M¨²sica y vida
Cuando tom¨® el mando del Teatro Real era este un rinc¨®n aldeano. Mara?¨®n lo convirti¨® en centro ineludible de la ¨®pera internacional
Dijo Tolst¨®i famosamente que s¨®lo son interesantes las familias infelices porque las felices son todas iguales. Es una gran mentira del se?or conde. Todos y cada uno constatamos el inter¨¦s grande de la felicidad y el tedio de la desdicha. As¨ª, buen ejemplo, en sus Memorias de luz y niebla (Galaxia Gutenberg), Gregorio Mara?¨®n ha descrito la extensa vida de un hombre feliz. No es que no haya tenido sus dramas y problemas, pero de ello no se habla. He aqu¨ª la trayectoria de un ciudadano destinado, desde su nacimiento, a formar parte de esa ¨¦lite que toma las decisiones financieras, pol¨ªti...
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Dijo Tolst¨®i famosamente que s¨®lo son interesantes las familias infelices porque las felices son todas iguales. Es una gran mentira del se?or conde. Todos y cada uno constatamos el inter¨¦s grande de la felicidad y el tedio de la desdicha. As¨ª, buen ejemplo, en sus Memorias de luz y niebla (Galaxia Gutenberg), Gregorio Mara?¨®n ha descrito la extensa vida de un hombre feliz. No es que no haya tenido sus dramas y problemas, pero de ello no se habla. He aqu¨ª la trayectoria de un ciudadano destinado, desde su nacimiento, a formar parte de esa ¨¦lite que toma las decisiones financieras, pol¨ªticas, sociales o culturales en el coraz¨®n de un pa¨ªs y reh¨²ye el espect¨¢culo p¨²blico.
Hay en el libro una gran cantidad de nombres propios (el ¨ªndice onom¨¢stico tiene 27 p¨¢ginas), figuran entidades bancarias, centros de decisi¨®n ineludibles, todos los presidentes de la democracia y muchos altos cargos, as¨ª como las instituciones culturales m¨¢s notables de Espa?a. Si en su vida ha ido recorriendo Mara?¨®n todos los laberintos del poder econ¨®mico y pol¨ªtico, es en el terreno cultural en donde, a mi entender, se ha sentido m¨¢s a gusto.
Por ejemplo. Cuando tom¨® el mando del Teatro Real era este un rinc¨®n aldeano. Mara?¨®n lo convirti¨® en centro ineludible de la ¨®pera internacional. Su lucha contra las muchas fuerzas que se opon¨ªan a la renovaci¨®n del ente es, para m¨ª, lo m¨¢s vivo del libro. Nunca he entendido por qu¨¦ un ministro o un alto cargo querr¨ªa imponer a sus protegidos en un lugar tan especial, pero todos toparon con la rectitud de Mara?¨®n y fue ¨¦l quien eligi¨® los equipos desde el comienzo. Acostumbrado a tratar con tiburones de Wall Street miraba con sonrisa ben¨¦vola al funcionario que exig¨ªa un papel para su sobrinita. Suenan aplausos.