El mundo rico se vacunar¨¢ en 2021
Los pa¨ªses en desarrollo tendr¨¢n que esperar dos a?os m¨¢s

Las siglas del momento no son ERC ni PGE, sino BNT162b2, el taciturno nombre de la vacuna de Pfizer. Su aprobaci¨®n el martes por el regulador brit¨¢nico (MHRA) se ha adelantado a las agencias del medicamento estadounidense (FDA) y europea (EMA), por si nos hicieran falta m¨¢s siglas, y ha propagado por el planeta una ola de ansiedad que ha llegado de Londres a Wellington y de Ginebra a Tombuct¨². El revuelo est¨¢ justificado en parte, no solo por la luz al final del t¨²nel que ya hab¨ªa anunciado el doctor Tedros, director general de la OMS, sino tambi¨¦n por el hito cient¨ªfico e industrial que ha supuesto desarrollar una vacuna contra un virus desconocido en menos de un a?o, y con una tecnolog¨ªa (mRNA, o ARN mensajero) in¨¦dita para este prop¨®sito. El diablo, sin embargo, mora en los detalles.
Para empezar, lo peor que podr¨ªamos hacer es considerar ese optimismo cient¨ªfico como un est¨ªmulo a la relajaci¨®n de las medidas de aislamiento. Eso llegar¨¢, pero solo a lo largo del a?o que viene. Es perfectamente factible que alcancemos la inmunidad de grupo para las Navidades de 2021, pero filos¨®ficamente imposible que lo logremos para ¨¦stas. Los pol¨ªticos m¨¢s optimistas se dar¨ªan por satisfechos con ¡°salvar el verano¡±, y hasta eso est¨¢ en el aire. Incluso, el Gobierno brit¨¢nico, que ya cerca de la meta del Brexit se ha apuntado el r¨¦cord de velocidad en la evaluaci¨®n de datos y la firma de autorizaciones, empezar¨¢ la campa?a de vacunaci¨®n la semana que viene, s¨ª, pero solo con 800.000 dosis, que no dan ni para el 1% de su poblaci¨®n. Necesitamos un 70% para detener la pandemia, as¨ª que guarda la zambomba para otro a?o.
Luego est¨¢ el problema de la comunicaci¨®n p¨²blica de los datos, porque los ciudadanos solo conocemos la vacuna de Pfizer por una nota de prensa destinada a los dedos r¨¢pidos de Wall Street, y con gran ¨¦xito, por cierto. Los cient¨ªficos suelen exigir un paper, o publicaci¨®n profesional auditada por expertos independientes, para tasar como un resultado fiable lo que hasta entonces era un mero rumor. Es evidente, por otro lado, que la MHRA brit¨¢nica dispone de un dosier exhaustivo de Pfizer ¡ªno podr¨ªa autorizar la vacuna de otro modo¡ª y que, por tanto, esa informaci¨®n ya est¨¢ en manos de las dem¨¢s agencias reguladoras, que har¨¢n lo mismo en las pr¨®ximas semanas. Mientras llega el paper, estas autorizaciones suponen una garant¨ªa muy s¨®lida de la seguridad y la eficacia del f¨¢rmaco.
Las tres firmas m¨¢s avanzadas hasta la fecha (Pfizer, Moderna y AstraZeneca) pueden fabricar juntas 5.300 millones de dosis de aqu¨ª a finales de 2021, suficientes para inmunizar a un tercio de la poblaci¨®n mundial (recuerda que hay que poner dos dosis por persona). Eso son buenas noticias para el mundo rico, pero no para los dos tercios restantes.
La Uni¨®n Europea y otros cinco pa¨ªses desarrollados se han reservado ya la mitad de esos medicamentos, pese a suponer solo el 13% de la poblaci¨®n mundial. Era lo esperable. Pero hay que insistir en que esto es una pandemia, que por definici¨®n requiere inmunizar a todo el planeta. Otra vez lo estamos haciendo mal.
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