Violencia contra las estatuas
La violencia contra las estatuas no es algo nuevo. En la antig¨¹edad lo llamaban damnatio memoriae. Las picaban, las mutilaban, las arrastraban, las hac¨ªan desaparecer. As¨ª quer¨ªan olvidar lo que nunca podr¨ªa ser negado, porque la historia deja muchas clases de huellas y cicatrices, no solo las esculturas. Callar el pasado siempre se ha cre¨ªdo que era una forma f¨¢cil de olvidarlo; en realidad, se trata de una manera de autoenga?arnos, porque la historia no es algo que se pueda reiniciar. Cada segundo de la historia es lo que nos hace a todos como somos, tambi¨¦n a los que tiran estatuas a...
La violencia contra las estatuas no es algo nuevo. En la antig¨¹edad lo llamaban damnatio memoriae. Las picaban, las mutilaban, las arrastraban, las hac¨ªan desaparecer. As¨ª quer¨ªan olvidar lo que nunca podr¨ªa ser negado, porque la historia deja muchas clases de huellas y cicatrices, no solo las esculturas. Callar el pasado siempre se ha cre¨ªdo que era una forma f¨¢cil de olvidarlo; en realidad, se trata de una manera de autoenga?arnos, porque la historia no es algo que se pueda reiniciar. Cada segundo de la historia es lo que nos hace a todos como somos, tambi¨¦n a los que tiran estatuas al suelo. Una forma m¨¢s de vandalismo a la historia, al patrimonio, al arte. La historia es una herencia que nunca podremos hacer desaparecer, ni negar.
Mar¨ªa Engracia Mu?oz-Santos. Paiporta (Valencia)