El PRIAN al rescate
Los dos partidos est芍n en su derecho de poner a un lado sus diferencias. Lo cuestionable de su alianza es que no hay una visi車n m赤nima para responder a los problemas que llevaron a L車pez Obrador al poder
El PRI y el PAN han decidido ir juntos en muchas candidaturas electorales del pr車ximo a?o para evitar, afirman ellos, que el partido en el poder gane las 15 gubernaturas o la mayor赤a en el Congreso de la Uni車n.
A muchos puristas esta alianza les ha resultado un engendro ideol車gico y una traici車n a los principios fundantes, particularmente en el caso del PAN, el partido de los sectores conservadores cuya raz車n de ser en buena medida era oponerse al PRI. Sin embargo, con cierta l車gica los panistas podr赤an responder que ellos siguen en la misma l赤nea, combatiendo a las viejas banderas prii...
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El PRI y el PAN han decidido ir juntos en muchas candidaturas electorales del pr車ximo a?o para evitar, afirman ellos, que el partido en el poder gane las 15 gubernaturas o la mayor赤a en el Congreso de la Uni車n.
A muchos puristas esta alianza les ha resultado un engendro ideol車gico y una traici車n a los principios fundantes, particularmente en el caso del PAN, el partido de los sectores conservadores cuya raz車n de ser en buena medida era oponerse al PRI. Sin embargo, con cierta l車gica los panistas podr赤an responder que ellos siguen en la misma l赤nea, combatiendo a las viejas banderas priistas del presidencialismo y el estatismo a ultranza que ahora ya no son enarboladas por el PRI sino por Morena, el partido en el poder. Y por lo dem芍s, durante los 迆ltimos a?os el PRI y el PAN transitaron a una convergencia ideol車gica que termin車 por desdibujar sus diferencias. Por un lado, el PRI se acerc車 al PAN a medida que se ech車 en brazos de un modelo que privilegiaba al sector privado; y por otro, la manera de gobernar del panismo se convirti車 en una copia del PRI moderno en cuanto lleg車 a Los Pinos. Lo cierto es que hoy en d赤a los l赤deres de esos dos partidos parecen intercambiables, como tambi谷n lo eran sus dos candidatos a la presidencia hace dos a?os.
Esta convergencia ha sido denunciada por el lopezobradorismo como una demostraci車n fehaciente de alg迆n tipo de complicidad vergonzante. No coincido; por un lado, la l車gica pol赤tica conduce a asumir males menores frente a un mal mayor. Solo as赤 se explica que la izquierda, y quiero pensar que una parte del lopezobradorismo lo sigue siendo, haya asumido una alianza con el PES, el partido de los cristianos con tal de llevar a AMLO al poder en 2018. PAN y PRI est芍n en todo su derecho de poner a un lado sus diferencias, cada vez menores, para enfrentar lo que consideran un enemigo may迆sculo o, para ponerlo en sus t谷rminos, evitar el cambio de r谷gimen que el Gobierno est芍 en v赤as de instalar.
Lo cuestionable de la alianza entre el PRI y el PAN no es el hecho de que lo hagan sino la forma. Es una convergencia para oponerse, para estorbar, para evitar, para desandar. No hay la construcci車n de una visi車n m赤nima en com迆n, o peor a迆n por separado, para responder a los problemas que llevaron a L車pez Obrador al poder: injusticia social, indignaci車n ante la corrupci車n, inseguridad p迆blica, riesgo de inestabilidad pol赤tica, oposici車n a un modelo que gener車 desigualdad regional, sectorial y social. La pretensi車n del PRI y el PAN de retomar el poder sin el menor asomo de lavarse la cara, sin reflexi車n autocr赤tica y mucho menos una propuesta constructiva para paliar el descontento que generaron, entra?a de entrada un problema 谷tico. Cabr赤a preguntarse cu芍l es la calidad moral de quien, a falta de virtudes propias, concentra su argumento de venta en los defectos de su rival.
Pero adem芍s de ser moralmente incorrecto apostar exclusivamente por el descontento (fomentarlo y ampliarlo, como lo est芍 haciendo) sin ofrecer otra alternativa que regresar al estado de cosas que condujo a su propio desplome, podr赤a derivar en una crisis pol赤tica insondable.
El objetivo expl赤cito es conseguir mayor赤a en el Congreso para estar en condiciones de detener las reformas de la 4T, paralizar los cambios que intenta el presidente, modificarle sus presupuestos. Si detr芍s de esta resistencia hubiera una propuesta alternativa podr赤a entenderse, pero utilizar el andamiaje institucional esencialmente para obstaculizar, puede provocar males mayores. Despu谷s de todo, lo que est芍 intentando hacer L車pez Obrador es responder a las expectativas de la poblaci車n m芍s necesitada que, en este momento, equivale a la mayor赤a de los mexicanos. Se podr赤a argumentar que intenciones no son realidades, y que las acciones del Gobierno no est芍n consiguiendo el beneficio de las mayor赤as. Quiz芍, pero lo cierto es que ese M谷xico indignado que vot車 en 2018 percibe que el presidente habla en su nombre y eso es lo que mantiene sus expectativas y, en buena medida conjura, todav赤a, el riesgo de un estallido social.
L車pez Obrador es la respuesta a un descontento real y cada vez m芍s preocupante; por ello es que propiciar el fracaso de las soluciones que intenta AMLO para responder a ese descontento supone un enorme riesgo, a menos que se ofrezca una alternativa viable, pero esta no existe. Se dice que la 4T gobierna solo para una parte de los mexicanos e ignora al resto, a las clases medias y superiores, y puede ser cierto. Frente a la urgencia, el gobierno ha planteado muy claramente sus prioridades. Pero ahora la oposici車n estar赤a haciendo algo similar aunque de signo contrario: al proponerse detener los cambios que, al menos en el papel, favorecen a las mayor赤as y pugnar por un regreso al modelo anterior, estar赤an desde?ando al M谷xico que exige esos cambios.
Si el PRIAN fracasa en su intento de conseguir la mayor赤a del Congreso el pr車ximo verano, simplemente confirmar芍 que su aritm谷tica entre anti y pro lopezobradorismo no fue bien calculada. Pero si el PRIAN tiene 谷xito y en efecto convierte al Congreso en la fuerza que paralice las propuestas de la 4T, como lo sostienen tantos paladines de la democracia, la pregunta es qu谷 va a pasar con las mayor赤as desencantadas. Siempre hay el riesgo de que frente a la oposici車n institucional, AMLO recurra al apoyo popular para desafiarla, con el consiguiente riesgo de turbulencia e inestabilidad pol赤tica. Pero todav赤a existe un peor escenario: que con el fracaso de la 4T nos quedemos sin respuestas institucionales o cauces pol赤ticos para la exasperaci車n social, para esa crispaci車n que exige un cambio. Hay muchos incendios desatados en la pradera, detener al bombero porque no coincidimos con su m谷todo es absolutamente insensato, a menos que ofrezcamos otra manera de responder al fuego y eso no lo estamos viendo.