La mano dura de L¨®pez Obrador
Sin tropezones y a pasos agigantados avanza una transformaci¨®n en la forma de recaudar impuestos corporativos en M¨¦xico
Ante la mirada imp¨¢vida de grandes empresarios, el agravio de despachos fiscales y la indignaci¨®n de la plutocracia mexicana, la m¨¢s importante transformaci¨®n fiscal de las ¨²ltimas d¨¦cadas avanza en silencio, pero sin recato. L¨®pez Obrador, el jefe de un Estado que es la decimosegunda econom¨ªa m¨¢s grande del mundo pero que recauda menos que el 75% de los pa¨ªses, ha apostado a cambiar la situaci¨®n. Lo celebro.
El presidente busca aumentar la recaudaci¨®n fiscal siguiendo una estrategia tan simple que parece ingenua: cobrar. No habr¨¢ cambios legales, ni nuevos impuestos. Las tasas permanec...
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Ante la mirada imp¨¢vida de grandes empresarios, el agravio de despachos fiscales y la indignaci¨®n de la plutocracia mexicana, la m¨¢s importante transformaci¨®n fiscal de las ¨²ltimas d¨¦cadas avanza en silencio, pero sin recato. L¨®pez Obrador, el jefe de un Estado que es la decimosegunda econom¨ªa m¨¢s grande del mundo pero que recauda menos que el 75% de los pa¨ªses, ha apostado a cambiar la situaci¨®n. Lo celebro.
El presidente busca aumentar la recaudaci¨®n fiscal siguiendo una estrategia tan simple que parece ingenua: cobrar. No habr¨¢ cambios legales, ni nuevos impuestos. Las tasas permanecer¨¢n id¨¦nticas. La apuesta de L¨®pez Obrador es llana y concreta: se har¨¢ que quien debe m¨¢s de 8 millones de pesos anuales al fisco pague lo que debe o se atenga a ir a prisi¨®n. Mano dura.
Deber 8 millones de pesos al fisco no es cosa f¨¢cil. Al trabajador mexicano promedio le tomar¨ªa 94 a?os ahorrar dicha cantidad si no se gastara un solo peso de su sueldo. La esperanza de vida es de 75.
La apuesta de L¨®pez Obrador es sencilla pero muy heterodoxa. Existe un consenso entre expertos y fiscalistas de ambos lados del espectro ideol¨®gico de que aumentar la recaudaci¨®n requiere, no solo cobrar, sino reformar el c¨®digo fiscal. A la derecha, se piensa que la ¨²nica manera es imponer impuestos a alimentos y medicinas. A la izquierda, se habla de aumentar las tasas impositivas que pagan los ultra-ricos.
En este texto descifro la l¨®gica fiscal de L¨®pez Obrador y explico por qu¨¦ debe ser tomada m¨¢s en serio de lo que parece. Describo con detalle las herramientas que est¨¢ utilizando para cobrar y sus impresionantes resultados inmediatos. Hablo de las limitantes legales de su modelo, pero tambi¨¦n de la exquisita superioridad narrativa y pol¨ªtica de sus planes. Explico lo que estimo ser¨¢n sus siguientes pasos y las principales tentaciones que deber¨¢ sortear para tener ¨¦xito.
La l¨®gica
La teor¨ªa de L¨®pez Obrador, de que no es necesario aumentar impuestos sino recaudar los existentes, no es del todo descabellada. En M¨¦xico, cada a?o se evaden 221 mil millones de pesos de Impuesto Sobre la Renta (ISR) y 215 mil millones de pesos de impuesto al valor agregado (IVA). Con lo evadido el sistema de salud podr¨ªa ser 66% m¨¢s grande y se podr¨ªa m¨¢s que duplicar el n¨²mero de trabajadores de la salud en el Instituto Mexicano del Seguro Social.
En ciertas ¨¢reas la evasi¨®n se ha vuelto la norma. Entre los mexicanos con m¨¢s de una casa, el 73% cobra arrendamiento sin pagar impuestos. Esto equivale a p¨¦rdidas por 27 mil millones de pesos, lo suficiente para construir 15 hospitales generales. Adem¨¢s, M¨¦xico recauda menos impuesto predial que para¨ªsos fiscales como las Bahamas y Barbados.
A nivel estatal la situaci¨®n es peor pues los gobernadores simplemente han renunciado a recaudar impuestos para ganar votos. En 2012 se les hizo responsables del cobro a la tenencia, impuesto que representaba una quinta parte de sus ingresos. R¨¢pidamente lo eliminaron o recortaron. Hoy recaudan 23% menos que en 2012. Con lo que dejaron de recibir hubieran podido pagar 2.5 millones de pruebas de coronavirus para sus ciudadanos.
