El regreso de los hechos
¡®Desenchufado¡¯ Trump y sin portavoces mentirosos en la Casa Blanca, las realidades alternativas empiezan a cotizar a la baja
Ausentes al menos durante cuatro a?os, de nuevo est¨¢n aqu¨ª, claros, compactos, contundentes, indiscutibles. Los hechos empiezan a contar de nuevo, en vez de los sentimientos, las emociones y las noticias falsas. Las realidades alternativas cotizan a la baja. Como quer¨ªan los cl¨¢sicos del oficio period¨ªstico, los hechos ser¨¢n otra vez sagrados y las opiniones libres, y no el aberrante principio inverso. Ser¨¢ una noticia hist¨®rica si no se queda estancada en el lugar donde se est¨¢ produciendo, la Casa Blanca, y va desbord¨¢ndose hasta que las aguas de la verdad nos alcancen tambi¨¦n a todos nosotr...
Reg¨ªstrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PA?S, puedes utilizarla para identificarte
Ausentes al menos durante cuatro a?os, de nuevo est¨¢n aqu¨ª, claros, compactos, contundentes, indiscutibles. Los hechos empiezan a contar de nuevo, en vez de los sentimientos, las emociones y las noticias falsas. Las realidades alternativas cotizan a la baja. Como quer¨ªan los cl¨¢sicos del oficio period¨ªstico, los hechos ser¨¢n otra vez sagrados y las opiniones libres, y no el aberrante principio inverso. Ser¨¢ una noticia hist¨®rica si no se queda estancada en el lugar donde se est¨¢ produciendo, la Casa Blanca, y va desbord¨¢ndose hasta que las aguas de la verdad nos alcancen tambi¨¦n a todos nosotros.
Lo que explica el regreso de los hechos son otros hechos, tres concretamente, sin posibilidad de discusi¨®n ni alternativa. El primero es Trump unplugged, desenchufado y mudo, como resultado de una decisi¨®n pol¨ªtica y moralmente tan acertada como jur¨ªdicamente discutible: los magnates de las redes sociales decidieron callar su voz estridente e insurrecta, en una exhibici¨®n de poder tan excesivo que la democracia representativa no podr¨¢ dejar sin correcci¨®n.
El segundo fue la primera conferencia de prensa en la Casa Blanca de Joe Biden, despu¨¦s de cuatro a?os de mentiras, vejaciones y silencios a cargo de los serviles portavoces de Donald Trump y de ataques directos del presidente a los periodistas. El trumpismo degrad¨® una de las ceremonias m¨¢s interesantes del periodismo como es la comparecencia diaria de una persona autorizada para enfrentarse a las preguntas de los reporteros. La nueva portavoz, Jen Psaki, prometi¨® ¡°veracidad y transparencia¡± y expres¨® su ¡°respeto al papel de la prensa libre e independiente¡±. Hace cuatro a?os, el primer portavoz de Trump, Sean Spicer, inaugur¨® la presidencia con la primera denegaci¨®n de los hechos, en aquel caso que los asistentes a la toma de posesi¨®n de Trump fueron muchos menos que los que acompa?aron a Obama en 2008.
El tercer hecho es el m¨¢s trascendente, pues afecta a la salud y la vida de los ciudadanos. La m¨¢s relevante rama del conocimiento humano, la ciencia, eclipsada durante los ominosos cuatro a?os trumpistas, ha regresado con todos los honores. Lo ha contado Anthony Fauci, el sabio de las epidemias, que asesor¨® in¨²tilmente a Trump, tambi¨¦n en la sala de prensa de la Casa Blanca: ¡°La idea de que podemos subir aqu¨ª y hablar sobre lo que sabemos, lo que dice la evidencia cient¨ªfica, y dejar que la ciencia hable, es un sentimiento bastante liberador¡±.