Del chantaje a la amenaza h¨ªbrida
Los t¨¦rminos con que los expertos definen los fen¨®menos sociopol¨ªticos no siempre son inocentes. La demonizaci¨®n sem¨¢ntica de la migraci¨®n es un ejemplo, y tambi¨¦n yesca para la hoguera populista
Entre las pocas actividades que siguieron funcionando plenamente durante el confinamiento, est¨¢ el rinc¨®n de pensar de los think tanks, esos centros de an¨¢lisis que son una suerte de ar¨²spices del devenir del mundo. Sus valiosos diagn¨®sticos y prospectivas contribuyen a definir pol¨ªticas y a conformar, de manera cada vez m¨¢s central, la opini¨®n p¨²blica, aunque a menudo informen una neolengua que puede distorsionar la percepci¨®n de la realidad. Demasiada influencia, dicen sus cr¨ªticos, que les reprochan incurrir en sofismas o, como sucede a veces con las estad¨ªsticas, sostener una cosa y...
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Entre las pocas actividades que siguieron funcionando plenamente durante el confinamiento, est¨¢ el rinc¨®n de pensar de los think tanks, esos centros de an¨¢lisis que son una suerte de ar¨²spices del devenir del mundo. Sus valiosos diagn¨®sticos y prospectivas contribuyen a definir pol¨ªticas y a conformar, de manera cada vez m¨¢s central, la opini¨®n p¨²blica, aunque a menudo informen una neolengua que puede distorsionar la percepci¨®n de la realidad. Demasiada influencia, dicen sus cr¨ªticos, que les reprochan incurrir en sofismas o, como sucede a veces con las estad¨ªsticas, sostener una cosa y su contraria seg¨²n las circunstancias (o las conveniencias). Peque?as cuestiones de ret¨®rica, en fin, en las que pocos reparan, no hay m¨¢s que ver el parvo nivel de la conversaci¨®n en general.
Pero qu¨¦ ser¨ªa de nosotros sin los think tanks, con la ventaja a?adida de que uno siempre puede encontrar aquel que apuntale lo que se quiere decir y ese otro que confirme cuanto desee rebatirse, opinan los m¨¢s cr¨ªticos. Desde Chipre ¡ªpa¨ªs peque?o pero muy relevante en el marem¨¢gnum del Mediterr¨¢neo oriental¡ª, sorprende hallar en el an¨¢lisis de un think tank de Nicosia la caracterizaci¨®n de los migrantes que penosamente llegan a Grecia desde Turqu¨ªa como peones de una guerra h¨ªbrida contra Europa. Como suena. O para ser m¨¢s precisos, ¡°la migraci¨®n masiva como amenaza h¨ªbrida a la seguridad europea¡±.
El texto se refiere a las peri¨®dicas amenazas del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, de abrir el grifo de salida de los refugiados para presionar a Grecia y la UE. Nada que no hiciera en el pasado Marruecos regulando aviesamente el flujo de pateras en funci¨®n de las ayudas de Bruselas, pero entonces se le llamaba simplemente chantaje. La argucia del caballo de Troya es conocida desde Homero, as¨ª que Erdogan no inventa nada, tampoco con la pretendida conversi¨®n ¡ªy provocaci¨®n¡ª de Santa Sof¨ªa, que tiene a Grecia y Rusia muy enfadadas. Lo preocupante es el nuevo grado de demonizaci¨®n que arroja ese concepto de amenaza h¨ªbrida contra los seres por definici¨®n m¨¢s vulnerables: los que lo arriesgan todo por huir de la guerra y la miseria. El propio Chipre es hoy el pa¨ªs con mayor ratio per c¨¢pita de solicitantes de asilo de la UE.
Hay una l¨ªnea recta, directa, entre esa criminalizaci¨®n sem¨¢ntica, abstracta, y la hoguera populista a la que se les echa estos d¨ªas en zonas de Espa?a o Italia, culp¨¢ndoles de ser foco de contagio del coronavirus. Bastante condena tienen con sobrevivir en guetos, confinados ¡ªen toda la extensi¨®n de la palabra¡ª en los m¨¢rgenes de una sociedad y un mercado que los necesita para que no se pudra la fruta en los ¨¢rboles. As¨ª que cuidado con conceptos tan aparentes geopol¨ªticamente hablando como insanos: el de amenaza h¨ªbrida es solo el pen¨²ltimo, pero qui¨¦n sabe cu¨¢ntas piras m¨¢s puede prender.