A menos bosques m¨¢s coronavirus
Los lectores opinan sobre covid-19 y nuestro modo de vida, nuestros pol¨ªticos, la salud mental y la libertad de expresi¨®n
El coronavirus es, en parte, consecuencia de nuestro actual modelo socioecon¨®mico y ambiental, basado en la globalizaci¨®n, el sobreconsumo y los masivos desplazamientos. Lo que nos ha ocurrido con la pandemia tiene mucho que ver con la degradaci¨®n de las selvas o bosques tropicales para satisfacer la demanda de materia prima. En estos h¨¢bitats debilitados se propagan pat¨®genos que f¨¢cilmente saltan a la fauna silvestre, y de esta, al ser humano a trav...
El coronavirus es, en parte, consecuencia de nuestro actual modelo socioecon¨®mico y ambiental, basado en la globalizaci¨®n, el sobreconsumo y los masivos desplazamientos. Lo que nos ha ocurrido con la pandemia tiene mucho que ver con la degradaci¨®n de las selvas o bosques tropicales para satisfacer la demanda de materia prima. En estos h¨¢bitats debilitados se propagan pat¨®genos que f¨¢cilmente saltan a la fauna silvestre, y de esta, al ser humano a trav¨¦s de su consumo como alimento. Aumentar el aprovechamiento forestal sostenible de nuestras masas forestales reducir¨ªa la presi¨®n sobre los bosques tropicales y, por tanto, las p¨¦rdidas de h¨¢bitats de especies capaces de transmitir estas zoonosis. Si lo hici¨¦ramos, obtendr¨ªamos muchos beneficios; si no, iremos camino del desierto, tambi¨¦n en Espa?a, y de todos los males que traer¨¢ el calentamiento global. Invertir en bosques es calidad de vida.
Patricia G¨®mez Agrela. Madrid
Miradas a lo alto
Una y otra vez, se repiten situaciones en el Congreso de los Diputados en las que cada uno va a montar su n¨²mero medi¨¢tico, como corroboran sus miradas a lo alto para verificar la presencia de su imagen en las pantallas. Parecen insensibles a la dolorosa situaci¨®n global en que las ayudas a fondo perdido escasamente servir¨¢n para cubrir la reducci¨®n de ingresos del Estado en los tres ejercicios afectados. Nada sobre c¨®mo torcer la tasa de desempleo estructural ¡ªy la a?adida por la pandemia¡ª ni de c¨®mo afrontar los cambios obligados que nos demanda la Uni¨®n Europea. Nada para superar la par¨¢lisis de las renovaciones institucionales que llevan tiempo pendientes. Los soliloquios sectarios de los sedicentes l¨ªderes animan al gregarismo paralizador de los diputados. Me pregunto si son conscientes de la gravedad de la situaci¨®n que atravesamos.
Jes¨²s ?lava Fern¨¢ndez. Madrid
La salud mental es clave
La salud mental incluye nuestro bienestar emocional, psicol¨®gico y social, y nos condiciona la manera en la que sentimos, pensamos y tomamos decisiones. Por definici¨®n, la salud mental es algo indispensable. Sin embargo, seg¨²n la OMS, la salud mental es una de las ¨¢reas m¨¢s desatendidas de los sistemas de sanidad p¨²blica del mundo. La salud no existe sin la salud mental. No podemos conservar a lo largo del tiempo una buena salud f¨ªsica si nos encontramos desequilibrados psicol¨®gicamente. Por ello, sobre todo en la actual situaci¨®n pand¨¦mica, debemos fortalecer y preocuparnos por nuestro estado mental.
Laura Erice C¨ªa. Pamplona
Libertad de expresi¨®n
La libertad de expresi¨®n es un derecho fundamental que protege la difusi¨®n de ideas o pensamientos por parte de individuos o colectivos sin que por ello tengan que sufrir represi¨®n o censura. Se debe aceptar, con la misma normalidad, el ensalzar y el criticar; las palabras est¨¢n para ser utilizadas como uno crea conveniente, y tan ofensivas pueden ser para unos las que critican como para otros las que ensalzan. Nadie deber¨ªa ser privado de libertad por decir lo que piensa; ojal¨¢, en este mundo, se disparasen m¨¢s las palabras y enmudecieran las armas. Si queremos presumir de una democracia acorde con los tiempos, no pongamos rejas a expresarnos.
Fernando Marc¨¦n Letosa. Leci?ena (Zaragoza)
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