?Qu¨¦ se juega Europa en las elecciones de Estados Unidos?
Los siete directores de los medios de la Alianza de Peri¨®dicos L¨ªderes en Europa (LENA) alertan en una tribuna conjunta del peligro que entra?ar¨ªa la reelecci¨®n de Donald Trump para la democracia y abogan por la regeneraci¨®n de las relaciones transatl¨¢nticas
El pr¨®ximo 3 de noviembre Estados Unidos se juega su futuro en una de las elecciones m¨¢s cruciales de su historia reciente. La cifra r¨¦cord de votos anticipados ¨Dalrededor de 80 millones de ciudadanos ya hab¨ªan votado este jueves¨D da una dimensi¨®n de la trascendencia de la contienda electoral entre el actual presidente, el republicano Donald Trump, y el candidato dem¨®crata, Joe Biden. Los siete directores de los medios que conforman la Alianza de Peri¨®dicos L¨ªderes en Europa (LENA, por sus siglas en ingl¨¦s) describen la importancia que tendr¨¢ para sus respectivos pa¨ªses el resultado de los com...
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El pr¨®ximo 3 de noviembre Estados Unidos se juega su futuro en una de las elecciones m¨¢s cruciales de su historia reciente. La cifra r¨¦cord de votos anticipados ¨Dalrededor de 80 millones de ciudadanos ya hab¨ªan votado este jueves¨D da una dimensi¨®n de la trascendencia de la contienda electoral entre el actual presidente, el republicano Donald Trump, y el candidato dem¨®crata, Joe Biden. Los siete directores de los medios que conforman la Alianza de Peri¨®dicos L¨ªderes en Europa (LENA, por sus siglas en ingl¨¦s) describen la importancia que tendr¨¢ para sus respectivos pa¨ªses el resultado de los comicios.
Maurizio Molinari, director de La Repubblica (Italia)
El resultado electoral tendr¨¢ un fuerte impacto en Europa e Italia por tres razones convergentes. Primero: el da?o econ¨®mico causado por la pandemia es de tal magnitud, tanto en Europa como en Estados Unidos, que exige una respuesta estrat¨¦gica a largo plazo por parte de las democracias industriales. Para volver a encarrilarse hacia el crecimiento mundial y que la relaci¨®n entre Estados Unidos y la Uni¨®n Europea sea exitosa, se necesitan l¨ªderes capaces de regenerar y fortalecer el v¨ªnculo transatl¨¢ntico. Segundo: el papel de China como rival global de Occidente est¨¢ ahora claro y esto requiere que la UE armonice sus pol¨ªticas e inversiones para no perder en una competici¨®n tecnol¨®gica con evidentes repercusiones geopol¨ªticas. Tercero: ya sean los derechos de la mujer como los de los homosexuales, de las minor¨ªas o de los migrantes, nuestros pa¨ªses necesitan una nueva receta para reforzar la protecci¨®n de los individuos para salvaguardarlos de la discriminaci¨®n y la agresi¨®n, aumentando las libertades personales y colectivas. Desde la reconstrucci¨®n econ¨®mica hasta el fortalecimiento de los derechos humanos en un duelo estrat¨¦gico con Pek¨ªn, Occidente necesita un v¨ªnculo transatl¨¢ntico m¨¢s estrecho y, por lo tanto, un presidente estadounidense decidido a fortalecer y rejuvenecer la comunidad de las democracias. Es a trav¨¦s de este lente que Europa e Italia miran el duelo entre el presidente actual, Donald Trump, y su rival Joe Biden para la Casa Blanca. Esperando que prevalezca un l¨ªder capaz de unir a Estados Unidos y llevarlos a ejercer con convicci¨®n su papel de l¨ªder del ¡°mundo libre¡±.
