Diana S¨¢nchez Barrios, una vida en la trinchera del centro hist¨®rico de Ciudad de M¨¦xico
El atentado contra la lideresa de comerciantes informales de la capital a?ade un cap¨ªtulo m¨¢s a la sangrienta disputa por el control de espacios de venta y los r¨¦ditos que dejan. El Gobierno local anuncia m¨¢s polic¨ªas en la zona del ataque
El ataque a balazos este jueves contra Diana S¨¢nchez Barrios en Ciudad de M¨¦xico ha prendido las alarmas en el Gobierno de la capital. Lideresa de comerciantes informales, diputada suplente, activista, personaje pol¨¦mico donde los haya, S¨¢nchez Barrios se salv¨® de milagro y permanece ingresada en el hospital, sedada, como ha informado su hermana Silvia, este viernes. Entre la tarde del jueves y la ma?ana del viernes, las autoridades de la capital han comparecido dos veces ante la prensa para dar detalles del caso y anunciar operativos en el centro hist¨®rico, lugar del ataque. En el ¨²ltimo, este viernes, la jefa de Gobierno, Clara Brugada, de Morena, ha anunciado m¨¢s polic¨ªas y c¨¢maras de seguridad en la zona.
Preocupa un atentado as¨ª, ocurrido en una de las calles m¨¢s transitadas del centro, que se solapa adem¨¢s con el asesinato a balazos de una abogada penalista, a plena luz del d¨ªa, tambi¨¦n el jueves, en un cruce de la bohemia colonia Roma, tanto o m¨¢s concurrido que el anterior. La temeridad de los atacantes interpela el discurso de las autoridades de la capital ¨Clas de ahora y las anteriores, todas del mismo partido, muchas del mismo equipo¨C sobre la reducci¨®n de la violencia homicida en la ciudad, y los delitos de alto impacto. Disminuidas las estructuras de las viejas mafias, caso singular de la Uni¨®n Tepito, la pregunta ahora es si su existencia o no repercute de alguna forma en las capacidades y necesidades del crimen para organizar y perpetrar este tipo de ataques.
La agresi¨®n contra S¨¢nchez Barrios ocurri¨® como ocurren tantos otros en el centro. Un sicario con capucha y cubrebocas se acerc¨® por detr¨¢s a la mujer, cuando caminaba por la calle Motolinia, hacia la avenida 5 de mayo, a tres cuadras del z¨®calo, coraz¨®n pol¨ªtico y cultural de la capital. Primero dispar¨® contra sus dos acompa?antes. Uno iba caminando y el otro a bordo de una motocicleta. S¨¢nchez Barrios corri¨® a refugiarse en un local, un supermercado de productos m¨¦dicos que hace esquina. Seguro de que sus acompa?antes estaban malheridos, el sicario la sigui¨® a la carrera. En los v¨ªdeos que han trascendido del ataque, se ve c¨®mo el asesino entra al local y dispara. Luego se va corriendo a la esquina contraria, se sube a una moto que le espera, y huye con el conductor por 5 de mayo.
S¨¢nchez Barrios qued¨® malherida. Su madre, Alejandra Barrios, jefa del clan familiar, ha dicho este viernes en una entrevista radiof¨®nica que Diana recibi¨® cinco disparos. Su hermana Silvia ha dicho que ha necesitado cuatro cirug¨ªas. De los dos hombres, al parecer los dos familiares, uno ha muerto y el otro sigue en el hospital. De los sicarios solo se sabe, de momento, que huyeron rumbo al z¨®calo. La moto en que marcharon apareci¨® horas m¨¢s tarde del ataque en un conjunto de edificios de viviendas, en la colonia Jard¨ªn Balbuena, en la alcald¨ªa Venustiano Carranza, en el oriente de la capital. Un recorrido de unos 20 minutos en moto.