A ello se deben agregar los acuerdos de ¨¦lite. Gracias a un juicio ganado por la organizaci¨®n Fundar, sabemos que de 2007 a 2015 se condon¨® el pago de 197 mil millones de pesos de impuestos, favoreciendo principalmente a los ultra-ricos. De hecho, de acuerdo con datos p¨²blicos del Servicio de Administraci¨®n Tributaria, diez deudores se beneficiaron con uno de cada cinco pesos condonados. Destac¨® BBVA Bancomer, Productos Roche y Grupo Lala. De hecho, tan solo un a?o despu¨¦s de la condonaci¨®n, BBVA Bancomer ya le deb¨ªa otra vez al fisco.
Las deudas sin cobrar por el Estado mexicano ascienden a 211 mil millones de pesos. As¨ª mismo, L¨®pez Obrador ha denunciado que tan solo 15 empresas son responsables de 50 mil millones de pesos de adeudos. Las deudas de estos 15 contribuyentes equivalen al presupuesto completo de siete secretar¨ªas de estado. Finalmente, est¨¢n los para¨ªsos fiscales donde exdirectores de PEMEX, renombrados contratistas y socios del Chapo Guzm¨¢n comparten estrategias fiscales.
En M¨¦xico la evasi¨®n es un deporte que L¨®pez Obrador piensa terminar.
Las herramientas
Ponerle un alto en seco a la evasi¨®n fiscal le dar¨ªa m¨¢s recursos al gobierno mexicano que cualquier reforma fiscal de la que tenemos memoria. De 1990 a la fecha, la reforma fiscal que m¨¢s recursos logr¨® generar fue la de 2014 cuando, luego de la eliminaci¨®n de ciertas excepciones y la creaci¨®n de la factura electr¨®nica, la recaudaci¨®n aument¨® en 2.2 puntos del PIB. Bueno, pues a¨²n esa reforma ser¨ªa poca cosa.
Si se lograra eliminar la evasi¨®n de IVA, ISR, impuestos al arrendamiento, y si se empujara a los gobernadores a cobrar predial al menos al mismo nivel del promedio de Am¨¦rica Latina, se recaudar¨ªan 2.4 puntos del PIB adicionales.
Para lograrlo, el Gobierno mexicano ha comenzado una serie de cambios en su estrategia de cobro, siendo dos las principales.
Primero, la cancelaci¨®n de sellos. Anteriormente el fisco utilizaba la cancelaci¨®n de sellos como un ¨²ltimo recurso luego de m¨²ltiples audiencias. Ahora abogados fiscalistas explican que los sellos se cancelan con tan solo no acudir a una cita. Sin sellos una empresa queda inhabilitada para hacer cobros y por tanto operar.
Segundo, la v¨ªa penal. En los casos en los que los adeudos al fisco sean mayores a 8 millones de pesos, la defraudaci¨®n fiscal se puede ligar con asociaci¨®n delictuosa. Esto aumenta enormemente el costo de evadir. Anteriormente, la probabilidad de tener un juicio era m¨ªnima y a¨²n si se perd¨ªa, el castigo m¨¢s com¨²n era simplemente pagar el adeudo con recargos. Hoy, defraudar al fisco puede ameritar prisi¨®n sin derecho a fianza.
Adicionalmente, se ha demandado que todos los contadores reporten p¨²blicamente las estrategias fiscales que les proponen a sus clientes, se han realizado m¨¢s auditor¨ªas, y se ha mantenido a la Procuradur¨ªa de la Defensa del Contribuyente sin un procurador.
La directora del SAT ha declarado que ha cambiado su estrategia de reuniones. En vez de tratar los asuntos con despachos fiscales corporativos se re¨²ne directamente con los directores de consejos de administraci¨®n. As¨ª, ha comentado, en reuniones de solo 40 minutos los ha convencido de pagar lo que deben.
A nivel local la estrategia es m¨¢s sigilosa. La federaci¨®n est¨¢ empujando a que los Estados cobren m¨¢s impuestos al reducir la cantidad de recursos discrecionales que se les otorga a las entidades. Con menos recursos, los Estados ya han comenzado a aumentar los impuestos a la n¨®mina, crear grav¨¢menes ambientales, y hasta se discute si se debe poner un impuesto al mezcal.
La estrategia est¨¢ funcionando. La recaudaci¨®n ha ca¨ªdo ante la pandemia, pero no tanto como se habr¨ªa esperado debido a que varias empresas han pagado sus adeudos. Sumando lo pagado por Walmart, FEMSA e IBM, en menos de un mes el SAT ha logrado cobrar 17.5 millones de pesos, lo equivalente al presupuesto completo de la Secretar¨ªa de Cultura por un a?o.
As¨ª mismo, el SAT ha aumentado mucho su rentabilidad. Antes de que L¨®pez Obrador tomara posesi¨®n por cada peso invertido en fiscalizar se obten¨ªan 48 pesos, en 2019 se obtuvieron 80. Algo nunca visto.
