Vigorexia, el trastorno de salud mental asociado al ejercicio excesivo que hace sufrir a los adolescentes
La educaci¨®n desde la infancia es fundamental para evitar patolog¨ªas asociadas con el culto al cuerpo. Para ello, conviene trasmitirles el mensaje de que el deporte es salud y no tiene como objetivo una imagen perfecta
La vigorexia o dismorfia muscular es un trastorno de salud mental que se caracteriza por la compulsi¨®n de ganar masa muscular y que afecta sobre todo a los varones entre 15 y 35 a?os. Esta enfermedad comparte similitudes con los trastornos de conducta alimentaria, como la obsesi¨®n por la imagen corporal, pero en este caso tiene que ver con el empe?o ¡°por tener un tama?o del cuerpo m¨¢s grande, fuerte y musculado¡±, explica Santos Solano, doctor en Psicolog¨ªa Cl¨ªnica y de la Salud, ...
La vigorexia o dismorfia muscular es un trastorno de salud mental que se caracteriza por la compulsi¨®n de ganar masa muscular y que afecta sobre todo a los varones entre 15 y 35 a?os. Esta enfermedad comparte similitudes con los trastornos de conducta alimentaria, como la obsesi¨®n por la imagen corporal, pero en este caso tiene que ver con el empe?o ¡°por tener un tama?o del cuerpo m¨¢s grande, fuerte y musculado¡±, explica Santos Solano, doctor en Psicolog¨ªa Cl¨ªnica y de la Salud, especialista en trastorno de la conducta alimentaria y obesidad en el centro ITEM de Madrid. Adem¨¢s, suele estar asociado a la pr¨¢ctica de ejercicio, sobre todo de fuerza, que acaba siendo adictivo. ¡°Se estima que entre los varones que practican actividades para desarrollar la musculaci¨®n afecta a un 10% de ellos y que, en la actualidad, lo padecen 20.000 personas en Espa?a¡±, a?ade el experto.
La vigorexia no es estrictamente un trastorno de conducta alimentaria (TCA), pero comparte muchas similitudes con enfermedades como la anorexia. ¡°De hecho, originalmente, se llamaba anorexia inversa, porque aparece la obsesi¨®n por la figura, tambi¨¦n hay una distorsi¨®n de la imagen corporal como en los TCA y suele afectar mucho a la interacci¨®n social, porque se prioriza ir al gimnasio o mantener una dieta estricta, y el hecho de salir con otras personas puede interferir en esa rutina r¨ªgida. As¨ª que acaba por influir a nivel f¨ªsico, psicol¨®gico y social¡±, sostiene Santos Solano.
Se?ales que alertan sobre el desarrollo de la vigorexia
Ciertas conductas pueden denotar que el adolescente est¨¢ entrando en el terreno de un trastorno de salud mental asociado con su imagen corporal, el doctor Solano menciona algunas de ellas:
- Mantener programas de entrenamientos muy r¨ªgidos, intensos y orientados al aumento del volumen muscular.
- Aparece malestar y ansiedad cuando el adolescente no puede llevar a cabo su din¨¢mica habitual de actividad f¨ªsica.
- Cambios en el estilo de vida, que implican distanciamiento de muchas actividades cotidianas, como en la din¨¢mica de las relaciones sociales.
- Rigidez y obsesi¨®n con la dieta para eliminar la grasa y ganar musculatura.
- Suele aparecer el consumo de hormonas anabolizantes para fomentar el desarrollo muscular, lo que conlleva un elevado riesgo para la salud, que crea un circuito adictivo.
Prevenir la vigorexia en adolescentes
La educaci¨®n desde la infancia es fundamental para evitar trastornos de salud mental asociados con el culto al cuerpo. Para ello, conviene trasmitirles el mensaje de que ¡°el ejercicio f¨ªsico es salud y no tiene como objetivo esculpir un cuerpo perfecto. En este sentido, ayudan las actividades deportivas, grupales o l¨²dicas, y tener la supervisi¨®n de un entrenador profesional que est¨¦ capacitado para saber cu¨¢ndo una persona comienza a desarrollar una obsesi¨®n, que sepa ajustar el ejercicio a las necesidades y capacidades del adolescente¡°, incide Solano. A ello, el doctor suma el hecho de que es fundamental que los j¨®venes aprendan a seleccionar y ser cr¨ªticos con el contenido que consumen en las redes sociales, ¡°que les bombardean sobre qu¨¦ comer o c¨®mo debe ser su cuerpo¡±.
Los hombres tambi¨¦n experimentan la presi¨®n por lograr un determinado aspecto f¨ªsico que se acerque a los c¨¢nones existentes en la sociedad. Se prioriza cada vez m¨¢s el ¡°parecer y no el ser para conquistar el ¨¦xito y la aprobaci¨®n de los dem¨¢s¡±, explica Tristana Su¨¢rez, psic¨®loga y terapeuta Gestalt. ¡°Esto pasa a ser un problema cuando la persona pierde su libertad en cuanto a sus pensamientos y percepciones¡±, prosigue la experta, ¡°que pasan a ser cada vez m¨¢s obsesivos, limitados y r¨ªgidos. Se traducen en una conducta estereotipada, orientada solo a aumentar el tiempo y eficacia de los entrenamientos, un comportamiento similar a la adicci¨®n a las drogas¡±.
El perfil del adolescente vigor¨¦xico sol¨ªa caracterizarse por tener experiencias previas de ¡°verg¨¹enza o ridiculizaci¨®n sobre su aspecto f¨ªsico y el logro de musculatura y fuerza era una forma de compensar y resarcirse de aquellas vivencias¡±, sostiene la psic¨®loga. Seg¨²n informa, en la actualidad, ya no es necesario que alguien externo venga a humillar o burlarse, porque ya casi todos los adolescentes lo hacen por s¨ª mismos al compararse constantemente con las im¨¢genes que consumen y reciben diariamente: ¡°Como casi siempre, la frontera que empieza a indicar peligro tiene que ver con la cantidad y frecuencia. Por ello, conviene animar al adolescente a hacerse preguntas como cu¨¢ntas veces al d¨ªa piensa en su forma f¨ªsica; cu¨¢nto tiempo diario y semanal dedica a ello o si aparecen sentimientos de culpa cuando no cumple con las exigencias de su entrenamiento f¨ªsico¡±.
El adolescente vigor¨¦xico sufre, porque lo que comienza por provocar un ¡°intenso sentimiento de poder y control se redirige hacia una tiran¨ªa de la que ya no es f¨¢cil escapar¡±, incide Su¨¢rez. La persona se identifica tanto con ese tirano interior que apenas puede percibir el malestar y el da?o que se va produciendo en su vida, donde se vive en una constante insatisfacci¨®n, imposible de acallar por m¨¢s esfuerzo que se haga: ¡°El mejor ant¨ªdoto para entrar en esta din¨¢mica es el amor incondicional de los adultos de su entorno, como sus padres. Se trata de brind¨¢rselo por ser tal como son, porque la l¨®gica que subyace en este tipo de trastornos, es que cuando consiga el cuerpo perfecto le querr¨¢n o se querr¨¢. Esas son las condiciones; esa es la trampa¡±.
Puedes seguir Mamas & Papas en Facebook, Twitter o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter quincenal.