El enredado clan familiar
Cerrada la explicaci¨®n de los hechos, se impone la b¨²squeda de un motivo. Figura controvertida, vinculada a la Uni¨®n Tepito, grupo que ella misma denunci¨®, S¨¢nchez Barrios ha protagonizado una buena cantidad de episodios pol¨¦micos en la capital, el ¨²ltimo, su arresto, en 2021, por delitos de amenazas, robo en pandilla y extorsi¨®n. La mujer sali¨® en diciembre de ese mismo a?o. En el libro Las Siete Mafias Chilangas, el periodista Alberto Cuenca explica que ese arresto tuvo origen en una denuncia de una prima de la mujer, Claudia Morales, que en noviembre de 2020 acus¨® al clan familiar de destrozar el establecimiento de un hermano suyo, en el centro. Al parecer, el ataque contra el local del hermano era la respuesta a la negativa a pagarle a los Barrios una cuota, una extorsi¨®n.
Este viernes, la matriarca del clan, Alejandra Barios, una mujer que empez¨® vendiendo frutas en el centro hace d¨¦cadas, ha acusado a la propia Morales de organizar el intento de asesinato de su hija. ¡°Ella¡±, ha dicho de Morales, su sobrina, ¡°fue la [autora] intelectual, porque fue a ver a una de las bandas estas para pedirles el apoyo para que mataran a mi hija¡±, ha a?adido. Barrios se refiere aqu¨ª a grupos delincuenciales crecidos al calor de la disputa entre las viejas mafias del centro, la Uni¨®n Tepito y la Fuerza Anti Uni¨®n, combatidas estos a?os por las autoridades.
La misma Barrios ha explicado que aunque se ha detenido a muchos l¨ªderes de estos grupos, ¡°los muchachos que dejaron siguen. Entonces, est¨¢ invadido de muchachitos que los utilizan con un dinero y les dan una moto, les ense?an a tirar y todo¡±. Seg¨²n Barrios, Morales habr¨ªa organizado el intento de asesinato de su prima porque su hijo y su esposo est¨¢n en la c¨¢rcel, acusados de violaci¨®n y acoso sexual. ¡°Ellos piensan que tanto Diana como yo fuimos quienes los denunciamos ante las autoridades¡±, ha dicho Alejandra Barrios. Las autoridades no han dado detalles sobre las posibles motivaciones de los atacantes.
La familia Barrios es una de las m¨¢s poderosas del centro hist¨®rico, su trinchera desde hace d¨¦cadas. En el libro referido arriba, Cuenca detalla que el clan controlaba en 2021 a entre 7.000 y 9.000 comerciantes ambulantes, ¡°repartidos en los per¨ªmetros A y B del Centro Hist¨®rico, Tepito, La Merced, la Lagunilla, la explanada del metro Insurgentes, la Condesa, la Roma, las inmediaciones del Centro M¨¦dico y el metro Chilpancingo¡±. Adem¨¢s, manejan entre 10 y 12 plazas comerciales en el centro, la principal de ellas Plaza Tacuba, ¡°b¨²nker familiar¡±.
Sobre Diana S¨¢nchez Barrios, Cuenca explica que sus dominios, entonces, comprend¨ªan ¡°el control de ambulantes toreros ¨Cpersonas que venden desde su veh¨ªculo¨C en Eje Central, desde Art¨ªculo 123 a la avenida Ju¨¢rez; en Madero, desde Eje Central al Portal de Mercaderes; Palma, de Cuba a Madero; y Tacuba, de Isabel la Cat¨®lica a Bol¨ªvar. Tambi¨¦n domina el comercio en la acera sur de avenida San Cosme, de Rosas Moreno a Insurgentes y en Eje 1 Norte, esquina con Insurgentes, adem¨¢s de puntos de venta de toreros en la Alameda, Paseo de la Reforma, la explanada del metro Insurgentes, Doctor Mora y hasta en el Z¨®calo capitalino¡±.
La madeja de hilos criminales del centro, donde grupos de delincuentes interaccionan con l¨ªderes de comerciantes por el cobro de piso, la extorsi¨®n, en una din¨¢mica vol¨¢til, ilumina parte del contexto del ataque. Para completar la imagen hay que mirar al andamiaje de cobertura institucional levantada al interior de las instituciones de Gobierno, la polic¨ªa local, la Subsecretar¨ªa de Programas de Alcald¨ªas y Reordenamiento de la V¨ªa P¨²blica del gobierno de Ciudad de M¨¦xico, y el equipo de Gobierno e inspectores de v¨ªa p¨²blica de la alcald¨ªa Cuauht¨¦moc.