Eterna juventud
Las mujeres seguimos sin poder envejecer sin sufrir. Llevamos vi¨¦ndolo en el cine y en la televisi¨®n desde hace a?os. Una vez aparentas cierta edad, autom¨¢ticamente deja de haber papeles lo suficientemente decentes como para no convertirte en un clich¨¦. La mayor¨ªa de las veces pasas de ser vendida como el aliciente sexual a ser vendida como la figura materna, no existe un punto intermedio. Y aunque es cierto que las cosas han mejorado, sigue habiendo mucha m¨¢s representaci¨®n masculina en cuanto a diferencia de perfiles y edades. Hay una gran diferencia entre el rango del canon est¨¦tico de los ...
Las mujeres seguimos sin poder envejecer sin sufrir. Llevamos vi¨¦ndolo en el cine y en la televisi¨®n desde hace a?os. Una vez aparentas cierta edad, autom¨¢ticamente deja de haber papeles lo suficientemente decentes como para no convertirte en un clich¨¦. La mayor¨ªa de las veces pasas de ser vendida como el aliciente sexual a ser vendida como la figura materna, no existe un punto intermedio. Y aunque es cierto que las cosas han mejorado, sigue habiendo mucha m¨¢s representaci¨®n masculina en cuanto a diferencia de perfiles y edades. Hay una gran diferencia entre el rango del canon est¨¦tico de los hombres y el rango del canon de belleza femenino. A las mujeres, en pantalla apenas se nos permite no ser guapas, apenas podemos pasar de nuestra propia imagen. Pero me gusta pensar que, aunque contra el tiempo no podemos luchar, s¨ª que podemos seguir luchando contra todo lo dem¨¢s.
Iraides Climent. Madrid