Limitantes legales, ¨¦xitos pol¨ªticos
Sin duda, la mano dura en la fiscalizaci¨®n har¨¢ que paguen, por fin, los que por muchos a?os se aprovecharon de sus posiciones de privilegio para evadir sus obligaciones. Lo celebro. Lo que preocupa es que caigan con el mismo peso quien haya incurrido en una falta menor, o no intencional. Esto no est¨¢ bien.
El temor m¨¢s grande de esta estrategia es que se preste al abuso. Contadores temen no poder defenderse si PRODECON contin¨²a ac¨¦fala, y fiscalistas se quejan de que la segunda sala de la Suprema Corte de Justicia tiene demasiados magistrados con una visi¨®n favorable al Gobierno federal.
Adem¨¢s, los castigos son desproporcionados. La prisi¨®n preventiva es una violaci¨®n a la presunci¨®n de inocencia que debe abolirse del sistema de justicia mexicana. Por el contrario, ahora se abren puertas para que se use m¨¢s.
El uso pol¨ªtico de las auditor¨ªas y de la cancelaci¨®n de sellos es una bandera roja. El discurso del presidente de que todos los que est¨¢n con ¨¦l son honrados, y los que est¨¢n en su contra no, despierta temores de que las instituciones del Estado se usen de forma en extremo punitiva.
Independientemente de las cr¨ªticas y temores, como muchos cambios hechos por L¨®pez Obrador, esta reforma fiscal que no es legal sino operativa, es una estrategia pol¨ªticamente muy astuta.
Con este plan, el presidente mexicano se concentra tranquilo en desenmascarar a una ¨¦lite corporativa que sol¨ªa ser intocable. En vez de discutir una reforma fiscal que fragmente al pa¨ªs en ganadores y perdedores, se centra en implementar las leyes con las que ya todos est¨¢n de acuerdo pero que no aplicaban a una minor¨ªa. Una minor¨ªa que genera mucha animadversi¨®n.
Por su parte, la plutocracia sin un dejo de autocr¨ªtica no tiene arma alguna contra L¨®pez Obrador. Sin comprender que ya no pueden seguir enriqueci¨¦ndose de un pa¨ªs con el que no contribuyen, observan la implementaci¨®n de la ley como una venganza. Y solo atinan a decir que es una rencilla pol¨ªtica. No atinan a hablar de su responsabilidad sino de su victimizaci¨®n. Solo se agravian.
Por d¨¦cadas corporativos hab¨ªan amenazado con dejar de producir en M¨¦xico si se les cobraban m¨¢s impuestos. Lo que est¨¢ pasando hoy en M¨¦xico muestra que no lo har¨¢n. La amenaza era falsa. En parte esto se debe a que muchas de las grandes fortunas en este pa¨ªs no han surgido de competencia e innovaci¨®n sino de acceso privilegiado y poder de mercado. Por ello, si realmente se fueran de M¨¦xico, y dejaran de operar en un mercado cautivo, no queda claro que podr¨ªan sobrevivir. Qui¨¦n sabe si ser¨ªan competitivas. La verdad, sus productos no son tan buenos.
La tentaci¨®n
En lo personal no me parece que el principal temor de esta reforma fiscal sea su uso pol¨ªtico sino su conformismo. Una reforma que aumente 2.4 puntos del PIB la recaudaci¨®n suena espectacular, pero en realidad no es ni remotamente suficiente.
A¨²n si se llegara a eliminar por completo la evasi¨®n, algo imposible porque existe evasi¨®n hasta en Dinamarca, M¨¦xico llegar¨ªa a recaudar solo 18.5 puntos del PIB. Esto es menos que Ecuador y Honduras, y solo 55% de lo que recauda Brasil.
Esto es, a¨²n en el escenario ideal de L¨®pez Obrador, M¨¦xico se quedar¨ªa sin dinero suficiente para tener un sistema de pensiones digno y programas sociales suficientemente amplios para reducir la pobreza.
Ello sin contar que los c¨¢lculos de recaudaci¨®n se han hecho sin considerar el impacto que tendr¨¢ la pandemia. La reducci¨®n en la actividad econ¨®mica que est¨¢n causando las cuarentenas llevar¨¢n a una debacle en la cantidad de impuestos que puedan recaudarse. Y por tanto, comprometer¨¢n la eficacia que la estrategia pudo haber tenido en tiempos normales.
La realidad es cruda y a¨²n m¨¢s simple que la estrategia de L¨®pez Obrador por cobrar impuestos. Al final del d¨ªa ¨¦l, o quien le siga, tendr¨¢ que lidiar con realizar una reforma fiscal progresiva, y de verdad. Ojal¨¢ sea L¨®pez Obrador y sea pronto.