Leonor crece
Hay un verano en el que las ni?as dejan de serlo sin ser a¨²n mujeres. No sabemos si Leonor de Borb¨®n Ortiz ha pasado el trance, pero, si no ha sido este verano, ser¨¢ el pr¨®ximo
Hay un verano en el que las ni?as dejan de serlo sin ser a¨²n mujeres. No sabemos si Leonor de Borb¨®n Ortiz ha pasado el trance, pero, si no ha sido este verano, ser¨¢ el pr¨®ximo. Como todas sus coet¨¢neas, de acuerdo. Pero, viviendo como todas en esa tierra de nadie, est¨¢ m¨¢s sola que ninguna. El 31 de octubre, la heredera al trono cumple 15 a?os. Le quedan tres para hacer de su capa un sayo si quisiera y pudiera, que no puede, pero ya se espera de ella que represente a un pa¨ªs que est¨¢ a bofetadas por todo, empezando por su futuro. Siendo que lo es una privilegiada, su sino no es envidiable. Mi...
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Hay un verano en el que las ni?as dejan de serlo sin ser a¨²n mujeres. No sabemos si Leonor de Borb¨®n Ortiz ha pasado el trance, pero, si no ha sido este verano, ser¨¢ el pr¨®ximo. Como todas sus coet¨¢neas, de acuerdo. Pero, viviendo como todas en esa tierra de nadie, est¨¢ m¨¢s sola que ninguna. El 31 de octubre, la heredera al trono cumple 15 a?os. Le quedan tres para hacer de su capa un sayo si quisiera y pudiera, que no puede, pero ya se espera de ella que represente a un pa¨ªs que est¨¢ a bofetadas por todo, empezando por su futuro. Siendo que lo es una privilegiada, su sino no es envidiable. Mientras el mayor dilema de su curso es hacer el bachillerato de ciencias o letras, o el bachillerato a secas, ella depende del Gobierno hasta para su plan de estudios. Intramuros, tampoco es todo color de rosa. Su repudiado abuelo Juan Carlos est¨¢ fuera de Espa?a sin fecha de regreso. Su t¨ªo I?aki, en la c¨¢rcel. Su t¨ªa abuela Henar tuitea soflamas contra la Corona. Y, a poco que est¨¦ en el mundo, ve a su padre puesto a caldo o adulado hasta la n¨¢usea en las noticias.
Estos d¨ªas la veremos en los premios que llevan su nombre, adorable exni?a entre vejestorios, dando un discurso que le han escrito otros mientras a sus abuelas Sof¨ªa y Paloma se les cae la baba a chorro. Juzgaremos sus vestidos, sus peinados, sus gestos. Le sacaremos faltas y sobras. Que si qu¨¦ mona, qu¨¦ lista, qu¨¦ cursi, que si es m¨¢s Borb¨®n u Ortiz, o viceversa. Comparaciones odiosas justo a la edad que pueden hacer m¨¢s da?o. Qu¨¦ sabremos nosotros, que la vemos siempre de uniforme. Qu¨¦ sabr¨¢ nadie si querr¨¢ te?irse de fucsia, hacerse un piercing en el s¨¦ptum, tatuarse la bandera arco¨ªris, salir pitando ante la que se le viene encima. Lo seguro es que, si no lleg¨® ya, andar¨¢ rondando el d¨ªa en el que las hijas lo m¨¢s que te contestan es d¨¦jame en paz, pesada. Pues eso. Dej¨¦mosla crecer en paz. Saqu¨¦mosla del barro. Las guerras ya vendr¨¢n solas.