Guerras con Eurasia
Puede que entre los efectos del confinamiento est¨¦ un aumento de las contradicciones y la incapacidad de verlas
El confinamiento produce desenfoque: un desquiciamiento relacionado con una p¨¦rdida desgarradora y sin despedidas, con el encierro y la distancia, con la incertidumbre y el miedo, con expectativas suspendidas o arrasadas. Puede que entre sus efectos est¨¦ un aumento de las contradicciones y la incapacidad de verlas: es algo que ocurre si solo puedes andar en c¨ªrculos, como cuando descubres tu huella en la playa de una isla desierta y te preguntas de qui¨¦n es.
David Jim¨¦nez Torres ha se?alado la paradoja de un Gobierno que combina una gran debilidad parlamentaria con una performance de po...
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El confinamiento produce desenfoque: un desquiciamiento relacionado con una p¨¦rdida desgarradora y sin despedidas, con el encierro y la distancia, con la incertidumbre y el miedo, con expectativas suspendidas o arrasadas. Puede que entre sus efectos est¨¦ un aumento de las contradicciones y la incapacidad de verlas: es algo que ocurre si solo puedes andar en c¨ªrculos, como cuando descubres tu huella en la playa de una isla desierta y te preguntas de qui¨¦n es.
David Jim¨¦nez Torres ha se?alado la paradoja de un Gobierno que combina una gran debilidad parlamentaria con una performance de poder absoluto. Adem¨¢s, se confunden interesadamente los argumentos t¨¦cnicos con la conveniencia pol¨ªtica. Las decisiones se camuflan primero con ciencia y luego con moralismo. Hay llamamientos grandilocuentes a la colaboraci¨®n entre partidos y la oposici¨®n descubre los planes en la prensa. Tras su ret¨®rica combativa, el PP revela su carencia de propuestas alternativas y una conciencia paralizante de su escasez de maniobra. El partido de orden reivindica pizzas y coca-cola: seguro que los ni?os est¨¢n m¨¢s contentos con eso que con una ensalada, dicen. A la vez, se reprocha intransigencia a una fuerza que vota a favor del estado de alarma. El centralismo encuentra defensores inesperados, partidarios de la unidad se alegran de que haya competencias transferidas y quienes se oponen a la solidaridad entre comunidades aut¨®nomas critican el ego¨ªsmo de otros pa¨ªses europeos.
Pero es a¨²n m¨¢s pintoresco el comportamiento de la extrema derecha y la extrema izquierda. Una parte de la izquierda proclama que en la telebasura y el examen de la vida privada ¡ªla forma m¨¢s b¨¢sica del control social¡ª se encuentra la clave para derrotar al fascismo o a los que nos caen mal, que m¨¢s o menos es lo mismo. Quiz¨¢ lo crean de forma ir¨®nica o quiz¨¢ no: es probable que ya no reconozcan la diferencia entre una cosa u otra. Entretanto Vox, una formaci¨®n nost¨¢lgica del franquismo, reivindica a George Orwell. El autor de 1984, que vino a Espa?a para combatir al fascismo, fue herido por una bala franquista y estuvo a punto ser asesinado por los comunistas, escribi¨®: ¡°Lo que de verdad da miedo del totalitarismo no es que cometa atrocidades, sino que ataca el concepto de verdad objetiva: pretende controlar tanto el pasado como el futuro¡±. Pero tampoco debemos darle demasiada importancia. Al fin y al cabo, siempre hemos estado en guerra con Eurasia. @gascondaniel