Filas y filias
Perfectas filitas de personajes que son personas, muchos de ellos murmuran en silencio los nombres de todos los desaparecidos y enfermos, las muertas y los perdidos que tambi¨¦n se fueron formando en fila
Se forman en filas que a veces conducen al p¨¢rrafo o a una misteriosa puerta a la Nada con may¨²scula. Son personajes pendientes que se alinean en cuadernos y libretas, diminutos o al menos, parecen microsc¨®picos aunque detallados: est¨¢ la Gordi entra?able de camisi¨®n, el Encuerado de siempre, un militar retirado y el vendedor de licuadoras; est¨¢ el ranchero que va detr¨¢s de un deportista y la modelo celebrada en revistas de relojes, el ni?o insolente y la dama de guantes, el m¨¦dico en v¨ªas de consulta y el arquitecto desempleado. Los he pintado en papel y tela desde hace a?os y a menudo recurr...
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Se forman en filas que a veces conducen al p¨¢rrafo o a una misteriosa puerta a la Nada con may¨²scula. Son personajes pendientes que se alinean en cuadernos y libretas, diminutos o al menos, parecen microsc¨®picos aunque detallados: est¨¢ la Gordi entra?able de camisi¨®n, el Encuerado de siempre, un militar retirado y el vendedor de licuadoras; est¨¢ el ranchero que va detr¨¢s de un deportista y la modelo celebrada en revistas de relojes, el ni?o insolente y la dama de guantes, el m¨¦dico en v¨ªas de consulta y el arquitecto desempleado. Los he pintado en papel y tela desde hace a?os y a menudo recurro al intento de nombrarlos, asignarles un zodiaco y por lo menos filiaci¨®n para que las filas reflejen filias y nutran futuros cuentos cortos o cuent¨ªnimos o relatos que pueden insertarse en posibles novelas.
En los pasados meses han empezado a tomar distancias (en cent¨ªmetros o cuadr¨ªculas de libretas al azar) y se escucha cuando se queja alg¨²n paracaidista del panadero que no puede evitar tocarle la espalda o la secretaria distra¨ªda que va lim¨¢ndose las u?as y llega a rozar el brazo del banquero que va leyendo su diario. Se percibe un generalizado af¨¢n por respetar el uso de cubrebocas, mascarilla, barbijo en clara vena de evitar contagios o recibir estornudos o diminutas part¨ªculas del virus que tambi¨¦n ha ido tosiendo entre dibujitos aleatorios que son veh¨ªculos para relatos y as¨ª, narrar la gran historia que los envuelve.
Bien visto, son met¨¢fora de lo que se ve en la nueva normalidad que no es otra cosa que la realidad aumentada donde el video y su soundtrack conforman una lenta sucesi¨®n de incertidumbres e inc¨®gnitas, representadas en la larga fila donde nos formamos todos para llegar a la puerta invisible de qui¨¦n sabe que umbral o bien al p¨¢rrafo donde nos hemos de editar a nosotros mismos de todas las erratas que estorben el paso y aligerar la p¨¢gina de cada d¨ªa con lo que cada quien tiene que decir al pr¨®jimo o pr¨®ximo en esta levitaci¨®n colectiva que se forma en perfectas filitas de personajes que son personas, muchos de ellos murmurando en silencio los nombres de todos los desaparecidos y enfermos, las muertas y los perdidos que tambi¨¦n se fueron formando en fila, uno tras otro hasta sumar m¨¢s de 50.000 con nombres y apellidos, allende el posible contagio para confirmar o recordarnos a todos la n¨®mina infinita de todas las vidas.