su barriga notan como el feto se tranquiliza, se mueve menos, se queda ¡°en modo pausa¡± si est¨¢ especialmente activo. Tambi¨¦n, muchos de estos ni?os, cuyas madres escucharon m¨²sica durante su embarazo, reconocen a?os despu¨¦s melod¨ªas que oyeron durante su periodo fetal. La ciencia asegura que la m¨²sica proporciona un mejor campo de estudio para la neuropla...

Algunas mujeres embarazadas escuchan m¨²sica o colocan los cascos sobre su vientre para que las melod¨ªas que disfrutan conecten directamente con sus beb¨¦s durante la gestaci¨®n. La mayor¨ªa de ellas afirman que cuando posan los auriculares sobre su barriga notan como el feto se tranquiliza, se mueve menos, se queda ¡°en modo pausa¡± si est¨¢ especialmente activo. Tambi¨¦n, muchos de estos ni?os, cuyas madres escucharon m¨²sica durante su embarazo, reconocen a?os despu¨¦s melod¨ªas que oyeron durante su periodo fetal. La ciencia asegura que la m¨²sica proporciona un mejor campo de estudio para la neuroplasticidad del cerebro y si la relaci¨®n con la m¨²sica se hace no solo escuch¨¢ndola sino, sobre todo, aproxim¨¢ndose a ella a trav¨¦s del aprendizaje de un instrumento, el individuo adquiere habilidades motoras, auditivas, entiende el lenguaje musical que es diferente al lenguaje verbal, o demuestra una mayor habilidad para la lectura o las matem¨¢ticas.

Anna For¨¦s Miravalles, directora adjunta de la C¨¤tedra de Neuroeducaci¨° UB-EDU1st, asegura que ¡°la m¨²sica constituye un lenguaje universal con el que convivimos desde el nacimiento. Tiene la enorme capacidad de cambiar nuestro cerebro activando muchas regiones que intervienen en procesos motores, emocionales y cognitivos y, seguramente, ha desempe?ado un papel esencial en el desarrollo de la naturaleza social del ser humano¡±. Son diversos los estudios (S?rk?m? y Soto, 2012) que constatan que el aprendizaje musical puede incrementar el volumen de materia blanca y gris en determinadas ¨¢reas corticales y subcorticales, as¨ª como en el cerebelo, que controlan habilidades o aspectos auditivos, motores y cognitivos. Y, especialmente, tocar instrumentos resulta m¨¢s beneficioso para nuestro cerebro que escuchar m¨²sica.

La m¨²sica es un est¨ªmulo complejo que tiene la capacidad de estimular el cerebro a niveles muy diversos. En aquellos estudiantes que reciben una instrucci¨®n musical formal, la literatura cient¨ªfica apunta que poseen un mejor rendimiento acad¨¦mico. Las ¨²ltimas investigaciones realizadas con t¨¦cnicas de imagen cerebral o estudios correlacionales demuestran que este tipo de instrucci¨®n produce cambios estructurales y funcionales en el cerebro. Por ello, seg¨²n apunta Mar¨ªa Teresa Daza Gonz¨¢lez, del departamento de Psicolog¨ªa de la Universidad de Almer¨ªa, ¡°la m¨²sica se puede considerar uno de los potenciadores importantes de la neuroplasticidad cerebral¡±.

Mar¨ªa Teresa Daza Gonz¨¢lez se?ala que, desde un punto de vista cient¨ªfico, lo que le interesa sobremanera es la m¨²sica como est¨ªmulo. En este sentido, prosigue esta psic¨®loga, ¡°lo que me resulta especialmente interesante son las caracter¨ªsticas r¨ªtmicas de un patr¨®n musical. El ritmo es un aspecto musical con el que todos tenemos alg¨²n tipo de experiencia. Por ejemplo, cuando escuchamos una melod¨ªa, instintivamente, tendemos a sincronizarnos con esa m¨²sica mediante el ritmo, moviendo el pie, una mano o el cuerpo. Sincronizar con un ritmo requiere que primero tienes que ser capaz de percibirlo y a nivel de percepci¨®n es un patr¨®n complejo, con lo cual los procesos perceptivos que se ponen en marcha son ya importantes¡±. Pero, adem¨¢s, contin¨²a Mar¨ªa Teresa Daza Gonz¨¢lez, ¡°cuando se sincroniza alguna parte del cuerpo con una melod¨ªa, se inician una cantidad importante de procesos cognitivos de anticipaci¨®n, de planificaci¨®n y tambi¨¦n motores¡±.