Adam Michnik, director de Gazeta Wyborcza (Polonia)
Durante los ¨²ltimos 70 a?os, los europeos hemos vivido con la convicci¨®n de que quienquiera que sea el presidente de Estados Unidos, las prioridades estrat¨¦gicas de la pol¨ªtica estadounidense permanecer¨ªan inalteradas. Hoy ya nadie cree en eso. Es importante para toda Europa, pero para Europa Central y del Este representa una amenaza inmediata. Polonia es uno de los pa¨ªses que conforman la UE y la OTAN y siempre ha visto su participaci¨®n en estas organizaciones como una especie de garant¨ªa de seguridad, despu¨¦s de d¨¦cadas sin medios de comunicaci¨®n libres, derechos humanos, tribunales independientes y sociedad civil. El problema es que todos estos valores han sido desafiados activamente desde hace varios a?os por la derecha nacionalista, que ejerce el poder, aunque no tiene el apoyo de la mayor¨ªa de los ciudadanos. La derecha de Europa oriental construye su capital pol¨ªtico sobre la xenofobia y el populismo, negando el sentido de la integraci¨®n europea. Pero mientras que Hungr¨ªa se orienta abiertamente hacia Mosc¨² y Pek¨ªn, Polonia sigue buscando el apoyo de Washington, ya sea simb¨®lico o real. Y la Administraci¨®n de Donald Trump se lo est¨¢ dando, aunque en todos los asuntos importantes para toda Europa, est¨¢ poniendo en peligro el aislacionismo, incluso cuestionando el sentido de la OTAN en un momento en el que Rusia est¨¢ llevando a cabo una agresi¨®n en el flanco oriental de la Alianza. Polonia est¨¢ dividida entre la fe en las ideas de los fundadores de EE UU y la pol¨ªtica de Trump, que se ha convertido en una caricatura de los valores estadounidenses. El cambio en la Casa Blanca puede dificultar a los populistas el desmantelamiento de la democracia liberal, aunque solo sea hasta cierto punto.
Javier Moreno, director de EL PA?S
Resulta tentador ¡ªy f¨¢cil, por lo dem¨¢s¨D analizar el resultado de las elecciones de EE UU en cualquier otro pa¨ªs, Espa?a en este caso, en t¨¦rminos estrictamente contables. C¨®mo afectar¨¢ a las relaciones comerciales o al presupuesto en Defensa. Tentador o f¨¢cil, ser¨ªa tambi¨¦n un error. O al menos una grave subestimaci¨®n de las consecuencias pol¨ªticas y morales que una reelecci¨®n de Donald Trump supondr¨ªa sobre el tejido democr¨¢tico de Espa?a. Este pa¨ªs ha visto en los ¨²ltimos a?os una legitimizaci¨®n de discursos y pr¨¢cticas pol¨ªticas que eran simplemente inaceptables hace una d¨¦cada. Un ascenso del populismo con t¨¢cticas y palabras copiadas ¡ªa veces de forma literal¡ª del presidente de EE UU. Varios Gobiernos regionales se sostienen con los votos de la ultraderecha. Sus portavoces se visten con los ropajes de Trump. Como dec¨ªa Tolstoi, cada pa¨ªs es desgraciado a su manera, y los problemas de Espa?a no van a desaparecer cuando se sepa qui¨¦n gan¨® la Casa Blanca. Pero si los estadounidenses echan a Trump, el ruido de su ca¨ªda resonar¨¢ en las plazas de Espa?a. Y fuerte.
Philippe G¨¦lie, director adjunto de Le Figaro (Francia)
Nunca somos s¨®lo espectadores de una elecci¨®n estadounidense. No hablemos ya de las interferencias y manipulaciones con las que se divierten los rusos, los chinos y los iran¨ªes, sin dominar realmente los efectos de su desinformaci¨®n. Pero las repercusiones globales ¡ªy especialmente transatl¨¢nticas¡ª de la elecci¨®n del hombre m¨¢s poderoso del mundo significan que nos estamos jugando mucho con cada elecci¨®n presidencial en Estados Unidos. Imaginemos el estado del mundo despu¨¦s de cuatro a?os m¨¢s de Donald Trump. ?Qu¨¦ quedar¨ªa de la OTAN, cuya credibilidad descansa menos en el aumento de los presupuestos de defensa que en el compromiso intangible de solidaridad del art¨ªculo 5? ?Qu¨¦ quedar¨ªa del sistema multilateral, gradualmente privado de financiaci¨®n, desacreditado e instrumentalizado por el primero de sus miembros fundadores? ?Podr¨ªa la Uni¨®n Europea aumentar su poder para no encontrarse entre el martillo americano y el yunque chino? ?D¨®nde estar¨ªan nuestros aliados, aparte de en nuestra propia familia europea? Sin cambiar necesariamente de rumbo, una victoria de Joe Biden producir¨ªa m¨¢s tiempo de maniobra y menos brutalidad. Pero el desaf¨ªo seguir¨ªa siendo el mismo: ganar nuestra independencia respecto a EE UU.
