La toma de la Comisi¨®n de Derechos Humanos de M¨¦xico exhibe las carencias en la ayuda a las v¨ªctimas
Colectivos feministas se suman a las madres que protestan por la violencia y ocupan las oficinas de la capital. Las mujeres se fotografiaron en los despachos y colgaron del balc¨®n los cortes de carne hallados en las instalaciones
Desde el jueves, colectivos feministas de Ciudad de M¨¦xico ¡ªo colectivas, como se autodenominan¡ª mantienen bajo control la sede de la Comisi¨®n Nacional de Derechos Humanos (CNDH), en el centro de la capital. Los trabajadores no pueden entrar y los colectivos quieren convertir la instalaci¨®n en un refugio para v¨ªctimas de violencia.
Yesenia Zamudio, una de las mujeres que mantiene tomada la CNDH, resumi¨® en entrevista con la periodista Carmen Aristegui el hartazgo que rodea la protesta: ¡°Estamos pidiendo una vida libre de violencia. Somos tantas las mujeres que hemos vivido violencia que...
Desde el jueves, colectivos feministas de Ciudad de M¨¦xico ¡ªo colectivas, como se autodenominan¡ª mantienen bajo control la sede de la Comisi¨®n Nacional de Derechos Humanos (CNDH), en el centro de la capital. Los trabajadores no pueden entrar y los colectivos quieren convertir la instalaci¨®n en un refugio para v¨ªctimas de violencia.
Yesenia Zamudio, una de las mujeres que mantiene tomada la CNDH, resumi¨® en entrevista con la periodista Carmen Aristegui el hartazgo que rodea la protesta: ¡°Estamos pidiendo una vida libre de violencia. Somos tantas las mujeres que hemos vivido violencia que estamos hartas. Hartas de no ser atendidas, de ser tratadas de limosneras. Queremos que nos vean¡±.
Como trasfondo de la toma de la comisi¨®n figura la violencia machista en el pa¨ªs. Cada a?o, miles de mujeres son asesinadas en M¨¦xico. El a?o pasado fueron m¨¢s de 3.000. Esta situaci¨®n ha provocado una movilizaci¨®n creciente de la sociedad, sobre todo de las mujeres. El pasado 8 de marzo, la capital vivi¨® una marcha multitudinaria. Fueron miles de mujeres, una movilizaci¨®n que no se ve¨ªa desde las marchas en protesta por la desaparici¨®n de los 43 estudiantes de Ayotzinapa en 2014.
Las llamativas im¨¢genes del interior mostraron a varias mujeres sentadas en los despachos oficiales junto a pintadas con frases como ¡°ni perdonamos ni olvidamos¡±. En la toma del edificio, las manifestantes encontraron en el refrigerador generosos cortes de carne, que exhibieron en el balc¨®n del edificio como gesto de suntuosidad de la Comisi¨®n. La instituci¨®n respondi¨® alegando que la carne encontrada corresponde al comedor de los trabajadores.
El presidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador ha dicho sobre el tema que est¨¢ en contra de la violencia y ha criticado que se ridiculizara la imagen de Francisco I. Madero en uno de los cuadros encontrados. ¡°Quienes eso hacen o no conocen la historia (...) o son conservadores¡±, ha dicho este lunes durante su habitual conferencia de prensa. ¡°Entiendo que hay mucho dolor (...) pero la violencia no es el camino¡±, ha a?adido.
L¨®pez Obrador ha defendido la actuaci¨®n de la titular de la CNDH, Rosario Ibarra, de quien ha dicho que ¡°no es una acad¨¦mica¡± y ha recordado su historial de lucha durante la b¨²squeda de su hermano desparecido. El mandatario ha asegurado que las mujeres no ser¨¢n desalojadas de la sede para ¡°no caer en la tentaci¨®n¡± y ¡°porque no somos iguales¡±. Pero se defendi¨® diciendo que ¡°cuando nosotros est¨¢bamos en la oposici¨®n nunca actuamos as¨ª y enfrentamos cosas muy fuertes¡±.
Zamudio, madre de una joven asesinada, respondi¨® a L¨®pez Obrador: ¡±Es rid¨ªculo que compare nuestra lucha con la imagen de ese se?or (Francisco I. Madero). Esta no es la lucha contra el porfiriato, es una lucha de mujeres por una vida libre de violencia¡±.