El hecho de que cuando escuchamos una melod¨ªa seamos capaces de reconocerla se debe a que en nuestra memoria hay una huella, una experiencia previa. En el caso de los beb¨¦s, seg¨²n comenta la experta de la Universidad de Almer¨ªa, ¡°el sistema auditivo es uno de los sistemas sensoriales que se desarrolla antes durante el periodo embrionario. As¨ª, durante el periodo prenatal hay ciertas habilidades para captar est¨ªmulos auditivos y, en ese caso, tiene sentido pensar que esa estimulaci¨®n prenatal puede tener alg¨²n efecto en el periodo posnatal¡±.

Durante las etapas educativas correspondientes a Infantil y Primaria, la doctora Daza Gonz¨¢lez apunta que la m¨²sica podr¨ªa ser un potenciador de las funciones ejecutivas, que son funciones cognitivas de orden superior que permiten a las personas ser independientes, llevar a cabo una conducta regulada o adaptada socialmente. Por eso, manifiesta, ¡°la capacidad de sincronizar con la m¨²sica podr¨ªa ser un est¨ªmulo de esas funciones ejecutivas en este periodo de la poblaci¨®n infantil¡±.

En aquellos ni?os y ni?as que reciben instrucci¨®n formal en m¨²sica, se ha observado que incrementan sus habilidades en otras ¨¢reas, no solo auditivas sino tambi¨¦n no auditivas. Existe una especie de transferencia; es decir, hay una especie de entrenamiento o una experiencia musical que mejora habilidades, pero no solamente aquellas que son necesarias para percibir la m¨²sica, sino que puede transferir a otras habilidades cognitivas. Mar¨ªa Teresa Daza Gonz¨¢lez explica que ¡°ese entrenamiento con la m¨²sica como potenciador de las funciones ejecutivas, ya sean estas cognitivas y/o socioemocionales, se refleja en mayores habilidades socioemocionales de los ni?os mejorando su capacidad emp¨¢tica, su regulaci¨®n emocional, etc. La capacidad de sincronizar con la m¨²sica tambi¨¦n puede ser un potenciador de saber sincronizar o empatizar con otros, regular la conducta social para maximizar o mejorar las relaciones entre iguales¡±. Una opini¨®n que coincide con la expuesta por la directora adjunta de la C¨¤tedra de Neuroeducaci¨° UB-EDU1st, quien opina que ¡°cuando un ni?o o una ni?a aprende a tocar un instrumento musical mejora, a trav¨¦s de la pr¨¢ctica, la disciplina, la concentraci¨®n, la memoria o la capacidad auditiva que son destrezas que pueden ser muy ¨²tiles en otro tipo de aprendizajes, incidiendo de esta forma en su rendimiento acad¨¦mico general¡±. Adem¨¢s, la m¨²sica crea v¨ªnculos sociales, ¡°porque activa ¨¢reas en el cerebro que nos sirven para captar las emociones de los dem¨¢s que son imprescindibles para la comunicaci¨®n y el aprendizaje por imitaci¨®n que ha posibilitado nuestro enorme desarrollo a los seres humanos¡±.

Para que el aprendizaje de la m¨²sica a trav¨¦s de un instrumento tenga efectos beneficiosos en las funciones ejecutivas es necesario, seg¨²n la mayor¨ªa de los estudios, iniciarse en ¨¦l en edades tempranas y practicarlo durante el mayor tiempo posible a lo largo de la vida. Pero la psic¨®loga Daza Gonz¨¢lez lanza un interrogante: ¡°qu¨¦ pasa con aquellos individuos, adultos, j¨®venes o ni?os, que no es que no reciban una instrucci¨®n formal de m¨²sica, sino que son consumidores importantes de la m¨²sica porque escuchan m¨²sica, van a conciertos y en su vida est¨¢ presente la m¨²sica, aunque no sea con el aprendizaje directo de un instrumento¡±

Dados los beneficios que la m¨²sica tiene en la neuroplasticidad del cerebro, es necesario un cambio en la forma de abordar esta materia en el programa curricular de los colegios. Para la psic¨®loga Daza Gonz¨¢lez, ¡°el aprendizaje musical tendr¨ªa que iniciarse en etapas tempranas y la experiencia deber¨ªa ser una competencia m¨¢s trasversal. No es tan importante que exista una asignatura espec¨ªfica de m¨²sica como que se focalice m¨¢s en el aprendizaje del lenguaje musical. Creo que ser¨ªa m¨¢s interesante ense?arles a disfrutar de la m¨²sica. Es decir, motivarles a que exploren, a ver si son capaces de sincronizar con la m¨²sica, etc.¡±

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