Ariane Dayer, directora de Tribune de Gen¨¨ve (Suiza)
?Est¨¢ Suiza madura para el advenimiento del hombre fuerte? A menudo parece so?ar con ello, enredada como est¨¢ en la complejidad de su sistema federalista y multiling¨¹e, que frena cualquier decisi¨®n clara, que iguala a los ciudadanos. A veces se estremece ante el deseo de la bestia y contempla, fascinada, este animal Trump que representa todo lo que nunca nos atrever¨ªamos a ser: gritos, mentiras, vulgaridades. Excesivo. Pero es precisamente la complejidad del sistema lo que neutraliza los intentos. Los que quer¨ªan imponerse han sido llamados a hacerlo desde el interior, integr¨¢ndose en lugares del poder legislativo o ejecutivo. Este fue el caso a nivel nacional de Christoph Blocher, el l¨ªder del Partido Popular Suizo (SVP) con su lucha contra la Uni¨®n Europea. Tambi¨¦n a nivel local, donde los intentos de divisi¨®n como el Mouvement Citoyens Genevois (MCG), por ejemplo, siempre llegan a su fin. ?C¨®mo mantener una postura antisistema cuando est¨¢s absorbida por ella? El populismo se enfrenta regularmente a la misma barrera. Pero eso no significa que conserven esa inocencia para siempre. Es sobre todo la salud econ¨®mica del pa¨ªs la que lo protege del triunfalismo. Si se deteriorara, si se deshiciera de las clases medias, podr¨ªa abrir las puertas a lo peor.
Ulf Poschardt, director de Die Welt (Alemania)
Alemania es una potencia mundial ¨Dcuando se trata de moralidad¨D. El pa¨ªs se ve a s¨ª mismo no solo como el alumno modelo de Europa, sino como una superpotencia humanitaria. En consecuencia, titulares como los que calificaron a Angela Merkel de ¡°L¨ªder del Mundo Libre¡± fueron b¨¢lsamo para el alma de una naci¨®n que ha basado su salvaci¨®n en el poder blando. Sin embargo, Alemania necesita a Estados Unidos m¨¢s que nunca. Este pa¨ªs no es solo ¡ªsino tambi¨¦n¡ª un mercado de venta de coches alemanes y una garant¨ªa para nuestra seguridad. Y de nuestra futura prosperidad, tambi¨¦n, porque Alemania es m¨¢s dependiente de la globalizaci¨®n que casi cualquier otro pa¨ªs. Adem¨¢s, en la medida en que la alianza transatl¨¢ntica se ha resquebrajado en los ¨²ltimos a?os, las fuerzas santurronas y proteccionistas que preferir¨ªan abandonar la Uni¨®n Europea por completo han ido en aumento en este pa¨ªs. Las democracias de Occidente solo pueden hacer frente a los desaf¨ªos del siglo XXI juntas, pero eso requiere transatl¨¢nticos en ambos lados. En Washington, pero sobre todo en Berl¨ªn.
Christophe Berti, director de Le Soir (B¨¦lgica)
Es una extra?a elecci¨®n la que tendr¨¢n que hacer los estadounidenses el pr¨®ximo 3 de noviembre. Una elecci¨®n entre un presidente de 74 a?os que ha sacudido todos los c¨®digos establecidos, se ha atrevido con todos los excesos, ha partido en dos a su pa¨ªs y ha desafiado todas las reglas internacionales y, por otro lado, un pretendiente de casi 78 a?os que aparece como un hombre del pasado que quiere ¡°reconstruir mejor¡± y volver a una cierta ¡°normalidad¡±. Es una elecci¨®n extra?a, en realidad. Pero una elecci¨®n inmensamente importante por c¨®mo Trump ha sacudido EE UU y todo el planeta, con una postura de eterno candidato, totalmente liberado de la noci¨®n de verdad y enredado en la crisis de la covid. Biden juega la carta anti-Trump al m¨¢ximo. Veremos si esta postura es suficiente para ganar y seguiremos siendo cautelosos, ya que las encuestas se equivocaron en 2016. Aunque nadie, a excepci¨®n del campo populista, echar¨¢ de menos a Donald Trump desde el punto de vista europeo, ser¨ªa simplista creer que la victoria de Joe Biden restablecer¨ªa ¡°como antes¡± las relaciones entre EE UU y la Uni¨®n Europea.