Otro grupo de mujeres en la CNDH
Adem¨¢s de los colectivos feministas, en la sede de la Comisi¨®n hay otro grupo de mujeres, familiares de v¨ªctimas de la violencia. Una de ellas es Mar¨ªa Icela Valdez, originaria de Reynosa, Tamaulipas. El hijo de Valdez desapareci¨® en Reynosa en 2014. ¡°Nosotras somos 10¡±, explica la mujer, ¡°llegamos aqu¨ª el jueves, para apoyar a una compa?era de San Luis Potos¨ª, que hab¨ªa venido a pedir justicia por su hijo asesinado¡±. Valdez se refiere a Silvia Castillo.
Todo comenz¨® el mi¨¦rcoles pasado, cuando Silvia Castillo y una compa?era de San Luis Potos¨ª, Marcela Alem¨¢n, llegaron a la oficina de la comisionada para los Derechos Humanos, Rosario Ibarra, para pedir apoyo en los casos de sus hijos. Al hijo de Castillo lo hab¨ªan asesinado en 2013 y a la hija de Alem¨¢n la violaron cuando ten¨ªa cuatro a?os. Las dos se reunieron con funcionarios de la comisi¨®n, pero las reuniones, por infructuosas, molestaron a las dos mujeres. Ellas decidieron encadenarse en la sala de juntas como protesta. Alem¨¢n lleg¨® a amarrarse a una silla para que le hicieran caso.
Valdez lleg¨® a la CNDH al d¨ªa siguiente. Ella y otras 20 v¨ªctimas de la violencia en el pa¨ªs mantienen un plant¨®n desde febrero frente a las oficinas de la Comisi¨®n Estatal de Atenci¨®n a V¨ªctimas (CEAV), tambi¨¦n en Ciudad de M¨¦xico. Este a?o, el Gobierno anunci¨® una reducci¨®n sustancial en el presupuesto de la CEAV. En la pr¨¢ctica, explica Valdez, eso ha significado un par¨®n en los procesos de justicia por los que llevan a?os peleando. En su caso, el recorte supone que familiares de desaparecidos en Tamaulipas no puedan continuar con la b¨²squeda de sus hijos, hermanos, etc¨¦tera.
En medio de la indignaci¨®n por la falta de atenci¨®n, ambas madres contactaron con los colectivos feministas de la capital, que llegaron a la sede de la CNDH el jueves. A la vez, la protesta de Alem¨¢n y Castillo espole¨® a la CNDH. El jueves, una funcionaria de la comisi¨®n se traslad¨® con Alem¨¢n y su esposo de vuelta a San Luis Potos¨ª, con la promesa de ayudarles en la investigaci¨®n del caso de su hija y apoyarles a salir del Estado.
Mientras tanto, las feministas decidieron ocupar la sede de la comisi¨®n con Castillo en su interior. Valdez explica que Castillo se encontraba muy mal de ¨¢nimo. Como son compa?eras del plant¨®n de la CEAV, Valdez y otros familiares de desaparecidos llegaron a la CNDH a apoyar a Castillo. Eso fue el mismo jueves.
El viernes, Castillo sali¨® de la CNDH, con la promesa de ayuda inminente por parte de funcionarios de la comisi¨®n. All¨¢ adentro se quedaron Valdez y otras nueve personas. Desde entonces, su intenci¨®n es salir, pero Valdez denuncia que la CNDH trata de criminalizarlas a ellas ¡ªlas que llegaron del plant¨®n de la CEAV¡ª de todo lo que ha pasado en la sede de la instituci¨®n: las pintadas, los destrozos, etc¨¦tera. Ana Mar¨ªa Maldonado, madre de un joven desaparecido en Ciudad de M¨¦xico en 2010, secunda a Valdez: ¡°Queremos que nos deslinde de todo esto la CNDH. No somos nosotras las que tomamos las instalaciones. Por eso no salimos, porque no queremos que nos criminalicen¡±.
Por su parte, la CNDH ha emitido un comunicado este lunes, en que se muestra abierta a ¡°dialogar¡± y a ¡°encontrar un acuerdo satisfactorio para ambas partes¡±. La CNDH a?ade que ¡°se apoya tanto a las se?oras Silvia y Marcela, como se est¨¢ trabajando en los compromisos que se tienen con el resto del grupo de v¨ªctimas que se encontraban en el plant¨®n de la CEAV¡±.